En privado, en el equipo de campaña de María Guardiola continúan asegurando que la mayoría absoluta es factible. Solo quedan dos días de campaña electoral antes del examen con las urnas el próximo 21 de diciembre, y el objetivo final de los populares es conseguir sacar rédito del desgaste del PSOE. “La clave va a ser hasta donde donde caiga el PSOE y dónde se reparta”, explican las fuentes consultadas, con los últimos sondeos internos en la mano.
En estos momentos, según los últimos trackings del PP, el PSOE estaría “en caída libre”, llegando a perder 2,74 puntos en una semana. “Y la tendencia es que podría ser aún peor” para Miguel Ángel Gallardo “y podría caer hasta dos puntos más” de aquí a las urnas, auguran estas fuentes. Si estos datos se confirman y funciona el trasvase del PSOE al PP o a la abstención, los populares dan por seguro que Guardiola podría tocar la mayoría absoluta

Por tanto, en el PP, atendiendo a la ley D’hont, están muy pendientes en la recta final a esa “caída del PSOE”. El escenario más favorable, explican, es que los socialistas desencantados cogiesen la papeleta de Guardiola. Pero si los populares no logran captar esos dos puntos necesarios, también les serviría que se fuesen a la abstención, según el análisis de los restos de los votos. Ahí estaría hecha la mayoría para Guardiola, que se podría alzar con esos 33 diputados de la Asamblea.
Así, la campaña del PP extremeño está muy dirigida en esta recta final a apelar al electorado socialista más desencantado. “Buscar la autodestrucción del PSOE”, arguyen en el cuartel de los populares extremeños. En sus intervenciones, Guardiola no ha abandonado su tono moderado, muy enfocado en la política territorial y no en la nacional. Y distanciándose en todo momento de Vox.

Gobernar sin Vox
“Si nos ceñimos a lo que están diciendo las encuestas, dicen que los extremeños prefieren que yo sea la presidenta. Que soy la candidata más valorada para esa tarea. El resto de partidos que tendrán que decir y explicar si van a escuchar a la mayoría de extremeños. O si, por lo contrario, escucharán a sus líderes nacionales”, dijo la presidenta en una entrevista con ABC, al ser preguntada si un gobierno en solitario es la única opción que contempla.
En Génova, ahora, respaldan ese plan y aseguran que si Guardiola se acercase a la absoluta, solo necesitaría la abstención de Vox. “Es distinto a 2023 cuando se precisaba el sí de Vox para gobernar”, recuerdan.
Guardiola, sin agenda
Lo cierto es que la campaña de Guardiola está siendo calculada al milímetro, y sin un exceso de focos. El lunes realizó una visita a un pueblo de Badajoz, con declaraciones a los medios. La última vez que se subió a un escenario fue el sábado en Navalmoral de la Mata, junto a Alberto Núñez Feijóo. La presidenta ha reducido su agenda al máximo en esta campaña.
Según las tendencias que manejan en el PP, es el PSOE el único que baja mientras que es Podemos el que más sube, hasta un 1,27% en una semana. Vox continúa también ascendiendo mientras que el voto al PP está estabilizado, con un crecimiento de un 0,14% en los últimos siete días.
De momento, sus incursiones en medios de comunicación, también han sido muy limitadas. Tan solo tres entrevistas a medios nacionales. No acudirá al debate de RTVE, lo que en el PP ven una decisión de “riesgo” por dejar “la silla vacía” y todo el espacio a Vox para defender el centroderecha. Este viernes, protagonizará dos actos de cierre; uno por la mañana en Cáceres y otro, por la tarde, en Badajoz. Será el día en el que entre en el cuerpo a cuerpo contra Pedro Sánchez y Santiago Abascal.


