La oferta pública de adquisición (OPA) lanzada por BBVA sobre Banco Sabadell ha experimentado un ajuste significativo en su prima negativa. Al cierre bursátil de ayer es del 5,6%. Esto significa que la diferencia entre vender directamente en el mercado o acudir a la propuesta de la entidad presidida por Carlos Torres se ha reducido. Lo que sitúa la operación en un escenario relativamente más alineado con el mercado, aunque aún no alcanza la equiparación a la rentabilidad de vender en Bolsa.
La operación, que se encuentra en una fase clave, ha avanzado tras recibir la autorización de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), lo que permitió a BBVA iniciar el periodo de aceptación el pasado 8 de septiembre. Este paso marca un momento decisivo en la estrategia de integración, en la que el banco tiene como objetivo controlar más del 50% del capital de Sabadell.
Caso práctico
El presidente de BBVA ha reiterado en múltiples ocasiones que la oferta presentada es “justa y adecuada“, y que no contempla modificaciones. El ajuste en la prima negativa se debe a la evolución de los precios de las acciones de ambas entidades en el mercado, y no a una revisión de los términos de la oferta.

Para ilustrar el impacto, un ejemplo concreto: un inversor que en enero de 2023 compró acciones de Sabadell por 10.000 euros a un precio de 1,16€ por título. El cálculo es sencillo. Esa inversión inicial permitió adquirir aproximadamente 8.620 acciones de Sabadell. Con la cotización actual del banco catalán situada en 3,2€ por acción al cierre del día de ayer, vender en el mercado supondría obtener un valor total de 27.584€, lo que se traduce en una ganancia de 17.584€.
Sin embargo, si el accionista decidiera aceptar la oferta de BBVA, la situación cambia. La opa propone una acción de BBVA más 0,70 € en efectivo por cada 5,5483 acciones de Sabadell. Aplicando esta ecuación, las 8.620 acciones de Sabadell se convertirían en aproximadamente 1.554 acciones de BBVA. Con un precio por título de 16,01 euros a la conclusión de la sesión, el valor total de estos instrumentos en el mercado asciende a 24.873 €. A este importe se suma el efectivo recibido, que se sitúa en 1.087 €, lo que eleva el valor total de la oferta a 25.944€. En términos de ganancia, aceptar la opa de BBVA equivaldría a 15.944€. Es decir, el accionista recibiría unos 1.640€ menos que si optara por vender directamente sus acciones en el mercado.
Evolución de la cotización
El mismo cálculo al cierre de mercado del viernes pasado arrojaba una diferencia mucho mayor. El día 12 de septiembre, el título de BBVA se elevaba hasta los 16,20 euros, y el de Sabadell alcanzaba los 3,37€. Por aquel entonces la diferencia entre haber vendido las 8.620 acciones en el mercado o aceptar la oferta de la opa habría ascendido hasta los 3.660€, con una prima del -9,5%. Por lo que la ratio se ha reducido a casi la mitad.
Este ajuste refleja cómo la caída más pronunciada de las acciones de Sabadell frente al ligero retroceso de las de BBVA ha estrechado la brecha de la prima negativa, haciendo que la oferta resulte relativamente más atractiva. El 18 de agosto, el precio de la acción del banco vasco se situaba en 16,36€, mientras que la de Sabadell alcanzaba los 3,43€. Al cierre de ayer, BBVA cotizaba a 16,08€, mientras la entidad vallesana lo hacía a 3,20€. La corrección representa una caída del 1,7% y del 6,7%, respectivamente.
Además de la mejoría en la prima, la opa puede resultar una opción para aquellos inversores que busquen integrarse en un grupo financiero de mayor tamaño y no tengan interés en desprenderse de su posición en renta variable. Sin embargo, para los accionistas que prioricen maximizar beneficios inmediatos, vender en el mercado sigue siendo la opción más rentable, ya que la cotización de Sabadell todavía ofrece un valor superior al de la oferta de BBVA.
Oferta superior
Según el análisis de Renta 4 del pasado 16 de septiembre, para que la opa sea exitosa, -condicionado a obtener el 50% + 1 acción del capital- BBVA “necesariamente debería mejorar la oferta”. En este sentido, la firma estima que “de darse dicha mejora, esta podría situarse entre el 10% y 15% sobre el precio actual de Sabadell”, ya sea mediante acciones, efectivo o una fórmula mixta.
No obstante, Renta 4 alerta de la mejora de la prima negativa “reduce la posibilidad” de que BBVA presente una nueva oferta al alza. En este contexto, y ante la ausencia de una nueva propuesta, recomienda a los inversores “vender a mercado las acciones de Sabadell”. Ya que vaticina que el “riesgo de corrección podría ser superior a la potencial mejora del precio de la oferta”.
Vender o esperar
Mientras el calendario se acerca al 7 de octubre, fecha límite para que los accionistas del Sabadell acepten la propuesta de BBVA, este contexto indica que la posibilidad de una mejora de las condiciones es cada vez menor. La compañía presidida por Carlos Torres dispone de plazo hasta el 23 de septiembre el precio ofrecido para revisar -en el caso de que eventualmente decidiera hacerlo-. Ese día se cumple el plazo legal —diez días hábiles antes de que termine el periodo de aceptación— salvo que decida ampliar ese periodo. Por normativa la espera podría alargarse hasta un máximo de 70 días.
Con la prima negativa reducida al −5,6%, la oferta ya no está tan alejada del valor de mercado. Aún así, la estrategia de inversión de cada accionista y los objetivos financieros a corto y largo plazo son los condicionantes que determinarán realmente la decisión del titular. Vender, esperar o mantener, la palabra la tienen los accionistas.