Al sur de Cataluña, entre viñedos del Priorat y las escarpadas sierras de Prades, se esconde un lugar que literalmente, ha quedado perdido en el tiempo. Este pueblo abandonado de Tarragona, que lleva en este estado desde los sesenta, tiene un aura de misterio. Está rodeado de paisajes espectaculares y envuelto de leyendas que atraen a curiosos, senderistas y amantes de la historia.
El misterioso pueblo abandonado de Tarragona
A diferencia de los típicos destinos turísticos, este lugar ofrece una experiencia alternativa, donde la naturaleza reclama poco a poco las ruinas de sus casas de piedra, y las vistas panorámicas del Baix Camp dejan sin aliento a los visitantes. Su nombre es La Mussa.
Fue un pequeño pueblo agrícola y ganadero situado a 900 metros de altitud. Su declive comenzó poco antes de la mitad del siglo XX, debido al éxodo rural vivo en gran parte de España. La falta de servicios básicos y de oportunidades llevó a sus habitantes a abandonarlo definitivamente a principios de 1960.
Actualmente, solo quedan en pie algunos muros. Destaca la antigua iglesia de Sant Salvador (del siglo XVIII) y el cementerio, cuyas cruces son una prueba del pasado de esta comunidad. Algunas albergan flores y detalles, dando fe de que los descendientes de los antiguos habitantes de este lugar no han olvidado sus raíces. Su aislamiento y estado de abandono lo han convertido en un lugar fascinante para explorar.
Además de su historia, La Mussara es conocida por sus leyendas sobrenaturales. Se dice que aquí ocurren fenómenos extraños, como desapariciones de personas y destellos de luces misteriosas. Una de las historias más famosas es la de Villa del Sis, que gira en torno a una piedra junto a un caserío. Se dice que es un punto donde se cruza a otra realidad.
Hay quienes vuelven sin recordar nada, y otros que directamente no regresas, o eso dice la leyenda. Algunos visitantes han experimentado pérdida del sentido del tiempo y de la orientación en algunos lugares del extinto pueblo. Estos relatos han atraído a investigadores de lo paranormal, así como a turistas que buscan vivir una experiencia diferente.
Naturaleza y deporte en La Mussara, más allá de leyendas
Lejos de las historias en torno a este pueblo abandonado en Tarragona, aparte de sus ruinas, se pueden ver las vistas y seguir los diferentes senderos que pasan por allí. La que lleva a la Font del Roure vale mucho la pena, así como la ruta circular con Avencs de la Febró.
El lugar da nombre a Mussara Cycling, un grupo que promueve el cicloturismo por la zona y organiza diferentes marchas y recorridos. Organizan la marcha con más mujeres de toda Europa, y tratan de enseñar la historia de esta y las otras localizaciones por donde circulan.
La Mussara es una ventana a la vida rural de antaño y un escenario perfecto para los amantes del deporte, la fotografía y el misterio. Si buscas un rincón poco turístico y lleno de carácter en Tarragona, cerca de Reus, este enclave te sorprenderá. ¿Te atreves a explorarlo?