El eurodiputado y líder de Se Acabó La Fiesta (SALF), Luis ‘Alvise’ Pérez, ha reconocido en su declaración voluntaria de este viernes en el Tribunal Supremo (TS), por un presunto delito de financiación ilegal, que recibió 100.000 euros del empresario Álvaro Romillo, también conocido como ‘Criptospain’.
En ambas declaraciones se ha afirmado la donación de los 100.000 euros, pero el eurodiputado ha dado una versión diferente sobre el uso que se ha hecho de ellos. Alvise ha negado que los usara para la campaña de SALF a las elecciones europeas del 9 de junio de 2024. En cambio, Romillo, que ha comparecido como imputado, sí ha asegurado que le dio el dinero para el partido.
‘Alvise’, que ha declarado durante aproximadamente una hora contestando solo a preguntas de su abogado y del magistrado instructor, ha negado rotundamente que la aventura electoral de SALF se financiara de forma ilegal, según las fuentes jurídicas consultadas por Europa Press.

Billetes en un maletín
El líder de SALF ha explicado que recibió 100.000 euros de Romillo por la charla que dio sobre “libertad financiera” en el Hipódromo de Madrid en un acto organizado por el empresario, un hecho no relacionado con la campaña electoral de las elecciones europeas.
Asimismo, ha detallando que el dinero se lo dieron dos trabajadores de éste en sus instalaciones de Centinel, en un maletín negro con diez fajos de 10.000 euros cada uno en billetes de 50 y 100 euros.
También ha sostenido, de acuerdo con las citadas fuentes, que llevó ese dinero a su casa pero que no lo gastó en la campaña de SALF, que afirma que le costó poco más de 30.000 euros, de ahí –ha asegurado– que no lo reflejara en las cuentas de SALF.

Sobre los 100.000 euros, ha precisado que usó aproximadamente la mitad en gastos personales, entre los que ha mencionado viajes personales y profesionales. El resto ha indicado que sigue a su disposición.
En el auto del pasado mes de abril, el Supremo afirmó que “dichos delitos resultarían responsables tanto ‘Alvise’, ya que “aparece como administrador electoral del partido”, como Romillo, “como donante del partido, con entrega de cantidades superiores a las permitidas y como autor de un delito electoral”.
Romillo afirma lo contrario
En cambio, Romillo, que también ha declarado este viernes ante el TS, aunque en calidad de imputado, ha sostenido que dio esos 100.000 euros a ‘Alvise’ para la campaña electoral de SALF, confirmando así lo que ya expuso ante el juez que investiga la presunta estafa piramidal de Madeira Invest Club (MIC) en la Audiencia Nacional (AN).
“Se le han dado 100.000 euros a ‘Alvise’ y él ha testificado que no se los he dado para el uso de la campaña. En todas las conversaciones que se aportó en su día, son para el uso de la campaña. No es de ningún evento ni es de ningún pago. Me he ratificado absolutamente en todo lo que se dijo en el caso de la Audiencia Nacional, al 100%”, ha dicho en declaraciones a la prensa.

Romillo ha especificado que ‘Alvise’ “quiso poner un testaferro, que es una empresa que se llama Somos Libres, para que se hiciera un pago por transferencia” pero que “no se le hizo”. De acuerdo con ‘CryptoSpain’, ese supuesto testaferro “se dedica a temas de ocio nocturno y prostitución”.
Interrogado por los periodistas sobre la razón por la que le dio esos 100.000 euros, el empresario ha contestado que era para hacer promoción de Centinel, “una de las actividades” que se desarrollaban a través del MIC. Pero, ha indicado, “como no lo llegó a hacer”, entendieron que ese dinero era para “cualquier otro servicio relacionado con su futuro puesto o con su futuro puesto de poder”. “No quedó definido”, ha señalado. No obstante, Romillo ha defendido que, en lo tocante a sus gestiones con ‘Alvise’, la política le daba “igual”. “En realidad, nosotros lo que queríamos era ganar dinero”, ha aseverado.
Según fuentes jurídicas, la defensa de Romillo ha entregado copia del contenido de su móvil con las conversaciones con ‘Alvise‘, junto a un informe pericial encargado por sus letrados, si bien la acusación popular que ejerce el PSOE ha reclamado que se contrastara y el magistrado instructor, Julián Sánchez Melgar, ha accedido, ordenando volcar el contenido del teléfono del empresario, que ha explicado que tendrá que volver al Supremo a entregar el dispositivo.
Choque con la prensa
Al margen de las pesquisas judiciales por la presunta financiación ilegal, las declaraciones de este viernes han estado marcadas por los rifirrafes a las puertas del alto tribunal. ‘Alvise’, que ha sido el primero en salir, ha protagonizado un enfrentamiento con la prensa, que ha terminado con los periodistas retirándole los micrófonos y grabadoras.

Romillo, por su parte, se ha visto increpado por un hombre que ha dicho ser uno de los afectados por la presunta estafa piramidal del MIC. “¿El dinero cuándo va a aparecer?”, le ha dicho.
“Que todo el mundo sepa que seguimos trabajando para que el procedimiento dure lo menos posible y se pueda cumplir con los contratos. Hay muchísima gente afectada y trabajamos con ellos”, ha afirmado el empresario.
“Poco me parecen” 100.000 euros
Sánchez Melgar citó tanto a ‘Alvise’ como a Romillo tras abrir causa por un presunto delito de financiación, aunque apuntó también a delitos de estafa, apropiación indebida, blanqueo de capitales y falsedad documental.
El Supremo asumió el caso a instancias del juez de la AN José Luis Calama, que no pudo dirigir su investigación contra el eurodiputado, al gozar de la condición de aforado, en el marco de las pesquisas sobre la presunta estafa piramidal a través deL MIC, de la que Romillo fue máximo responsable.
Es la tercera vez que ‘Alvise’ declara en el alto tribunal. Ya compareció por las otras dos causas que tiene abiertas: una relativa a la difusión de una PCR falsa del entonces ministro de Sanidad y actual presidente catalán, Salvador Illa; y otra por el presunto acoso a la fiscal delegada de delitos de odio, Susana Gisbert.
El pasado viernes 20 de junio, cuando compareció por el presunto acoso a Gisbert, ‘Alvise’ dijo que era “público y notorio” que recibió esos 100.000 euros. “Poco me parece que me pagaran 100.000 euros por media hora de charla”, manifestó.