El presidente en funciones de la Diputación de Almería, Ángel Escobar (PP), defendió este lunes la “ejemplar” decisión de dimitir por parte del expresidente de la institución, Javier Aureliano Molina, y del exvicepresidente segundo, Fernando Giménez, detenidos la semana pasada en la segunda fase del caso Mascarillas. Escobar subrayó que ambos renunciaron “por el bien de la institución”, en la que “han desempeñado sus funciones con honestidad” y siguiendo “una hoja de ruta inquebrantable”.
Durante el pleno extraordinario celebrado a petición del grupo socialista tras los registros de la UCO en la Diputación, Escobar ofreció a los grupos de PSOE y Vox “acceso a todos los expedientes de la institución” para fiscalizar la gestión. Además, reivindicó la labor de García y Giménez, a quienes atribuyó haber puesto “por delante los intereses de la provincia”, apelando al mismo tiempo al principio de “presunción de inocencia”, que consideró “un derecho constitucional y humano” vulnerado en este caso.
El dirigente popular rehusó “participar en un circo mediático” y aseguró que la Diputación seguirá funcionando con normalidad, avanzando en la aprobación de los presupuestos de 2026 tras la “generosa” renuncia de ambos dirigentes. Expresó además su deseo de que “la verdad se abra paso entre tanta especulación y desinformación”. Aprovechó para agradecer “la entrega de los trabajadores y funcionarios” y el “apoyo de los alcaldes y concejales” de la provincia, que “han demostrado la fortaleza y unidad del partido”.
Escobar recalcó que el Gobierno provincial “seguirá trabajando con un equipo sólido y cohesionado, respaldado por la confianza mayoritaria de los almerienses”, y garantizó que “el nombre de la Diputación y de la provincia estará siempre por encima de todo y de todos”.
El portavoz del PP y del equipo de gobierno, Carlos Sánchez, se mostró convencido de que en las próximas elecciones municipales el partido volverá a recibir el respaldo mayoritario de la ciudadanía. “Vamos a seguir defendiendo la institución provincial y manteniendo la normalidad que reclaman los alcaldes”, dijo, antes de repasar diversos casos judiciales que afectaron a dirigentes socialistas. Sánchez sostuvo que los gobiernos populares han ofrecido “los mejores años” a la provincia y que continuarán al frente de la institución “por encima de las circunstancias personales”.
Por su parte, el portavoz socialista, Juan Manuel Ruiz del Real, reprochó que el pleno no ofreciera explicaciones concretas sobre la investigación ni aclarara la situación del diputado y alcalde de Tíjola, José Juan Martínez, reclamando “medidas expeditivas”. A su juicio, el PP debe “limpiar mucho” en la Diputación, ya que el caso incluye expedientes desde 2016, “época de Gabriel Amat”. Denunció que “la imagen de la Diputación está dañada” y urgió a “abrir puertas y ventanas para airear”.
Ruiz del Real acusó a Aureliano García de ser, “al parecer, el jefe de un entramado criminal destinado a obtener comisiones ilegales mediante contrataciones públicas”, y criticó el “silencio cómplice” del presidente andaluz, Juanma Moreno. Aseguró que el PP “no ha dado una sola explicación” y que el daño a la imagen de la provincia coincide con la celebración del Festival Internacional de Cine de Almería (Fical).
Finalmente, el diputado de Vox, Pedro Agüera, reprochó que durante el debate “no se haya mencionado ni una sola vez la palabra responsabilidad ni auditoría” y acusó tanto al PP como al PSOE de “montar un circo” marcado por “la corrupción mutua”. Reclamó la apertura de una “investigación interna o externa” y denunció que ambos partidos “se protegen entre sí para mantener sus sillones”.
El pleno concluyó tras una breve sesión previa en la que se notificaron las renuncias y se acordó comunicar a la Junta Electoral la sustitución de los cargos vacantes en un plazo aproximado de veinte días.

