El Gobierno ha optado finalmente por no modificar las cuotas mensuales que pagan los trabajadores autónomos a la Seguridad Social. De esta forma, se mantendrán en 2026 los mismos importes de este año. La decisión, anunciada en el Consejo de Ministros de 2025, supone dar marcha atrás a las distintas propuestas de incremento planteadas por el Ministerio de Inclusión en los últimos meses y prorrogar el actual esquema de cotización un año más.
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y portavoz del Gobierno, Elma Saiz, confirmó que “la tabla de cotización para los trabajadores autónomos para el año 2026 no sufre cambios respecto a 2025”. En la rueda de prensa, Saiz subrayó que “la protección de los autónomos está indisolublemente unida a las cuotas, a sus cotizaciones, que van directamente a esa protección social”.
Negociación bloqueada
La prórroga de las cuotas se incluye en el Real Decreto-ley aprobado el 23 de diciembre para el mantenimiento del denominado escudo social en el último Consejo de Ministros del año. Con esta decisión, los autónomos seguirán pagando en 2026 las mismas cuotas que este ejercicio. Cabe recordar que la negociación con el colectivo de autónomos está bloqueada. Además, no contaría con apoyos parlamentarios suficientes para sacar adelante una reforma más ambiciosa.

La decisión del Ejecutivo llega después de meses de tensión con las asociaciones del colectivo y sin que entre ellas se haya llegado a una propuesta de consenso. El pasado mes de octubre, el Ministerio de Elma Saiz puso sobre la mesa una primera propuesta con incrementos mensuales de entre 17 y 206 euros en las cuotas para 2026. El rechazo fue prácticamente unánime: tanto las principales organizaciones representativas del colectivo como Junts se opusieron a ese planteamiento.
Segunda propuesta
Ante esa falta de respaldo, el Ministerio rectificó con una segunda propuesta. En ella se proponía congelar las cuotas de los autónomos con menores ingresos y aplicar subidas más contenidas al resto, de entre 2,91 y 14,75 euros mensuales. El incremento, de carácter progresivo, se situaba entre el 1% y el 2,5% en la tabla general, mientras que se mantenían sin cambios las cuotas de la tabla reducida.
Esta tabla reducida engloba a los trabajadores por cuenta propia con rendimientos netos mensuales comprendidos entre 670 euros y 1.166,7 euros. Fuera de ese tramo, la tabla general -compuesta por 12 escalones que van desde rendimientos superiores a 1.166,7 euros hasta más de 6.000 euros mensuales- concentraba los aumentos previstos por el Ministerio.
Sin embargo, tampoco esta segunda propuesta logró los apoyos necesarios. Ante ese escenario, el Gobierno ha optado por cerrar el debate, al menos de forma temporal, y prorrogar para 2026 las cuotas actualmente vigentes.
¿Cómo quedan las cuotas de 2026?

De este modo, los autónomos que coticen por la base mínima seguirán abonando cuotas mensuales que oscilan entre los 200 y los 590 euros, en función de sus rendimientos netos. Son exactamente los mismos importes que se aplican en 2025, tras la última actualización del sistema.
El sistema permite a los autónomos modificar su tramo de cotización hasta seis veces al año, con cambios cada dos meses, para adaptar sus cuotas a las previsiones de ingresos de su actividad. Los rendimientos netos se calculan restando a los ingresos todos los gastos necesarios para el ejercicio de la actividad profesional. Sobre esa cifra se aplica, además, una deducción adicional por gastos genéricos del 7% -del 3% en el caso de los autónomos societarios-, que es la que finalmente determina la base de cotización y la cuota correspondiente.
Los trabajadores por cuenta propia deben comunicar a la Seguridad Social una previsión anual de ingresos, aunque pueden ajustarla a lo largo del ejercicio si sus rendimientos varían de forma significativa. Una vez cerrado el año fiscal y conocidos los rendimientos netos definitivos, la Seguridad Social regulariza las cotizaciones, devolviendo o reclamando importes en función de si se ha cotizado por debajo o por encima del tramo que finalmente correspondía.
Impacto de género
La prórroga de las cuotas tiene, además, un impacto directo desde el punto de vista de género. Las mujeres representan en torno al 37% de las personas afiliadas al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) y están sobrerrepresentadas en los tramos más bajos de ingresos, por lo que el mantenimiento de las cuotas mínimas en 2026 protege especialmente a las autónomas con rendimientos más reducidos.
A este escenario habrá que sumar, no obstante, el incremento del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI). A partir del próximo 1 de enero, la sobrecotización destinada a nutrir el Fondo de Reserva de las pensiones subirá una décima, del 0,8% al 0,9%. El aumento afectará tanto a autónomos como a trabajadores asalariados, con independencia del nivel de ingresos o salario.


