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Alegría comparte comida y confidencias con Salazar, cesado por acosar a subordinadas

La ministra portavoz y el ex secretario de Acción Electoral comieron este lunes pese a que el Gobierno tiene pendiente la investigación por las denuncias de las mujeres que trabajaron para él en Presidencia

Pilar Alegría y Paco Salazar comen en un restaurante italiano de Madrid
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Pilar Alegría y Francisco Salazar comieron este lunes en un céntrico restaurante de Madrid. Así lo atestiguan las imágenes a las que ha tenido acceso Artículo14. Del que iba a ser nombrado adjunto a la secretaría de Organización socialista este verano, de no ser por los testimonios de algunas de sus trabajadoras denunciando casos de acoso en Moncloa, poco se sabe. En realidad, nada, salvo el contacto con la cúpula del Gobierno que hoy desvela este periódico.

Según ha podido saber este medio, el encuentro se produjo en un restaurante italiano ubicado en el céntrico barrio de la capital de Chueca, muy cercano al Congreso de los Diputados. Alegría no tenía el lunes agendado ningún acto oficial.

Se da la circunstancia de que la portavoz, y actual ministra de Educación, fue quien defendió públicamente  a Salazar cuando salieron a la palestra los casos de mujeres que denunciaron acoso por parte del alto cargo de Presidencia del Ejecutivo de Sánchez. “Es un compañero absolutamente íntegro”, afirmó, tras conocerse las denuncias de las mujeres que trabajaron para él, y apuntó que lo conocía desde hacía “muchos años”, por lo que hablaba de su experiencia personal.

Pilar Alegría y Paco Salazar, en el restaurante
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Al dimitir de sus cargos quien fuera uno de los principales apoyos de Sánchez y Secretario de Acción Electoral y Análisis de la Ejecutiva Federal antes de renunciar, Alegría matizó sus palabras, calificó de “necesario” el paso dado y puso en valor la “investigación” que el partido iba a abrir para esclarecer los hechos.

Y lo cierto es que hasta la fecha no se tienen datos de dicha investigación. Al ser los testimonios de las mujeres  anónimos, y  no haber acusaciones concretas, ni tampoco utilizar el canal de denuncias,  el asunto terminó en la Comisión de Ética y Garantías, y allí murió, o al menos no se ha conocido nada al respecto.

Por su parte, el Partido Popular entró de lleno en este asunto y preguntó en reiteradas ocasiones a Salazar si habían puesto en manos de la Fiscalía los casos de acoso, o si se le había abierto un expediente. También se puso sobre la mesa si el presidente del Gobierno conocía los hechos desde 2018, tal y como publicaron algunas informaciones. Según publicó este medio tras mantener conversaciones con una persona que trabajó para él: “Lo sabía todo el mundo”.

Lo que sí generó el caso fue el anuncio de un refuerzo de los mecanismos internos del PSOE, ya que las denuncias de estas mujeres no se hicieron a través de los protocolos internos anti acoso del Ejecutivo, sino a través de eldiario.es. 

Los cursos de concienciación anti acoso

De lo que sí se ha tenido constancia ha sido de la celebración durante el pasado mes de septiembre de los cursos de “concienciación” para denunciar a través de dichos cauces. Unos cursos que no han sido de obligatoria presencia, sino que manera voluntaria. Si el Real Decreto 247/2024 establece que deben ser de asistencia presencial, el Ejecutivo no lo consideró necesario. “Son voluntarios, se realizan durante el horario laboral y animamos a todos los trabajadores y trabajadoras a que los hagan”, reflejaba el correo. Entre una de las cuestiones que se abordaban, los cursos establecían el deber del personal público de poner en conocimiento los casos de acoso que conozca. En este cursillo de 38 páginas, presentado a través de un power point dentro de La Moncloa, algunas trabajadoras denunciaron a este medio que el procedimiento les parecía ineficiente, en cuanto a la duda de que se pudiera guardar la imparcialidad de criterio.

Porque, según establece el mecanismo, el comité de asesoramiento lo integrarán dos personas del Ministerio de Presidencia o de la Abogacía General del Estado. Una tendrá categoría de asesoría confidencial. Dos representantes del personal del Ministerio de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, elegidos por los representantes de las organizaciones sindicales presentes en la Mesa Delegada del Ministerio. “¿Y si una de ellas conoce al denunciado y guarda relaciones de amistad o de interés profesional con él? ¿Podrá guardar los criterios de imparcialidad?”

 

La relación entre Sánchez y Salazar

Salazar fue una figura clave  en el proceso para que Sánchez recuperara la Secretaría General del partido en el año 2017. Si, como apuntan miembros del PSOE, el presidente conocía estos casos de acoso, el presidente no sólo no lo cesó, sino que lo mantuvo en altos cargos como hombre de confianza. Salazar fue clave para movilizar el apoyo militante frente contra el aparato tradicional del partido socialista, y por esta labor fue posteriormente compensado por Sánchez. Salazar coincidió con Alegría en presidencia desde 2018 hasta 2025, en que fue cesado. Si uno fue una de las patas de apoyo del presidente hasta su cese, Alegría lo ha sido y es. Hasta el punto de que, además de ser vicepresidenta, ministra y portavoz del Ejecutivo, el pasado mes de octubre Sánchez la confirmó responsable de política autonómica en la ejecutiva federal.

El caso de acoso de uno de los hombres de confianza de Sánchez se une a las conductas machistas del del ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, y su asesor, Koldo García, que se intercambiaban prostitutas de manera asidua, según los informes destapados por la UCO. Unos informes que desataron una corriente de indignación entre las votantes feministas.

Una parte del informe de la UCO con el lenguaje en clave que usaban Ábalos y Koldo

Ante estos continuos casos machistas, Sánchez no ha dudado en cesar a sus hombres de confianza, pero posteriormente las investigaciones por parte del Gobierno están paralizadas. En el caso Salazar, se desconoce si el Gobierno ha dado cobertura a las víctimas.

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