Elecciones

Alarma en el PSOE ante el “drama” a su izquierda: “Hay gente que nunca nos votará”

Ferraz teme que en Andalucía pueden "irse por el desagüe medio millón de votos", si concurren cuatro listas en la izquierda

Yolanda Díaz
EFE/ Borja Sanchez-Trillo

“El drama no es a la derecha, es a la izquierda”. Un dirigente socialista con galones despacha así los resultados de las últimas encuestas, en particular el CIS, que dispara al PSOE como primera opción y dibuja a Vox cada vez más cerca del sorpasso al PP. Por más que los socialistas aludan en público a esta posible fagotización, en privado asumen que aún está lejos de cumplirse.

Y el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que dirige José Félix Tezanos, es acogido con escepticismo incluso entre aliados del Gobierno por el buen resultado que vaticina a un PSOE que lidia con los casos de presunta corrupción de sus dos últimos secretarios de Organización. A Sumar le atribuye un 7,7% de los votos, a Podemos un 4,9%. Es algo más de lo que lograron en las últimas generales (12,3%, pero se traduciría en menor número de escaños.

Pese a ello, distintos dirigentes socialistas presumen de haber “encapsulado” la corrupción, y señalan que el problema en términos demoscópicos está a su izquierda. A la distancia que separa a Sumar y a Podemos, a nivel estatal pero también en los territorios. Con la vista puesta en el castigo que garantiza el actual sistema electoral a estos partidos cuando concurren en varias candidaturas.

“Preocupa, pero nosotros estamos a lo nuestro”, apunta otro dirigente. En las últimas semanas, Pedro Sánchez ha peleado especialmente por hacerse con la bandera de la lucha por la causa palestina, a nivel internacional y dentro de las fronteras españolas.

Pero también ha disputado a Sumar el liderazgo sobre la reforma constitucional para blindar el derecho al aborto. Según las encuestas, el presidente del Gobierno aglutinaría buena parte del voto que cosechó Sumar el 23-J -con Podemos dentro-. Los socialistas repasan los números y asumen que esto no basta.

“Hay gente de izquierdas que nunca nos va a votar”, acepta el primer interlocutor. El mismo que aprecia que, en el escenario nacional de hoy, se antoja imposible que Yolanda Díaz (Sumar) e Irene Montero (Podemos) vayan a concurrir en una lista conjunta.

De momento, las urnas se antojan lejanas. La intención de Sánchez es apurar la legislatura hasta 2027, si bien los odios cruzados y las diferencias de estrategia en la izquierda dejan poco margen para el entendimiento. En el PSOE afirman que no pueden mediar, porque cualquier declaración puede ser utilizada para avivar el fuego.

La izquierda va camino de presentarse en cuatro listas en Andalucía

El ejemplo que destacan es el de las “cuatro listas” de izquierdas que previsiblemente concurrirán en las elecciones andaluzas, a más tardar a mediados de 2026: la del PSOE (liderada por la vicepresidenta primera, María Jesús Montero); la de Sumar (con IU como actor principal); la de Adelante Andalucía (el partido fundado por Teresa Rodríguez) y la de Podemos (que aspira a liderar Juan Antonio Delgado, próximo a la dirección nacional).

“Medio millón de votos se irán por el desagüe”, afirman desde la dirección socialista. En los últimos comicios, cuando IU-Sumar y Podemos concurrieron juntos (Por Andalucía), lograron 281.000 votos, a los que se suman los 167.000 de Adelante Andalucía. En total, 449.658 respaldos que les garantizaron siete escaños.

Sumar y Podemos (5 diputados) han compartido grupo parlamentario desde entonces, como han hecho en las principales capitales de provincia en Andalucía. En esta ocasión, sin embargo, los morados han desoído todas las llamadas de Izquierda Unida para explorar una lista conjunta.

Y esto ha desembocado en que uno de los tres diputados morados, José Manuel García Jurado, dimita de sus cargos internos y renuncie a postularse a la reelección. La puerta sigue abierta para que Podemos pueda sumarse, pero la última palabra depende de la dirección estatal. Y de una consulta con sus bases que ni siquiera tiene fecha.

Todo apunta a que concurrirán por separado también en Castilla y León. De hecho, IU reúne este fin de semana a sus bases para empezar a elaborar su programa electoral. Formalmente, ambas partes sostienen que no hay ninguna decisión firme sobre cómo se presentarán a estos comicios, previstos para el inicio de 2026.

Emilio Delgado abre el melón de la sucesión de Mónica García en Más Madrid

La sucesora de Mónica García como portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Manuela Bergerot, reprochó esta semana a su adjunto, Emilio Delgado, el “momento” escogido para postularse a liderar el partido de cara a las elecciones de 2027.

“Me lo tomo en serio pero queda mucho tiempo y eso lo decide luego la militancia. Si me ponen de 1 o de 15, me parecerá bien”, afirmó Delgado en La Sexta.

En una entrevista en Onda Madrid, recogida por Europa Press, Bergerot le afeó que se postulase mientras la también diputada Jimena Gónzalez, estaba “secuestrada” por Israel tras haber formado parte de la segunda flotilla humanitaria que intentó romper el bloqueo humanitario en la Franja de Gaza. “Desde luego que el momento colectivo no era”, puntualizó.

Delgado ha ido ganando peso político y mediático en los últimos meses, si bien hoy fuentes de Más Madrid afirman que el debate sobre el liderazgo queda lejos aún. De hecho, él mismo ha pedido centrar el foco en Isabel Díaz Ayuso, y ha justificado que hizo esas declaraciones en una entrevista previa a la situación de González. La diputada logró retornar a España el pasado sábado.

En las quinielas internas hay quienes dan por hecho que la actual ministra de Sanidad volverá a la Asamblea para intentar seguir liderando la oposición. También hay voces que niegan que García haya adoptado este rumbo. Sí coinciden en que aún no se dan los mimbres para abrir el melón sucesorio. La izquierda empieza a moverse, aunque aún esté lejos de disipar las principales incógnitas sobre su futuro.