El alcalde de la huelga de hambre es Agustín Jiménez Crespo, regidor socialista de Noblejas (Toledo), que inició este lunes 18 de agosto de 2025 un ayuno indefinido para exigir la construcción de un instituto de educación secundaria en su municipio. Esta protesta busca visibilizar una reivindicación histórica ignorada por las autoridades regionales desde 2007, en lo que ya se perfila como una historia de película que combina persistencia, dramatismo político y una firme apuesta por el futuro educativo de los vecinos.
Agustín Jiménez Crespo es alcalde de Noblejas desde 1983. Ha revalidado su mandato en diez ocasiones consecutivas. Eso refleja su larga implicación con la comunidad local. Con 76 años y a pesar de haber superado un cáncer de pulmón agresivo, se ha lanzado a esta nueva protesta con una determinación inquebrantable. El alcalde de la huelga de hambre representa una mezcla de veteranía política, coraje personal y compromiso municipal.
¿Cuál es el origen y el motivo de la huelga de hambre del alcalde de Noblejas?
La decisión del alcalde de la huelga de hambre surgió tras años de espera y denuncias. Desde 2007, Noblejas ofreció terrenos y financiación para levantar un instituto que la Junta de Castilla-La Mancha aprobó en 2011, pero nunca construyó.
En una misiva dirigida al presidente Emiliano García‑Page, Jiménez criticó el “silencio atronador” e incluso evocó un “asqueroso sectarismo” por parte del gobierno regional. Ante la falta de avances, optó por esta medida radical y simbólica, como ya anunció días antes y cumplió a las 0:00 horas del lunes 18 de agosto.
Desde su inicio, el alcalde de la huelga de hambre ha declarado que sostendrá la protesta “sin más límite que el que mi fortaleza física me permita”. Una frase que resume la gravedad y la entrega de su gesto. El teniente de alcalde, Ángel Luengo, informó que Jiménez se encuentra bien de ánimo y salud en esta primera fase. Sin embargo, su entorno expresa preocupación por su condición médica y edad.
La reacción institucional de la Junta de Castilla
La Junta de Comunidades de Castilla‑La Mancha, a través de la portavoz Esther Padilla, lamentó la protesta y defendió que “la planificación educativa no puede responder a la demanda de un alcalde”, insistiendo en que ya se proyecta un nuevo instituto en Ocaña por criterios técnicos y demográficos.
El caso del alcalde de la huelga de hambre ha generado amplio eco mediático y repercusión política. La protesta ya ha llegado al ámbito federal del PSOE y a los grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados. En el municipio, la campaña ciudadana “Instituto en Noblejas Ya” ha recogido más de 2.500 firmas, un apoyo que refleja el peso de esta demanda histórica.