La dimisión de Mazón ha sacudido este lunes el panorama político valenciano. Con el rostro serio y la voz quebrada, el ya expresidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha comparecido para anunciar oficialmente su renuncia al cargo tras varios días de rumores, presiones internas y un fin de semana de intensa reflexión personal.
En una comparecencia que ha durado poco más de veinte minutos, Mazón ha ofrecido un discurso profundamente emocional, lleno de autocrítica y frases que pasarán a la historia política reciente de la Comunidad Valenciana. La dimisión de Mazón llega marcada por la gestión de la catástrofe de la DANA y las críticas por la falta de reacción del Ejecutivo autonómico durante las primeras horas de la emergencia.
Un discurso entre la emoción y la autocrítica
Durante su intervención, Carlos Mazón ha reconocido “errores” en la gestión de la crisis. Aunque ha insistido en que “ninguno fue por cálculo político ni por mala fe”. Según ha explicado, su Gobierno “no supo que el barranco del Poyo se había desbordado ni que había muertos hasta la madrugada”.
La dimisión de Mazón se ha producido tras un fin de semana en el que el dirigente del PP mantuvo conversaciones con Alberto Núñez Feijóo, presidente del partido, sobre las consecuencias políticas de la tragedia y la creciente presión mediática. Mazón ha descrito la situación como un “tsunami inimaginable” y ha reconocido que se encontraba “anímicamente agotado”.
“Sé que cometí errores, pero ninguno fue por mala fe. No supimos lo que ocurría en el barranco del Poyo hasta horas después”, ha admitido.
“Espero que la sociedad pueda distinguir entre un hombre que se ha equivocado y una mala persona”, añadió, en una de las frases más citadas tras su renuncia.
Con voz temblorosa, Mazón ha asegurado que su familia ha vivido “momentos insoportables” en los últimos días y que la presión política y mediática “ha superado todos los límites del respeto”.
La DANA, el detonante político y personal
La dimisión de Mazón está directamente ligada a la devastadora DANA del 29 de octubre, que dejó cientos de muertos y graves daños materiales en el litoral valenciano. Desde el inicio de la tragedia, Mazón ha sido objeto de duras críticas por la falta de coordinación de los servicios de emergencia y por la ausencia de información durante las primeras horas del desastre.
En su discurso, el expresidente ha querido defender el trabajo realizado:
“Hemos hecho todo lo humanamente posible para la reconstrucción tras la DANA. Jamás un Gobierno autonómico ha afrontado un reto anímicamente parecido.”
Sin embargo, también lanzó duras acusaciones contra el Gobierno central:
“La falta de ayuda los primeros días fue clamorosa y sigue siéndolo a día de hoy. El Gobierno de España ha negado ayudas solo para debilitarnos políticamente.”
La dimisión de Mazón se produce, además, en un momento en el que la oposición exigía su salida inmediata y pedía una comisión de investigación para esclarecer los fallos en la gestión del desastre.
“Ya no puedo más”: el final de una etapa política
La comparecencia de Mazón ha tenido un tono más personal que institucional. En uno de los momentos más emotivos, el dirigente popular confesó estar “al límite” y justificó su renuncia por motivos humanos antes que políticos.
“Ya no puedo más. Sé que el futuro president será capaz de continuar con la reconstrucción.”
“Mi vida cambió el 29-O para siempre. He intentado batallar para que se conociese la realidad.”
Estas frases marcan el punto final a una carrera política que Mazón definió como “el mayor honor de mi vida”. En su despedida, agradeció a su equipo y pidió que no se utilice su salida “para alimentar el odio”.
“Que ya no haya campaña de odio contra nadie que justifique abandonar a toda una tierra”, pidió.
“Las víctimas tienen todo el derecho a expresarse como consideren. Siempre he puesto por delante la recuperación de mi tierra.”
La dimisión de Mazón, según fuentes cercanas, se habría decidido la noche anterior a su comparecencia, tras recibir la visita de varios miembros de su equipo más próximo.
Críticas al Gobierno central y mensaje final a la mayoría parlamentaria
Mazón aprovechó su despedida para cargar de nuevo contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez, al que acusó de haber “politizado la tragedia” y de obstaculizar los proyectos de reconstrucción en la Comunidad Valenciana.
“El Gobierno se niega a hacer las obras del barranco del Poyo, incluso estando presupuestadas. Han intentado debilitarnos políticamente negando ayudas.”
Finalmente, en el cierre de su discurso, el expresidente apeló a la mayoría parlamentaria para que actúe con “responsabilidad” en la elección de su sucesor.
“Me dirijo a esa mayoría parlamentaria viva, que defiende la libertad y lidera la reconstrucción. Apelo a la responsabilidad para elegir nuevo president de la Generalitat.”
Con estas palabras, la dimisión de Mazón deja un vacío político inmediato en la Generalitat y abre un proceso de sucesión en el Partido Popular valenciano que se resolverá en las próximas semanas.


