El Euríbor (Euro Interbank Offered Rate) es el tipo de interés promedio al que los bancos europeos se prestan dinero entre sí, convirtiéndose en un indicador económico de vital importancia en la Eurozona. En España, su relevancia es aún mayor, y hay quien se beneficia cuando se produce una subida del Euríbor.
Este sirve de referencia para la inmensa mayoría de las hipotecas variables y una diversidad de otros productos financieros, impactando directamente la economía de millones de hogares y empresas.
¿Ha habido recientemente subida del Euríbor en España?

Existe una percepción generalizada de que el Euríbor continúa en ascendencia. Es una preocupación comprensible, teniendo en cuenta la escalada significativa que experimentó desde enero de 2021 hasta alcanzar su pico en octubre de 2023. El Euríbor a 12 meses se situó en un 4,16% en ese momento. Sin embargo, los datos más recientes en España revelan una tendencia contraria.
El Banco de España ha confirmado que el Euríbor a 12 meses descendió al 2,081% en mayo de 2025, marcando su nivel más bajo desde 2022. Esta cifra prolonga una trayectoria descendente iniciada en abril de 2024.
El Euríbor se calcula basado en un promedio ponderado de las tasas ofrecidas por un panel de 19 bancos seleccionados, y se publica diariamente. Está estrechamente ligado a las políticas del BCE (Banco Central Europeo), y a otros factores como la solvencia económica bancaria, la inflación (regional y global) y los comportamientos de los consumidores, entre otros.
Los generosos beneficios (y las pérdidas) de este posible crecimiento

Pero podría volver a producirse una subida del Euríbor. Consecuentemente, los principales beneficiarios del elevado tipo de interés promedio son los bancos y los inversores en la renta fija. Por un lado, las entidades bancarias pueden cobrar más intereses por los préstamos que dan, aunque estos se actualizan poco a poco. Por el otro, los productos de ahorro en renta fija tienen una mayor rentabilidad al subir los tipos el BCE.
La otra cara de la moneda de un Euríbor elevado la experimentan principalmente los deudores y aquellos que buscan financiación. Estos ven aumentadas sus cuotas mensuales cuando el índice sube. Durante los periodos de alza, una hipoteca media llegó a encarecerse más de 3.000 euros al año, según datos del Banco de España. Esto llevó a muchos a optar por hipotecas a tipo fijo, que en 2024 representaron el 63,4% de las nuevas contrataciones. Sin embargo, la reciente bajada del Euríbor en mayo de 2025 ha supuesto un respiro: una hipoteca de 150.000 euros podría abaratarse hasta llegar a un ahorro anual cercano a 1.650 euros. Así, los constantes cambios del Euríbor siguen marcando las decisiones financieras de miles de hogares.
El impacto de un Euríbor alto no se limita a las hipotecas. También encarece los préstamos personales y empresariales, reduciendo el acceso a la financiación y frenando tanto el consumo como la inversión. Además, afecta directamente al Estado: desde 2021, el coste de emitir deuda pública ha aumentado significativamente, con incrementos del 3,75% para los bonos a tres años y del 3,16% para los de diez. Esto eleva el gasto público destinado al pago de intereses, presionando aún más las finanzas públicas.
Definitivamente, si bien la tendencia actual del Euríbor es a la baja, el mercado es muy dinámico. Las previsiones para 2026 sugieren un posible repunte. Esto subraya la necesidad de una gestión financiera a conciencia, con un seguimiento continuo de la subida del Euríbor y de la política del BCE.