El holding empresarial de Amancio Ortega, el fundador del Grupo Inditex, continúa su ritmo de crecimiento a doble dígito. Las compañías en las que controla más del 50% del capital superaron, por vez primera, la barrera de los 9.000 millones de euros de beneficio en el último ejercicio. Ortega ganó casi un 60% más que el grupo textil (5.866 millones) gracias a la diversificación de sus negocios.
Su filosofía ha sido reinvertir los dividendos que año a año percibe de Inditex y sus activos superan ya los 110.000 millones. Sus actividades se centran en el arrendamiento de inmuebles -hoy es uno de los mayores caseros del mundo- y en la gestión de inversiones financieras, que incluyen participaciones en energías renovables.
¿Cuánto gana al día?
En 2024, Pontegadea Inversiones, sociedad dominante de un conjunto de sociedades dependientes a través de la cual Ortega estructura su patrimonio empresarial, ganó más de 25,5 millones diarios. Esta compañía obtuvo un resultado de 9.322 millones, un 17,36% más, tal y como queda reflejado en las cuentas depositadas en el Registro Mercantil.
Estos resultados incluyen, además de la propia Pontegadea Inversiones (sociedad propietaria del 50,01% de Inditex), a Partler 2006 (9,29% del imperio textil) y Pontegadea GB 2020, todas ellas con sus sociedades dependientes. A su vez, los ingresos del holding empresarial crecieron un 8,77% hasta los 43.125 millones, mientras que el patrimonio neto se situó en 90.546 millones, frente a los 82.558 millones del año anterior.
Dividendos récord

Estos resultados vienen determinados por la actividad textil de Inditex y por los ingresos derivados del negocio inmobiliario. En 2024, a través de Pontegadea Inversiones (50,01% de Inditex), la sociedad recibió dividendos por importe de 2.408 millones de euros, casi en su totalidad procedentes del gigante textil, salvo ocho millones ingresados desde otras sociedades vinculadas.
La cifra supone un incremento del 24,6% respecto al ejercicio anterior (1.933 millones), en línea con la subida acordada por Inditex. Al igual que en años anteriores, las ganancias se han aplicado como reservas voluntarias de la sociedad.
Reparto de 400 millones
A su vez, la empresa procedió a la distribución de reservas de libre disposición por 400 millones en concepto de dividendos a la familia Ortega. De este importe, 41 millones ya se habían repartido antes del cierre de 2023 y, al finalizar 2024, aún quedaban pendientes de abonar 72 millones, que figuran contabilizados como deuda a corto plazo.
Según detalla la memoria, las deudas a corto plazo corresponden “principalmente, al dividendo aprobado por la Junta General de Socios en el ejercicio 2024 y pendiente de pago al cierre del ejercicio”.
Consejo de Administración

Durante el pasado año, los miembros del consejo de la sociedad percibieron retribuciones por 11 millones de euros. Este órgano ha estado formado por cinco miembros: el fundador de Inditex Amancio Ortega Gaona, su mujer Flora Pérez Marcote y su hija Marta Ortega Pérez, junto con José Arnau Sierra y Roberto Cibeira Moreiras.
En 2025, el consejo afronta la jubilación de quien ha sido la mano derecha de Ortega durante casi 25 años. José Arnau cesará como vicepresidente y consejero de Pontegadea el próximo 1 de octubre con motivo de su jubilación. Asumirá sus funciones Roberto Cibeira, consejero delegado de la sociedad.
Esta transición también se reflejará en Inditex. En la junta de accionistas del próximo 15 de julio, Cibeira pasará a ocupar el puesto de consejero dominical en representación de Pontegadea. Arnau, licenciado en Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela e inspector de Hacienda del Estado, ha sido desde 2001 el primer ejecutivo del grupo.
Reordenación inmobiliaria
Arnau dejará su responsabilidad culminada la reorganización de las sociedades inmobiliarias. Las cuentas de Pontegadea Inversiones reflejan estos movimientos. Así, por un lado, muestran un incremento de las inversiones en empresas del grupo y asociadas por 7.899 millones, dirigidas a Pontegadea Luxembourg mediante aportaciones dinerarias y no dinerarias. Además, se realizaron otras aportaciones por 864 millones a los fondos propios de Pontegadea Inmobiliaria.
Por otro lado, el traspaso de activos a la filial luxemburguesa -que aglutina los inmuebles situados en Europa, con excepción de España, Portugal y Reino Unido– supuso la baja en Pontegadea Inmobiliaria de un derecho de crédito frente a dicha filial por 6.136 millones. También se acometieron ajustes en participadas del ámbito de las energías renovables.
¿Dónde están los activos?
A cierre de ejercicio, la cartera inmobiliaria del grupo alcanzó un valor razonable de 20.351 millones de euros, frente a los 18.156 millones del año anterior, según tasaciones de expertos independientes. Los activos se concentran en ubicaciones clave de Europa, América y Asia, y abarcan inmuebles de uso comercial, oficinas, residencial, logístico y hotelero, todos ellos arrendados.
El grupo gestiona este imperio financiero e inmobiliario con una plantilla media de apenas 167 empleados. Además, cerró el ejercicio con una posición de tesorería consolidada de 2.234 millones de euros y sin apenas deuda financiera.
Dotación a la Fundación Amancio Ortega
Durante 2024, la labor filantrópica continuó con una fuerte aportación de fondos por parte de Pontegadea a la Fundación Amancio Ortega. Según reflejan las cuentas consolidadas, el holding aportó 699 millones, frente a los 80 y 53 millones de los dos ejercicios anteriores. De estos, 300 millones se destinaron a la implantación de la protonterapia en los sistemas públicos de salud de España y Portugal, y el resto a programas sociales. Entre ellos, se incluyen la construcción de centros públicos de salud en Galicia para atención a personas mayores y las ayudas tras la DANA de octubre en Valencia.
Tal como recoge la memoria individual, la sociedad decidió “liquidar todos los compromisos vigentes de inversión adquiridos por la Fundación”, algunos de ellos ya provisionados. Solo las inversiones comprometidas para la implantación de la protonterapia (acordada en 2021 con una dotación máxima de 240 millones) y la renovación de equipos oncológicos en hospitales públicos (aprobada en 2017 por un máximo de 300 millones) superan conjuntamente los 500 millones de euros.