“Como mujer me avergüenzo. Hay que dar un golpe en la mesa”

La gestión por parte tanto del Gobierno como del PSOE en los casos de acoso del ex asesor de Pedro Sánchez, Paco Salazar, y del secretario general de Torremolinos, Antonio Navarro, ha encontrado la  respuesta indignada por parte de la militancia socialista que teme su trabajo quede aplastado por los continuos casos machistas dentro del partido y la falta de reacción y eficiencia en los protocolos dentro del mismo.

Este medio ha tenido acceso a las conversaciones en los chats internos del partido. “O le damos una vuelta de calcetín a nuestra organización o la ciudadanía nos va a barrer en las urnas”, lamentan. Porque son conscientes de que los casos de machismo tan acuciante dentro de un partido que enarbola la bandera socialista es uno de los puntos que más daño puede hacer.  “El caso Salazar es sonrojante”, afirman. “No se puede decir que no se ha hecho nada en cinco meses porque ha fallado la aplicación de las denuncias”. Y sentencian: “Como mujer me avergüenzo de algunos hombres que han llevado férreamente este partido, como Ábalos, que votaba la abolición de la prostitución siendo un cliente usual. Doble moral”. Las críticas incitan a actuar y no quedarse de brazos cruzados: “Hay que dar un golpe en la mesa, y exigir contundencia en nuestra organización”.

El fallo en los protocolos

Cuando en junio de este año se filtraron los casos de acoso de Salazar, antes de que fuera nombrado adjunto a la secretaria de Organización de Rebeca Torró, el Gobierno activó unos protocolos anti acoso que presentó en unos cursos, y animó a las mujeres que trabajaron con el ex asesor de Sánchez en Presidencia a presentar sus denuncias a través de los canales. Este medio tuvo acceso tanto a los cursos como al contenido de los protocolos, que no generan confianza en las posibles denunciantes, ya que las conclusiones finales corren a cuenta de miembros de la Abogacía General del Estado o de miembros de Presidencia, y temen represalias. “Te quedas marcada”, aseguraron a este medio.

Por otro lado, los canales internos del partido que sí usaron las mujeres presuntamente acosadas por Salazar no se activaron, tal y como publicó Eldiario.es, dejando a las denunciantes sin la protección y ambiente de seguridad que aseguran garantizar dichos canales. Por su parte, desde el partido se afirma a este medio que las investigaciones permanecen. En el caso del secretario general de Torremolinos, fuentes del partido del municipio malagueño afirman que los protocolos se activaron allí, pero asumen que la lentitud en los mismos provocó la indefensión que denuncia la presunta víctima. “Es un hombre peligroso”, aseguran. Después de hacerlo en la localidad, la mujer lo contó a la dirección y acudió a la fiscalía por temor a su propia seguridad. “Aquí hay mucha indignación y consciencia de que hay que mejorar las cosas”.

Críticas ante la decisión del PSOE de no llevar el caso Salazar a la Fiscalía

No comparten la decisión de Ferraz de no poner en conocimiento de la Fiscalía el caso de acoso de Salazar,  “Como han solicitado algunos cargos, como Adriana Lastra”.

Por parte del Gobierno, los pasos dados han sido nulos. El único registro del caso después de las denuncias ha sido la comida privada que mantuvo la ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, con Salazar a principios de ese mes de noviembre, publicada en exclusiva por este medio y que hasta la fecha, no se ha ofrecido ninguna explicación.

Con motivo de la campaña electoral por los comicios autonómicos andaluces que tendrán lugar el próximo año, exigen medidas de antemano. “Que no nos pidan que salgamos a la calle para hacer repartos mientras no se airee el partido”, afirman. “Las mujeres deben estar seguras en él, así como en Moncloa, y allí donde ejerzan su trabajo en los organismos gestionados por el partido”.

Una moción de censura defendida por Ábalos

“Llegamos al Gobierno tras una moción de censura, que no olvidemos defendió Ábalos, denunciando con contundencia la corrupción estructural del PP tras la sentencia de la Gürtel”, recuerdan. “Ahora nuestra credibilidad y honestidad como partido está en entredicho. Demasiados errores en la elección de dirigentes orgánicos”.  Hasta la fecha, dos secretarios de Organización en prisión, y un adjunto con unas investigaciones que se afirman en activo desde el partido sin que haya ninguna conclusión cinco meses después de haberse interpuesto las denuncias. “Apostemos por otra cultura política, donde las mujeres puedan ejercer su militancia y profesión seguras. Tolerancia cero ante el acoso sexual y el machismo”, manifiestan.