¡Sin opciones! El camino de Cristina Bucsa en el US Open ha llegado a su final esta madrugada en los octavos de final. ¿La culpable? Ni más ni menos que Aryna Sabalenka, la tenista número 1 del mundo. La bielorrusa defiende su reinado en el Grand Slam estadounidense y ante Bucsa ha pisado el acelerador para acercarse un pasito más a revalidar su corona.
De antemano se sabía que el desafío que tenía ante sí Cristina Bucsa era de extrema dificultad. Jugar ante la mejor jugadora del mundo supone, entre otras cosas, tener siempre las de perder. Sin embargo, la jugadora española se marcha con la cabeza alta, habiendo alcanzado sus primeros octavos de final de un Grand Slam y con el aprendizaje de enfrentarse a la mejor tenista del circuito.
Además, la mejor de verdad. Aunque no haya conseguido ningún “Major” esta temporada, a falta de conocer el desenlace del US Open, Sabalenka se ha asegurado ya el número 1 mundial hasta la próxima temporada. El triunfo ante Bucsa (6-1 y 6-4) pone fin a las dudas sobre un reinado que amenazaban Iga Swiatek y Coco Gauff.
Sabalenka, una máquina perfecta
No es una novedad el juego que implementa Aryna Sabalenka cada vez que pisa una pista de tenis. Pero no por carecer de sorpresivo deja de ser asombroso ver el caudal de tenis que tiene en sus manos la bielorrusa. Es una máquina perfecta que combina su poderío físico con una agresividad que desborda a la mayoría de sus rivales.
Ante Bucsa no iba a ser una excepción. A veces pierde la paciencia, pero ni el conato de Bucsa de romper su primer servicio le iba a desestabilizar. Todo lo contrario. A engrasar la maquinaria y a demoler, física y mentalmente a una Cristina Bucsa que poca resistencia podía ofrecer.
A partir del 1-1, los juegos se sucedían a una velocidad de relámpago y en una misma dirección, a favor de Sabalenka. Así, un parcial de cinco juegos consecutivos ponían el broche a un primer set fugaz que se esfumaba en menos de media hora de juego. Era lo esperado, pero cada minuto en pista valía oro para Bucsa.
Sabalenka flies through the opener in 27 minutes! pic.twitter.com/gC7MyRBrP5
— US Open Tennis (@usopen) September 1, 2025
Un ritmo de bola de otro mundo
La española había sido clara desde el segundo uno en el que conoció que Sabalenka sería su rival en octavos. “Yo voy a intentar controlar lo que yo pueda y darlo todo, a lucharlo. Si hace un gran partido, bien por ella. Me impresiona la garra que tiene en pista”, afirmaba Bucsa. De ahí que, pese a no poder dar la sorpresa, cobre más protagonismo el aprendizaje que se lleva.
Y es que el ritmo de bola asombroso de Sabalenka no lo tiene el 95% del circuito. Impacta la facilidad para sumar “winners” con golpes tan veloces que se alejan del radio de acción de sus rivales. Bucsa lo ha comprobado en sus propias carnes, pese a plantar en el segundo set una batalla más que digna.
La española puede decir que ha llevado al límite de los nervios a la número 1. Cuatro bolas de break levantadas en un mismo juego para creer y prolongar un poco más su estancia en el encuentro. Un amago de rebeldía que la propia Sabalenka apagaba haciendo valer un break que era suficiente para cerrar su billete a los cuartos de final del US Open.
Diferentes caminos
Sabalenka sigue adelante en sus aspiraciones de no acabar la temporada sin un Grand Slam que añadir a su casillero. El US Open es territorio fetiche para la dominadora del circuito. Suyo fue el título en 2023 y en su propiedad está también el de 2024. Dos consecutivos y en busca de un tercero que le pondría a la altura de Serena Williams, la última mujer capaz de sumar tres coronas seguidas del “Major” estadounidense.
Por su parte, Cristina Bucsa hace las maletas en la modalidad individual, tiene por delante los octavos del dobles femenino, pero no se marchará de vacío de Nueva York. A las instalaciones del USTA Billie Jean King National Tennis Center llegó casi fuera del top 100 mundial. De él se marcha entre las 65 mejores, cerca de su mejor posición en el ranking WTA y asegurando su presencia en el Australia Open de 2026.