Este martes, el actor Gérard Depardieu, una de las caras más reconocidas del cine francés, ha sido condenado a 18 meses de cárcel -exentos de cumplimiento- por agresión sexual. Depardieu, a lo largo del juicio que arrancó el 24 de marzo, ha defendido su inocencia a pesar de reconocer que tuvo comportamientos “groseros” y de “otra época”. Sin embargo, los hechos que se juzgaron no tuvieron lugar en el siglo pasado, sino en 2021.
Dos mujeres de un mismo rodaje, el de la película ‘Les volets verts’, denunciaron al actor por haberlas agredido sexualmente. Finalmente, la Justicia las ha dado la razón.

“Una victoria” para Amelie K.
Tras conocerse por fin la sentencia, Amelie K., una de las denunciantes, declaró que estaba “muy conmovida” y satisfecha con el veredicto. Para la escenógrafa de 54 años, esto supone “una victoria, un gran paso adelante”.
Sarah, ayudante de dirección de 34 años, se ha mantenido en el anonimato y no ha dado declaraciones a los medios. Y es que hasta el juicio ha sido un drama para ellas. Carine Durrieu-Diebolt, abogada de Amelie K., contó a Artículo14 que “los métodos de la defensa fueron extremadamente violentos, con claros indicios de misoginia en los términos utilizados y en el tono empleado”.
Amélie K. describió cómo Depardieu, tras un pequeño desacuerdo, la atrapó entre sus piernas y la abrazó íntimamente. Sarah, ayudante de dirección de 34 años, detalló tres incidentes distintos en los que la “estrella” francesa la tocó de forma inapropiada. El juez consideró creíbles los testimonios de ambas mujeres, sin encontrar motivos para dudar de sus relatos sobre las acciones y comentarios lascivos de Depardieu.

Los comentarios de Depardieu
“Me sobó el trasero y los senos mientras profería palabras obscenas”, aseguró Amélie durante el juicio. De acuerdo con la escenógrafa, el actor le aseveró: “Ven a tocar mi gordo parasol, te lo voy a poner en la vagina”.
Mientras que cuando Sarah denunció a los responsables de Les volets verts los tocamientos de Depardieu, sólo logró que él la apartara de la dirección. Durante el juicio varias testigos recordaron su comportamiento en el rodaje. “Me dijo: ‘¿sabes quién soy? Déjate hacer, soy actor, tengo derecho. Las demás se dejan y tu acabarás por dejarte”. Otra le apartó le llegó a quitar la mano de su culo. Depardieu le respondió con un “vaya, pensaba que querías triunfar en el cine”, lo que provocó una carcajada del resto de los asistentes.

La decisión del tribunal reconoce el importante coste emocional soportado por las víctimas, concediendo a cada una 1.000 euros en concepto de indemnización por “victimización secundaria“, es decir, el sufrimiento adicional causado por el propio proceso judicial. Depardieu también ha sido inscrito en el registro francés de delincuentes sexuales.
Durrieu-Diebolt, la abogada de Amelie K., celebró el veredicto como una victoria no sólo para Amélie y Sarah, sino para todas las mujeres que han sufrido abusos similares en la industria cinematográfica. La abogada, especializada en violencia machista, critica que las mujeres víctimas tengan una doble pena: ante su agresor y ante el tribunal. Jérémie Assous, había acusado a las mujeres de mentir durante su declaración. Incluso Durrie-Diebolt denunció en Artículo14 que el abogado de Depardieu les llamó a ella y a la otra letrada insultos como “asquerosa”, “payasa”, “llorona”… durante el mismo juicio.

Con todo, la abogada espera que con esta sentencia, este caso marque el fin de la impunidad para las figuras poderosas de la industria. Su declaración, en la que hace referencia a “las otras víctimas de Depardieu”, apunta a un problema mayor de conducta sexual inapropiada que puede seguir oculto.
“Es la victoria de dos mujeres que trabajaban en el plató”, se hizo eco la abogada, “pero también la victoria de todas las mujeres víctimas de violencia, que incluso años después siguen marcadas por una experiencia tan traumática”.
Eso sí, Depardieu no asistió al tribunal para escuchar su sentencia. Se encuentra en otro rodaje de una película en las Azores.