Granada no solo conquista a sus visitantes con la Alhambra, el Albaicín o el Sacromonte. La ciudad también guarda un secreto muy apreciado por locales y viajeros: es posible disfrutar de buena comida a precios muy bajos. Entre tapas, raciones y platos caseros, aún se encuentran bares y restaurantes en pleno centro donde comer por menos de 10 euros, sin renunciar al sabor ni a la calidad.
Casa Julio
Un clásico que parece detenido en el tiempo y que conserva el espíritu de los bares tradicionales de Granada. No hay mesas ni sillas, solo una barra donde se sirven cañas acompañadas de tapas gratuitas. Por unos 2,20 euros, la bebida viene con cazón en adobo, boquerones, fritura de pescado o las célebres berenjenas fritas. Si se quiere algo más, las medias raciones rondan los 5-6 euros. Casa Julio es parada obligada para quienes buscan autenticidad. Se encuentra en Calle Hermosa, 5.
Papas Elvira
Este pequeño restaurante, de inspiración mediterránea con toques árabes, es un paraíso para vegetarianos y veganos. Entre sus platos destacan la lasaña de verduras, el couscous, la pastela de calabaza, el hummus o la hamburguesa vegetal. Además, los precios son imbatibles: casi todo cuesta entre 3,50 y 5 euros. Y, por si fuera poco, los postres caseros merecen reservar un hueco. Se encuentra en Calle Elvira, 9
La Riviera
A la entrada del Albaicín, La Riviera se ha ganado la fama gracias a su ambiente familiar y a la generosidad de su tapeo. Por solo 2 euros la caña, se puede disfrutar de tapas variadas: croquetas caseras, chorizo al vino, patata asada o berenjenas a la miel. También ofrece raciones más completas a precios populares, lo que lo convierte en un imprescindible del centro. Se encuentra en Calle Cetti Meriem, 7.
Bar La Buena Vida
Sencillo, pequeño y siempre lleno. Ese es el mejor resumen de este local que se ha convertido en uno de los favoritos de los granadinos. Su carta mezcla montaditos, tapas y medias raciones a precios que rara vez superan los 6 euros. Con cada bebida (unos 2,20 euros) llega una tapa gratuita, lo que permite comer de manera abundante y económica. Un ejemplo de la gastronomía popular bien hecha. Se encuentra en Calle Almireceros, 12.
Taberna El Mentidero
Esta taberna es otro de esos rincones donde tradición y precio ajustado van de la mano. Entre sus propuestas aparecen los huevos rotos, los flamenquines, las habitas con jamón, alcachofas o fritura variada. Los entrantes oscilan entre los 3 y 8 euros, y aunque los platos principales pueden acercarse a los 12, la relación calidad-precio sigue siendo excelente. Una opción ideal para probar cocina casera en un ambiente acogedor. Se encuentra en Calle José Luis Pérez Pujadas – Edificio Fórum.
Comer barato en Granada, toda una experiencia
La cultura del tapeo en Granada hace que, con un presupuesto muy reducido, se pueda disfrutar de un almuerzo o una cena abundante. La clave está en esos bares que mantienen la tradición de ofrecer tapas gratis con cada bebida, lo que permite llenar la mesa con variedad de platos por muy poco dinero.
Para locales y turistas, recorrer estos restaurantes del centro es descubrir otro atractivo de la ciudad: la posibilidad de saborear recetas caseras y de siempre sin que el bolsillo sufra. En definitiva, comer en Granada por menos de 10 euros sigue siendo no solo posible, sino también una experiencia gastronómica que refleja la esencia hospitalaria de la ciudad.