Aurore Bergé/Ministra de Igualdad francesa

“Lo importante es que, por fin, el #Metoo está sucediendo en Francia”

La ministra de Igualdad de Francia, Aurore Bergé, explica a Artículo14 que medidas como el blindaje del aborto en la Constitución se hicieron para "adelantarnos a la extrema derecha. No sabemos qué pasará en diez o 20 años"

Ministra de Igualdad
La ministra de Igualdad francesa Aurore Berge Efe

La ministra de Igualdad de Género y la Lucha Contra la Discriminación de Francia, Aurore Bergé, ha visitado Madrid para asistir al Global Summit of Women que en su 34ª edición se ha celebrado en la capital española. Entre reunión y entrega de premios, Bergé atendió a Artículo14 en los pasillos de este foro en femenino para fomentar la participación de las mujeres de todo el mundo a nivel empresarial y económico. Para la ministra, el principal reto de la igualdad es, “sin duda, lo que ocurre en el seno mismo de las familias. Porque si no llegamos a la división de tareas, a la división de roles, las consecuencias son para toda la vida profesional y social de las mujeres. Es también lo que limita su desarrollo profesional y salarial”. Y esto -confiesa Bergé- “esto no puede ser decretado por ley, es un cambio cultural”.

A pesar de ser ministra en uno de los Gobiernos más relevantes de la escena internacional, Bergé se muestra cercana en las distancias cortas. Habla con seguridad de los logros del Ejecutivo francés en materia de igualdad, pero no oculta que aún queda un largo camino por recorrer.

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La ministra de Igualdad de Francia, Aurore Bergé

Bergé, que antes de ser la titular de Igualdad había sido de Solidaridad, Independencia Personal y Discapacidad, asegura a Artículo14 que uno de los motivos por los que Francia blindó el derecho a la interrupción del embarazo en su Carta Magna, es precisamente por el avance de las fuerzas de extrema derecha.

“Hemos modificado la Constitución por el temor al avance de la extrema derecha. Hemos integrado e incluido el derecho al aborto en la Carta Magna francesa para adelantarnos a la extrema derecha, porque no sabemos qué pasará en diez o 20 años”, explica la ministra.
Profesionalmente, vivió este momento histórico “desde ambos lados”. “Primero como diputada, y después como ministra”. Cuando era parlamentaria, Bergé “era la presidenta del grupo mayoritario en la Asamblea Nacional y presenté este proyecto de ley”. Después, ya como ministra del Gobierno Macron, “me encargué, junto con el ministro de Justicia, de que se aprobara”.

Un día histórico para Francia

En una nota más personal, “aquel día, la jornada de votación fue un momento histórico muy conmovedor para mí. Estuve acompañada por mi madre, quien había tenido un aborto en un momento que era ilegal en Francia y también se podía ir a la cárcel por esto. Ella arriesgó su vida porque las condiciones de salud no eran buenas para ella”, recuerda emocionada la ministra.

En ese sentido, Bergé aboga también por que se incluya el aborto en la Carta de Derechos Fundamentales de la UE. “Hemos tenido un debate en el Parlamento Europeo, y aunque son los jefes de Estado y de Gobierno de los 27 los que tienen la última palabra, las fuerzas de extrema derecha en la Eurocámara se han opuesto”.

“Cada vez que los movimientos conservadores asumen el poder, los derechos de las mujeres retroceden”

En su opinión, “lo que vemos en todos los países de Europa es que cada vez que los movimientos conservadores asumen el poder, los derechos de las mujeres retroceden”.

“El ejemplo más reciente es Italia”, añade la ministra. “No han recortado oficialmente el derecho al aborto, pero los grupos antiabortistas ya pueden entrar en las clínicas donde se practican abortos para hacer campaña contra ellos”.

