La cultura española alza la voz contra la guerra y lo hace en bloque. Más de 1.200 profesionales del cine, el teatro, la música, la literatura y los medios de comunicación han firmado una carta dirigida al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la que reclaman un embargo inmediato de armas y material de defensa a Israel. La misiva, leída este lunes en un acto celebrado en Madrid, exige que el embargo se decrete por Real Decreto Ley y sitúa a España frente a una disyuntiva moral y política: “¿A qué está esperando?”
La iniciativa, impulsada por la Campaña Fin al Comercio de Armas con Israel —plataforma que agrupa a más de 600 organizaciones de la sociedad civil—, busca que el Ejecutivo dé un paso al frente en la defensa de los derechos humanos y deje de ser cómplice, por inacción, del sufrimiento del pueblo palestino. En un acto celebrado en el Teatro del Barrio, trece rostros conocidos del ámbito cultural tomaron la palabra para leer fragmentos de la carta, entre ellos María Botto, Luis Tosar, Nathalie Poza, Samantha Hudson, Carlos Bardem, Inés Hernand o Carmen Asecas.

“España no puede seguir exportando e importando material militar ni permitiendo el tránsito de armas o combustible con destino a un estado que lleva décadas cometiendo crímenes de guerra contra la humanidad”, leyó Luis Tosar. Sus palabras fueron un eco de la indignación creciente entre amplios sectores culturales, que perciben con desasosiego cómo el discurso político se queda corto ante la magnitud del horror en Gaza.+
Un mensaje directo contra Pedro Sánchez
Desde la organización promotora del acto señalaron que “las palabras no bastan para detener un genocidio”. El mensaje a Pedro Sánchez fue directo: “Está muy bien que vaya a Europa y diga que hay que acabar con el tratado preferente de asociación entre Europa e Israel, pero necesitamos actos, necesitamos medidas”.

Carlos Bardem fue tajante al afirmar que “la cultura que no denuncia es colaboracionista. La cultura tiene que ser siempre contestataria y crítica”. La actriz Carmen Asecas, por su parte, añadió: “No entiendo el arte sin ser consciente de lo que pasa a mi alrededor”. Es un posicionamiento que destierra la neutralidad y subraya que el mundo cultural, lejos de mantenerse al margen, reclama un compromiso real con la justicia global.
La carta —respaldada por voces como las de Alba Flores, Victoria Luengo, Elena Anaya, Rodrigo Sorogoyen, Rodrigo Cuevas, Cristina Saavedra o el poeta Benjamín Prado— apela al “Gobierno más progresista de la historia de España” para que actúe con la firmeza que exige la situación. “El pueblo palestino no tiene que ser resiliente, tiene que ser feliz. Y la mejor manera de acompañarlo es dejar de armar a su opresor”, leyeron en conjunto.
Los firmantes reconocen los pasos previos dados por el Gobierno, como el posicionamiento diplomático de Pedro Sánchez, pero insisten en que “no son suficientes”. Denuncian que “las masacres continúan y España aún no está actuando con la contundencia que exige la gravedad de la situación”.
La misiva, contundente y emocional, concluye con una demanda clara: que España se convierta en ejemplo internacional y abandere desde el Gobierno una política exterior basada en la justicia, la paz y la defensa efectiva de los derechos humanos. Porque, como advirtieron durante el acto, “esta es una oportunidad que se tiene ahora. No más adelante”.