El Congreso informa al Supremo de que no puede acreditar la titularidad de la cuenta donde se ingresaron las nóminas de Ábalos

La Cámara Baja señala que el abono de las retribuciones y otros pagos a los diputados "no se condiciona a la presentación de un certificado acreditativo de la titularidad de al cuenta bancaria"

El exministro y exdirigente socialista José Luis Ábalos.
EFE

El Congreso de los Diputados ha detallado al Tribunal Supremo en un oficio que “el abono de las retribuciones y otros pagos a los diputados no se condiciona a la presentación de un certificado acreditativo de la titularidad de al cuenta bancaria“. Es decir, no puede acreditar que el titular de la cuenta donde se ingresaron las nóminas del exministro José Luis Ábalos, algo más de 750.000 euros durante 2014 y 2024 por trabajo y dietas, sea el propio exdirigente socialista.

Sin embargo, fuentes parlamentarias indican a El Mundo que el modo habitual de operar dentro del PSOE se basa en que los diputados ingresan sus nóminas en la cuenta del grupo parlamentario y luego este se las abona a los mismos.

La Cámara Baja ha contestado al requerimiento que le hizo el instructor del caso Koldo en el Alto Tribunal ante la “falta de sintonía” entre la información que le había suministrado Hacienda y la que constaba en las cuentas bancarias del ex dirigente socialista.

Según el resumen de las nóminas brutas la suma del total de las retribuciones de rendimientos del trabajo y de otras rentas y dietas exentas arroja la cantidad de 751.421,56 euros. Se trata de una cifra casi idéntica a la que, según la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, facilitó Hacienda por las retribuciones, dietas y otros conceptos pagados por el Congreso a Ábalos en esa década: 751.421,57 euros.

Sin embargo, la UCO advirtió un desajuste respecto a la información que revelaban las cuentas bancarias a las que había tenido acceso, pues el total ascendía a los 79.841,74 euros por pagos de la sede legislativa en ese mismo periodo. Esta “falta de sintonía” en las cifras fue la que llevó al magistrado Leopoldo Puente a requerir al Congreso la información sobre los pagos efectuados a Ábalos en cualquier concepto entre 2014 y 2024.

La UCO apreció el mismo desfase en las donaciones realizadas en esos años por Ábalos al PSOE. Conforme a Hacienda, donó 44.729,29 euros al partido pero las cuentas bancarias solo reflejaban 8.471,36 euros. Por ello, Puente también reclamó esta información a Ferraz, así como la de los pagos que hizo la formación al que fuera su número tres.

Casi 3.000 en dietas de viaje

Entre la información enviada por el Congreso constan 2.745,26 euros en gastos de viaje referidos a los años 2016, 2018, 2022 y 2023. Los de 2016 se refieren al viaje a Georgia como parte de la delegación española en la Asamblea Parlamentaria de la OSCE, por 1.050 euros, y otro en el marco de la misión de observación electoral de la OSCE a Montenegro, por 750 euros.

Ya en 2018, constan 358,03 euros por el viaje a causa de la 138º Asamblea de la Unión Interparlamentaria (UIP) en Ginebra y otros 347,23 euros por otro viaje a la ONU en Nueva York.

En ese viaje a Ginebra, constan facturas por desplazamiento en taxi de 27 y 32,50 francos suizos (28,99 y 34,90 euros con el cambio actual), además de tickets en distintos establecimientos hosteleros. En algunos se detallan pagos por cafés -de 9 francos a 5,90 o 3,50, lo que corresponderían a 9,66, 6,33 y 3,76 euros-, menús del día -de 57 francos (61,20 euros) a los 15 francos (16,11 euros) que pagó en el restaurante chino Cui Yuan- e incluso dos smoothies por los que abonó 15,60 francos (16,75 euros).

En el desplazamiento a Nueva York se recogen pagos similares. Ábalos abonó 19 dólares (16,36 euros con el cambio actual) por una hamburguesa con queso, 8 (6,89 euros) por una pinta de Guiness y un café por 3,50 (3,01 euros). El entonces ministro también pagó 4,90 dólares (4,22 euros) por una botella de agua que adquirió en el Grand Hyatt de la Gran Manzana.

En la ciudad, el exministro también pagó 19,60 dólares (16,88 euros) por un plato de pasta en un restaurante situado en la Quinta Avenida. Llegó a pagar además 46,55 dólares (40,08 euros) por una sopa de pescado, una cerveza, una tarta de queso y un café en otro local de Nueva York.

A ello se suman 120 euros en 2022 por una visita de trabajo a la valla de Melilla como parte de la Comisión de Interior y otros tantos en 2023 por una visita a la Comisaría General de Canillas, en Madrid, también en una visita de Trabajo por la Comisión de Interior.