Cabe recordar que Francia es la nación de la UE que más tasa de fertilidad tiene (1,79). La inferior es de Malta (1,08), país donde aún es ilegal abortar. En pleno invierno demográfico, la tasa de natalidad “se queda alta dentro de la UE, pero empieza a decrecer”, admite Bergé. “En Francia tenemos una política muy específica de acogida de los niños pequeños, de los bebés y las guarderías para ayudar a que las madres puedan volver al trabajo”. Esto lo “queremos ampliar para que todas las mujeres que quieran o no quieran niños, puedan trabajar y que no sea su muerte profesional”.

Un #Metoo de figuras importantes para los franceses

Al preguntarle a la ministra sobre porqué el movimiento #Metoo se está produciendo en este momento en Francia, Bergé reconoce que “es muy difícil responder por qué hoy. Lo que es importante es que, por fin, está sucediendo ahora en Francia”. La titular de Igualdad gala indica que, “tenemos a mujeres que ahora se expresan cuando quizás antes no eran capaces de hacerlo. Mujeres a las que los franceses se adhieren porque son también figuras importantes para los franceses, las conocen desde hace mucho tiempo y forman parte de su patrimonio. Es importante que lo hagan”.

Recientemente, en Artículo14 publicamos un aumento de las violaciones y de las violaciones en grupo en Francia. La ministra es tajante. “En primer lugar, hay que entender lo que es la violación y creo que todavía tenemos falsas representaciones de las cifras. Porque la violación no es algo que ocurra en un callejón oscuro o en un aparcamiento, es ante todo algo que ocurre en la intimidad. Nueve de cada diez mujeres que han sido víctimas de una violación conoce a su agresor”. Así que, “ante todo hay que cambiar esta representación para mejorar la prevención y el apoyo a las mujeres que han sufrido este trauma”.

Durante su estancia en Madrid, Bergé se mantuvo una reunión bilateral con su homóloga española, Ana Redondo, en el ministerio de Igualdad. “Nos hemos visto ya varias veces, sobre todo durante las reuniones en Bruselas. La semana pasada participamos en la primera EPSCO dedicada exclusivamente a la Igualdad”, confiesa.

Francia-España

La ministra francesa de Igualdad, Aurore Bergé, junto a su homóloga española, Ana Redondo

En los últimos años, varias ministras francesas de Igualdad se han interesado en cómo lucha España contra la violencia de género. “Por supuesto, queremos entender cómo se está luchando frente a esta lacra. De hecho, hemos avanzado mucho en Francia durante los últimos años. Con la formación sistemática de los policías, los gendarmes, los jueces…”. Ahora en Francia, “tenemos lo que se llaman brazaletes “antiacercamiento”. Para que los que las han agredido no puedan estar cerca de las víctimas de violencia de género y no vuelva a pasar”.

También, “tenemos lo que se conoce como teléfonos de peligro grave, lo que significa que, cuando una víctima de violencia tiene un teléfono, tiene prioridad inmediata para ponerse en contacto con la Policía”, detalla la ministra.

Prostitución

Por último, “en cuanto a la cooperación bilateral, también la ministra española estaba muy interesada en lo que estamos haciendo en Francia para luchar contra el sistema de prostitución”, reconoce Bergé. En el país vecino, la prostitución es ilegal, pero se penaliza al cliente y no a los trabajadores sexuales.

Sobre si, al igual que en España, existen en Francia negacionistas de la violencia de género, la ministra expone que “como en todas las democracias, tenemos lo que se conoce como el “backlash, que significa que cada vez que avanzamos en derechos, obviamente hay quien quiere retroceder”. Sin embargo, “estamos más en un momento y en un movimiento en Francia de progresión de derechos”, afirma Bergé.

Lo cierto es que Francia sale bien parada en el Índice de Igualdad de Género de la UE, sobre todo saca buena nota en el ámbito de poder. “Ya cuenta con una serie de leyes para garantizar que las mujeres estén representadas en los puestos de poder, tanto en la política como en el mundo empresarial, en los consejos de administración”. El presidente Emmanuel Macron, “decidió que la igualdad entre mujeres y hombres es su gran prioridad. Desde hace dos quinquenios, somos un gobierno estrictamente paritario. Desde 2017, sin interrupción, siempre ha habido tantas mujeres como hombres en el Gobierno”, asevera orgullosa Bergé.