El deporte sigue siendo un terreno donde, a pesar de los avances, las mujeres enfrentan barreras invisibles pero muy reales. Mar Mas, presidenta de la Asociación de Mujeres en el Deporte Profesional (AMDP), lleva años luchando por eliminar estas barreras, abogando por un acceso igualitario, condiciones justas y entornos deportivos libres de acoso. A través de su labor, ha visibilizado las desigualdades estructurales en el deporte e impulsado iniciativas como Entrena Segura, una herramienta basada en inteligencia artificial que busca garantizar la seguridad y la igualdad para las mujeres en las instalaciones deportivas.
En esta entrevista, Mas nos ha compartido los motivos que la llevaron a liderar esta lucha por la igualdad, destacando las persistentes brechas de género y cómo su asociación trabaja para transformar las instalaciones deportivas en espacios más inclusivos y seguros.
El nacimiento de “Entrena Segura”
Mar Mas no tiene dudas: uno de los principales problemas que enfrentan las mujeres en el deporte es la falta de seguridad. “El deporte femenino sigue sin tener los mismos recursos que el masculino”, explica con firmeza. Las instalaciones deportivas, muchas veces, no están pensadas para la mujer, y las problemáticas van desde horarios inadecuados hasta vestuarios compartidos con hombres, lo que genera incomodidad y, en algunos casos, situaciones de riesgo.
“El ecosistema deportivo está muy masculinizado. Las instalaciones están pensadas para equipos masculinos, y las mujeres tienen horarios peores”, comenta Mar. Esto, junto con la falta de protocolos de seguridad, crea un caldo de cultivo donde la violencia de género y el acoso se vuelven comunes en muchos ámbitos del deporte.

El caso Jenni Hermoso
Uno de los casos más recientes que refleja esta problemática es el caso de la Federación Española de Fútbol. La histórica victoria del equipo femenino en el Mundial de fútbol en 2023, por ejemplo, se vio empañada por un escándalo de acoso por parte de Luis Rubiales, presidente de la federación, hacia la jugadora Jennifer Hermoso. Este incidente evidenció la falta de protocolos adecuados, dejando a las víctimas desprotegidas y mostrando la necesidad urgente de cambios en las estructuras del deporte.
“En el caso de Jennifer Hermoso, el protocolo nunca se puso en marcha. El psicólogo del equipo no actuó, y las instituciones responsables no hicieron nada. Eso demuestra lo que pasa a nivel estructural“, critica la presidenta, quien agrega que este tipo de incidentes no son aislados. Las mujeres que sufren acoso dentro de las federaciones y clubes se encuentran con grandes obstáculos para presentar denuncias o recibir apoyo institucional.
Consciente de la urgencia de un cambio profundo, la AMDP, en colaboración con Uriaxait, ha lanzado Entrena Segura, una plataforma web pionera que utiliza inteligencia artificial para mapear y analizar las sensaciones de inseguridad de las mujeres en los espacios deportivos. A través de un cuestionario anónimo, la aplicación recoge testimonios de usuarias, lo que permite generar informes personalizados para cada instalación y ofrecer recomendaciones específicas que mejoren la seguridad y accesibilidad.
“Queremos que las mujeres nos den las claves desde dentro, desde su experiencia como usuarias. Que el miedo no vuelva a ser motivo de abandono“, afirma Mar Mas. Así, Entrena Segura no solo busca identificar los problemas, sino transformar la inseguridad en una oportunidad de cambio, impulsando un entorno deportivo más seguro e inclusivo para todas.
Luchando por una igualdad real
Uno de los puntos más importantes que Mas destaca en su entrevista es la necesidad de un cambio estructural en las leyes y en la formación de los responsables de las instalaciones deportivas. La AMDP trabaja activamente con diferentes administraciones y gobiernos autonómicos para lograr que las leyes sobre igualdad se cumplan de forma efectiva. “No solo queremos que las leyes existan, sino que se apliquen correctamente”, explica.
Una de las áreas en las que la asociación ha puesto el foco es en la formación obligatoria en igualdad para todos los entrenadores, federaciones y personal encargado de los equipos. “El objetivo es que cada club tenga un responsable de igualdad, que esté capacitado para detectar cualquier situación de acoso o violencia”, señala Mas. Para ella, no basta con la teoría, sino que es esencial que los protocolos se pongan en práctica de manera efectiva.
Además, la activista denuncia cómo en muchos casos las mujeres en el deporte enfrentan dificultades adicionales, como el acoso por parte de entrenadores o compañeros de equipo, especialmente cuando terminan relaciones sentimentales dentro del ámbito deportivo. “Hemos visto casos en los que mujeres que deciden poner fin a una relación con un entrenador se encuentran con agresiones o problemas dentro de sus federaciones. Esto no puede seguir pasando”, lamenta.

Un futuro sin barreras
Mar Mas no es pesimista, pero es realista. A pesar de los avances que ha visto en los últimos años, sabe que aún queda mucho por hacer. “Las mujeres estamos luchando por nuestros derechos, pero aún no hemos llegado a una igualdad real. Hay mucho por cambiar, y eso pasa por transformar las estructuras que nos rodean”, reflexiona.
Una de las mayores dificultades, según Mas, es la falta de visibilidad de las mujeres en el deporte. Mientras que los deportistas masculinos ocupan el centro de atención en los medios, las mujeres siguen siendo invisibles en las pantallas. “La radio y la televisión pública siguen apostando casi exclusivamente por el fútbol masculino, lo que ha creado una memoria deportiva que nos ha robado a las mujeres. La gente no conoce a nuestras deportistas, a nuestras referentes”, señala Mar.
Para ella, es fundamental que los medios de comunicación visibilicen a las mujeres en el deporte de la misma manera que lo hacen con los hombres. Solo así, asegura, se podrá generar un cambio cultural que permita a las mujeres sentirse igual de capaces y seguras en sus disciplinas deportivas.
El miedo no debería obligarnos a abandonar el deporte
“Que el miedo no nos haga abandonar el deporte”, dice Mar Mas con determinación. Su mensaje es claro: las mujeres deben ser conscientes de que tienen derecho a practicar deporte en igualdad de condiciones y a exigir las mismas oportunidades que los hombres. No es solo un tema de equidad, es una cuestión de derechos humanos.
“Que el miedo no nos haga abandonar el deporte”
“Estamos luchando para que en el futuro ninguna niña tenga que sentirse incómoda o insegura en un vestuario, en una cancha o en una piscina. Queremos que el deporte sea un lugar seguro para ellas”, concluye Mar Mas, con la esperanza de que su labor y la de muchas otras activistas logre, finalmente, abrir las puertas de la igualdad para todas.