El caso Montoro desbarata la estrategia del PP: “Vendrán mal dadas”

Génova reivindica su rapidez de actuación con el exministro, que asistió a la clausura del congreso de Feijóo. Voces del partido alertan del legado judicial de Rajoy

La imputación de Cristóbal Montoro desbarata, al menos en parte, la estrategia del PP de acorralar a Pedro Sánchez por la corrupción que le rodea. El principal partido de la oposición ha fiado gran parte de su éxito político en el futuro a conseguir que el PSOE “caiga” por los casos que cercan al presidente del Gobierno pero, este jueves, se vio en la obligación de tener que dar explicaciones por las presuntas irregularidades del otrora poderoso Cristóbal Montoro.

Así, el legado más negativo del expresidente Mariano Rajoy hace tambalear la hoja de ruta que el PP lleva tejiendo desde que irrumpió en la agenda pública y política la trama que tiene a José Luis Ábalos como uno de sus protagonistas. La decisión del juez de investigar al exministro de Hacienda por, presuntamente, beneficiar a empresas gasísticas desde el Consejo de Ministros, sentó como un jarro de agua fría en la sede de Génova13, y el reflejo de ello es cómo gestionó la respuesta oficial.

El legado de Rajoy

El PP está inquieto porque sabe que este caso –aunque no afecte a la actual cúpula popular- es munición política para el PSOE en su momento más débil. De hecho, desde Ferraz y Moncloa vieron una ventana de oportunidad y pusieron a ministros y a portavoces a intentar redirigir a Montoro el foco mediático y así tomar cierto aire político.

“Van a venir muy mal dadas”, aventuran fuentes populares consultadas por Artículo14. Explican que este es el primero de los “golpes” para el PP, que espera el devenir judicial del denominado caso Kitchen. “De aquí a que salga todo lo de Jorge Fernández Díaz con Villarejo, no hay nada”, se sinceran quienes conocen la situación interna del partido de antes y ahora. Y es que la Audiencia Nacional ha fijado para mayo de 2026 el juicio que sentará en el banquillo al exministro del Interior y a la cúpula de su departamento por el presunto espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas en 2013 para conseguir documentos del caso Gürtel.

Veteranos dirigentes advierten, además, del “error” de Feijóo de haberse rodeado en el congreso nacional del PP del expresidente Mariano Rajoy. “Él nos hundió”, claman veteranos del PP.

Y es que Montoro fue un ministro muy relevante durante el Gobierno de Mariano Rajoy y, de hecho, hasta hace dos semanas, se le pudo ver en actos del partido, como en la clausura del cónclave donde fue reelegido Alberto Núñez Feijóo como presidente del PP. “No nos llega en un buen momento, no”, reconocen en una comunidad que regenta el partido. En el partido consideran que el caso Montoro es “muy inoportuno” y que estropea “parte de la estrategia” que ha puesto en marcha el presidente nacional. Eso sí, dicen, “presunción de inocencia igual que a Cerdán y a Ábalos”, como vía de prudencia.

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, y el expresidente Mariano Rajoy

El caso Montoro era el tema “tabú” en el partido en las primeras horas desde que saliera a la luz la noticia. De hecho, el PP negaba primero haber abierto cualquier proceso de investigación sobre Montoro y ni siquiera aclaraba si Montoro seguía siendo o no afiliado del PP. Fueron casi 20 horas después cuando Génova empezó a dar señales. La respuesta fue la de tratar de distanciarse con el “caso Montoro”.

El primer miembro de la dirección nacional en marcar la posición fue el vicesecretario de Hacienda, Juan Bravo, que descargó en el exministro las explicaciones y distinguió el caso de las “mordidas y prostitutas” vinculadas con los casos Ábalos y Cerdán del PSOE. Hasta ahí. Después, Génova confirmaba ese desmarque. Feijóo responderá por su equipo del mismo modo que Sánchez ha de responder por el suyo. No tiene vinculación laboral con el equipo de Feijóo ni con el PP actual”, respondían en el PP.

Feijóo presume de celeridad

A medio día de este jueves Génova confirmaba que Montoro había comunicado su decisión de dejar su “condición de afiliado”. Y, explicaban que el Comité de Derechos y Garantías del PP había decidido anoche la apertura de un “procedimiento de información” relacionado con el caso. Y es que los estatutos del PP contemplan la apertura de un expediente o la expulsión de militancia en caso de apertura de juicio oral. Un procedimiento que quedó en suspenso después de pedir Montoro la baja.

Feijóo quiso así sacar pecho de haber actuado rápido ante el caso frente a los “dieciséis meses” que tardó José Luis Ábalos de salir del PSOE tras su imputación. Las fuentes oficiales del PP recuerdan además que Montoro no ha sido nombrado ni por la actual dirección nacional ni por la anterior.