Queda un año para el evento (probablemente) más polémico del mundo del deporte. Entre el 21 y el 24 de mayo de 2026 se disputarán los Enhanced Games en Las Vegas, traducido como los Juegos Mejorados, para muchos, los Juegos Olímpicos de los tramposos. Detrás de este multimillonario negocio, Christina Smith es una de sus impulsoras.
En un mundo cada vez más polarizado y más cómodo en la polémica constante, algunos han encontrado el hueco para crear y promocionar una competición sin límites en cuanto a dopaje para conocer las capacidades del cuerpo humano y el listón de los récords deportivos.
Smith, ex olímpica
¿Hasta dónde puede llegar nuestro físico? Es la pregunta a la que los promotores de esta competición quieren dar respuesta. Una especie de competición bate récords sin líneas rojas, sin normas, sin límites. Bajo la premisa de ‘my body, my choice’, ex atletas reconocidas como Christina Smith, participante en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2002 en la categoría de Bobsleigh, defienden un evento que, tal vez, debería tener más de exhibición que de competición oficial: “Todo el mundo tiene la elección de hacer lo que sienta, no queremos forzar a nadie en ninguna circunstancia”, asegura en las entrevistas en medios norteamericanos donde ha participado.
Smith asegura que “yo era una deportista orgullosa de ser natural y que no estaba de acuerdo con romper las reglas, pero en los ‘Enhanced Games’ no hay una reglas para romper”. Con esta idea como bandera, y con un constante apoyo de su relato en los conceptos ‘ciencia’ y ‘mejora del rendimiento’, Smith y los defensores de los Juegos Mejorados refuerzan una línea de defensa alrededor de esta nueva competición.
“Los controles antidoping reprimen la ciencia, nosotros queremos celebrarla”
Curiosamente, la palabra ‘dopaje’ nunca es pronunciada, aunque todo gire en torno a ello: “Los controles antidoping reprimen la ciencia, y nosotros queremos celebrar la ciencia, por eso queremos celebrar conferencias durante los Juegos que hablen sobre ciencia y deporte. Nosotros estamos educando sobre ello, eliminando las sombras, facilitando prácticas para los deportistas y la gente en general”, explica Smith.
Los límites del cuerpo
Un evento deportivo que buscará conocer los límites del cuerpo humano, romper récords y llenar titulares con opiniones enfrentadas. Muchos, incluyendo billonarios como Peter Thiel, ex atletas como James Magnussen o el hijo del mismísimo Donald Trump, apoyan y alientan el crecimiento de estos Enhanced Games creados por Aron D’Souza y que contarán con pruebas de natación (50 metros libres, 100 libres, 50 metros mariposa, 100 mariposa), atletismo (100 metros lisos, 110 vallas) y halterofilia.
“Les pagaremos muy bien”
Todas, disciplinas explosivas y de corta duración. Los organizadores creen que podrán contar con 100 atletas, “y les pagaremos muy bien”, aseguran. Al fin y al cabo, parece que todo gira en torno a esto último: hacer ruido y ganar dinero.
En un universo deportivo en el que cada vez se incide más en la competición sana, limpia y se persiguen las trampas y las ayudas extra, los ‘Juegos Mejorados’ quieren ser el verso libre que empuje a los atletas hasta superar los límites de la ciencia, la tecnología y la farmacéutica, y eso preocupa a la comunidad médica.
Desde la organización, donde Christina Smith es una cara importante, aseguran que existirá un Comité Médico que analice y estudie la metodología para asegurar la salud, pero son muchas las entidades internacionales que han condenado esta iniciativa; la primera, la Agencia Mundial Antidopaje, pero también el Comité Olímpico Internacional o la Federación Internacional de Atletismo, entre otros.
Muchas son las teorías que defienden que una competición sana y creciente en el deporte no debe estar confrontado con las ayudas farmacológicas y dopantes. Ponen en el mismo escalón la evolución en la tecnología de los materiales de equipamiento deportivo, a la especialización creciente en la metodología de entrenamientos especializados para la alta competición deportiva y también a los avances en sustancias dopantes que mejoran el rendimiento del cuerpo de forma extranatural.
La polemica está servida
Un debate polarizante y también peligroso: ¿para qué competimos, para ganar o para batir récords?¿cuál es el objetivo de un deportista de élite, ser el mejor o inscribir su nombre en el libro de los récords?¿estamos hablando de deporte de competición, o de exhibición de capacidades hiper vitaminadas artificialmente?¿Gira todo en torno al dinero?
Esta última puede ser la pregunta con la respuesta más clara: sí, parece que todo gira en torno al dinero: más clicks, más visitas, más titulares, más récords, más trampas, más críticas, más monetización, más dinero. Más polémica, aunque sea a costa de matar aquello en lo que se lleva tantas décadas construyendo: un mundo del deporte más sano, más justo y más limpio. Un deporte sin trampas.
El próximo año, en Las Vegas, viviremos la triste exhibición del maltrato al cuerpo humano en pos de unos récords deportivos ensuciados antes siquiera de haberse conseguido. Han nacido los ‘Enhanced Games’.