Ciberseguridad

Alerta por la brecha de seguridad que deja el boicot de EE UU al contrato con Huawei

Expertos diplomáticos y militares advierten de que EE UU nos sitúa como un socio no fiable al restringirnos el intercambio de información: "No tenemos una política con interés nacional y eso nos aísla y desprotege"

Margarita Robles y Fernando Grande-Marlaska
Kiloycuarto

La aproximación de España a China tras el viaje del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al gigante asiático el pasado mes de abril, fue definido como un avance hacia el multilateralismo, pero el continuo acercamiento del Ejecutivo realmente progresa hacia un aislamiento respecto a Estados Unidos y Europa, sin que a su vez seamos un socio prioritario para el país gobernado por Xi Jinping.

Así lo manifiestan expertos militares y diplomáticos en conversación con este medio, tras la reciente operación del Gobierno con la empresa tecnológica Huawei, por el que el ministerio del Interior ha firmado la adjudicación de un contrato por valor de 12,3 millones de euros. El objetivo es de este sello es encargar a la compañía la custodia digital de las escuchas policiales ordenadas por jueces y fiscales. O lo que es lo mismo: permitir que el principal adversario en el tablero internacional de Estados Unidos acceda a información confidencial de nuestro país.

Pedro Sánchez y el presidente chino Xi Jinping
Kiloycuarto

Y, lo que se temía en Europa ya ha sucedido: Estados Unidos ha puesto en solfa el intercambio de inteligencia con España, según ha avanzado Libertaddigital. Lo que ha puesto en situación de alerta a la Comisión Europea, máxime después de que en tras la reunión mantenida entre Trump y Ursula Von Der Leyen terminara con una advertencia del presidente estadounidense de subir los aranceles al 35% a los productos europeos. “El clima es de creciente preocupación por la irresponsabilidad del Gobierno español”, manifiesta un eurodiputado a este medio. “Si los servicios de inteligencia de los Estados miembros de la UE y la OTAN restringen el intercambio de información por supuesto que España tendrá que reaccionar y romper el contrato”.

Países que han reconducido los aranceles en la guerra comercial de Trump
Reunión entre Von der Leyen y Donald Trump
Andrew Harnik

España se presenta como un socio no fiable

Desde un punto de vista militar, la cuestión va más allá. “No tenemos una política con un interés nacional y eso nos aísla y desprotege”, informa un coronel que ha trabajado en la división de Inteligencia del Estado Mayor de la Defensa. “España es un país roto. Política y administrativamente”.

Este medio ya informó de que Rick Crawford, miembro del Comité Permanente de Inteligencia de la Cámara de representantes, emitió un comunicado mostrando su preocupación al poco tiempo de firmarse los contratos con Huawei. “Es casi inimaginable. España está jugando con fuego al poner en riesgo su seguridad nacional y la de sus ciudadanos. Al utilizar a un conocido agente del Partido Comunista Chino para recopilar y almacenar cantidades insuperables de datos sensibles, España se ha vuelto vulnerable a claras amenazas a la seguridad y la soberanía, no solo de sí misma, sino también de sus aliados en todo el mundo”.

“Si no tenemos política exterior estamos jugando a las canicas”

Este coronel considera que el hecho de que Sánchez haya actuado por libre, desoyendo las advertencias de la UE, tiene la lectura del escaso peso a nivel internacional que tiene España. En 2020, la Comisión Europea recomendó a los Estados miembros excluir a proveedores de “riesgo elevado” de telecomunicaciones 5G, y una decena de países europeos han excluido a los suministradores chinos.

“La cuestión de la inteligencia es como si tú tienes un mercado persa. Si tú tienes algo que ofrecer pues todo el mundo te hará la pelota y si no pues te sonríen”, resume este coronel de manera coloquial. “Si te colocan una jerarquía de utilidad es por tus fuentes y, sobre todo, por el contexto que estás fabricando. Si en España no tenemos política exterior pues jugamos a las canicas con la inteligencia, que es información procesada”.

El escaso poder de Europa en el mapa

Washington y Pekín definen el orden mundial y cada vez exhiben más su supremacía sobre el resto. Europa es consciente de que la diplomacia con Trump, que trata al viejo continente de forma pública como un lastre al que mantener en la OTAN, debe ser con guante de seda, y la postura frontal del Gobierno español no cuaja en esa directriz. “Europa no es nadie en este momento. Ursula Von der Leyen no puede tomar decisiones ahora. Si pintáramos algo, ya alguien habría impedido el contrato con Huawei”. Empresa que, además, debe colaborar por ley con los servicios de Inteligencia del Beijing.

La postura europea respecto a España

No obstante, la capacidad de maniobra de Europa respecto a estos contratos de España es altamente limitada, por no decir escasa. “La Comisión no puede imponer sanciones porque sólo podrían llevarse a cabo como consecuencia de una sentencia judicial del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, y aún no estamos en esa etapa”, explica un alto diplomático. “Previamente la Comisión debería elevar el asunto a la atención del TJCE, pero el Gobierno español con este contrato no viola la legislación comunitaria de efectos vinculantes, lo que hace es desoír las recomendaciones de seguridad de la Unión Europea”.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el pasado viaje a China
Efe

Sin poder de establecer una relación geoestratégica con China

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha defendido el contrato con Huawei después de que el PP haya solicitado su comparecencia, la de la ministra de Defensa, Margarita Robles, y del titular del Interior, Fernando Grande Marlaska, para dar explicaciones sobre el contrato. “La ciberseguridad está garantizada con los más altos estándares europeos”, ha zanjado el asunto el ministro. Por lo que, a su juicio,  “España no tiene que atender a más advertencias porque ya está atendiendo a esos estándares”. “Todo lo demás”, ha aseverado Albares, “es demagogia”.

No obstante, diplomáticos cuestionan la opinión en cuanto a que, independientemente de una cuestión de ciberseguridad, no ven una utilidad geoestratégica en este acercamiento a China, ya que España “no tiene el peso suficiente para construir una relación geoestratégica con China, es imposible”, afirman. Y, en cambio, “con EE UU continúa erosionando una relación que ya es compleja desde Zapatero”.