La actriz española Verónica Echegui, de 42 años, falleció este lunes en el Hospital 12 de Octubre de Madrid como consecuencia de un cáncer renal, una enfermedad que mantuvo en privado. La confirmación fue compartida por su entorno más cercano. Verónica Echegui, cuyo nombre completo era Verónica Fernández de Echegaray y nacida el 16 de junio de 1983 en Madrid, había sido ingresada días antes y se encontraba recibiendo tratamiento.
La noticia de su fallecimiento ha causado una ola de tristeza y consternación en el mundo del cine, la televisión y entre el público que la admiraba por su talento, su autenticidad y su valentía interpretativa.
Carrera marcada por la autenticidad
Verónica Echegui irrumpió en la escena cinematográfica con una fuerza arrolladora en Yo soy la Juani (2006) de Bigas Luna, encarnando a una joven decidida a romper moldes y afirmar su identidad. Ese papel le valió una nominación al Goya a actriz revelación y la convirtió, desde entonces, en una figura prominente del cine español contemporáneo.
Impactado, sin palabras. Qué tristeza y qué pena tan grande. Qué desolación. Mucho dolor. No me lo puedo creer. pic.twitter.com/ADlw4eFSPI
— Daniel Guzmán (@danielguzman) August 25, 2025
Tras su debut impactante, su filmografía incluyó títulos como El menor de los males, que le otorgó la Biznaga de Plata en Málaga; Katmandú, un espejo en el cielo (Icíar Bollaín, 2011), por el que fue nominada al Goya y recibió el Premio Gaudí; Explota Explota (2020), con Goya y Feroz de reparto en su haber; La ofrenda (2020), que le valió otro Gaudí de reparto; y la comedia romántica Book of Love (2022) para Amazon Prime, junto a Sam Claflin.
Además, su debut como directora, el cortometraje Tótem loba (2021), ofreció una mirada feminista desde una experiencia personal, y fue galardonado como mejor ficción en los Premios Goya.
En televisión, destacó en Intimidad de Netflix, Los pacientes del doctor García, y estrenó como protagonista la serie A muerte (2025) para Apple TV+, producida por Dani de la Orden, donde interpretó a Marta, una mujer que vive una conexión intensa tras reencuentro con su amigo de infancia, Raúl. También participó recientemente en la película Yo no soy esa (2024), dirigida por María Ripoll.
Despedidas en redes y entre colegas
Desde el anuncio de su fallecimiento, numerosos colegas del gremio cinematográfico y televisivo han compartido emocionados mensajes en redes sociales. Pedro Sánchez, presidente del Gobierno en funciones, expresó su pésame y elogió su profesionalismo y humildad, destacando la pérdida que supone para el cine español.
El actor Antonio Banderas compartió hoy una publicación en la que lamenta profundamente la pérdida: “Verónica era un torrente de vida. Hoy, ese torrente se ha detenido demasiado pronto”. Maribel Verdú recordó su cercanía en rodajes y su capacidad para iluminar cualquier escena con su presencia: “Más allá del talento, siempre fue Verónica. Una amiga generosa y entregada”.
Carolina Bang destacó su fuerza interior: “Su valentía como creadora solo era comparable con su ternura como persona”. Miguel Ángel Muñoz, compañero en platós y festivales, añadió: “Nos deja un vacío inmenso. Siempre admiré su intuición, su honestidad en la interpretación”.
Su equipo más íntimo también compartió sus palabras desde el dolor de la despedida. Su agente publicó: “Verónica fue una estrella desde el primer día, pero también fue lealtad, compañerismo, generosidad. Echaremos de menos su risa en el plató y sus ideas en el guion”. La producción de A muerte le rindió homenaje con un mensaje en Instagram: “Una actriz insustituible. Hoy perdemos mucho más que a una protagonista: perdemos a una voz sincera e irrepetible”.
Sergio Peris-Mencheta ha escrito en X que quedan conversaciones pendientes entre ambos y acaba: “Amiga, nos vemos del otro lado. Hasta entonces, no nos quites ojo… Nos dejas rotos, Vero”. La actriz y presentadora Bibiana Fernández expresó su conmoción por la noticia del fallecimiento de Verónica Echegui. Comentó que, aunque no eran amigas, coincidir con ella siempre había sido una alegría, y recordó su admiración por la actriz y por su calidad humana.
El presidente de la Academia de Cine, Fernando Méndez-Leite, expresió a las puertas de tanatorio: “Ha sido una actriz soberbia, que nunca fallaba y que tenía siempre un brillo y una capacidad de cambiar y de moverse con naturalidad en todo”. “Estaba en la madurez de su carrera en un momento estupendo y desde el primer momento llamó la atención del público y de la crítica con ese personaje inolvidable que marcan para siempre la historia del cine español”.
También Cayetana Guillen Cuervo, presidenta de la Academia de las Artes Escénicas, la ha recordado como “una niña buena, llena de luz”. Y aunque ha reconocido saber de la enfermedad de la actriz, también aseguraba que su muerte ha sido “una cosa rara”: “Me enteré por una amiga. Sabía que estaba enferma, pero no pensaba que era tan grave”.
¿Cómo se supo la causa real?
Aunque su fallecimiento sorprendió, fuentes cercanas y allegados confirmaron que Verónica Echegui llevaba tiempo enfrentando una dolencia grave pero inédita; el comunicado oficial de su equipo aclaró que la causa fue el cáncer, evitando especulaciones o interpretaciones superfluas. Se trató de una despedida discreta, sin circulares oficiales ni notas escenográficas, acorde a la intimidad que la actriz mantuvo durante su tratamiento y en los momentos finales.
La discreción también fue parte de su despedida: falleció rodeada de su familia y su pareja, sin presencia mediática en el hospital y con la voluntad de despedirse en privado. Su entierro se realizará en una ceremonia reservada, centrada en su intimidad.
Una señal dolorosa para la cultura
La muerte de Verónica Echegui interrumpe una trayectoria en plena expansión y deja una marca en quienes la veían como un símbolo de integridad artística, feminismo honesto y autenticidad interpretativa. Su mirada abierta, su humor valiente y su entrega con cada personaje hicieron de ella una figura única, capaz de convertir roles marginales en retratos universales.