Este martes, la comida publicada en exclusiva por este medio, celebrada entre la ministra portavoz, Pilar Alegría, y el cesado Francisco Salazar por los casos de acoso denunciados por sus trabajadoras, ha tenido cabida en el turno de preguntas de los periodistas.
Según ha sabido este medio, la ministra portavoz y quien iba a ser nombrado adjunto a la secretaría de Organización Socialista de no ser por las denuncias presentadas a través del diario.es, comieron este lunes en un céntrico restaurante madrileño.
Se da la circunstancia de que Alegría fue la ministra que más le defendió cuanto salieron a la palestra los casos denunciados. En un primer momento le definió como una persona “íntegra”, y después matizó su mensaje al conocerse su cese, que tachó de “paso necesario”.
“Ámbito personal”
La ministra ha afirmado que el encuentro “se circunscribe en el ámbito personal” con una persona que conoce “desde hace muchos años”, al que no veía desde hace tiempo.
El Gobierno de Sánchez, tras el cese de Salazar, prometió que se abriría una investigación para esclarecer los hechos. Una investigación de la que, a día de hoy, no se tiene constancia. Tampoco se tiene de si se ha abierto un expediente a Salazar, o si se ha dado cobertura a las víctimas. Según han explicado fuentes gubernamentales después de la rueda de prensa en Consejo de Ministros, que la ministra mantenga un encuentro con Salazar no significa que Alegría “avale ningún comportamiento”. Incluso, sostienen que el hecho de que la comida se produzca en un restaurante de un lugar céntrico de Madrid, en lugar de en un reservado, explica la “parte inocente de dicho encuentro”.
Y, respecto a las investigaciones que el Ejecutivo aseguró iba a abrir respecto a los casos de Salazar, estas fuentes sostienen que en ningún momento se dijo que se iban a producir, sino que las víctimas podían escribir en un canal interno de Presidencia. Al no haber sido utilizado, según aseveran, no se han podido dar más pasos adelante.


