Este 27 de agosto, ha llegado a Disney+ España la película más infravalorada de Marvel Studios entre sus últimos lanzamientos: Thunderbolts*. La obra se estrenó en los cines españoles el 30 de abril de 2025.
Se trata de una película inicialmente aclamada por la crítica, con un enfoque muy diferente sobre la salud mental al que estamos habituados en este tipo de producciones. Pero poco a poco fue cayendo en taquilla, resultando en un fracaso en ese aspecto para Marvel Studios y Disney.
La película más infravalorada de Marvel Studios en tiempos recientes

El Universo Cinematográfico de Marvel no ha terminado de levantar cabeza en estos últimos años. Al margen, eso sí, de dos rotundos éxitos con Spider-Man: No Way Home (2021) y Deadpool y Lobezno (2024), con más de mil millones de dólares en beneficios en cines cada una.
El resto de películas han resultado decepcionantes en términos económicos. Thunderbolts* no es una excepción, con unos 380 millones de dólares de recaudación y un coste de producción de unos 180 millones de dólares.
Son muchas las teorías tras este tropiezo en cines: la falta del suficiente marketing en favor de la obra, el reparto de personajes secundarios (sin grandes caras reconocidas del universo), la comentada fatiga del cine de superhéroes…
Sea cual sea motivo, el único hecho objetivo es que el particular grupo de repudiados de Marvel no ha funcionado en la gran pantalla. Ahora, con su llegada a Disney+, se abre la puerta a que muchos espectadores le den una nueva oportunidad a la película más infravalorada de Marvel Studios en tiempos recientes.
Por qué ver Thunderbolts* ahora en Disney+
Los suscriptores al servicio de streaming de Disney pueden ver sin coste extra la película dirigida por Jack Schreier (Ciudades de papel, Robot & Frank). En ella, el director aborda temas que apenas se tratan en películas de este estilo.
El más importante de todos, el de la salud mental. Situaciones y sentimientos relacionados con el trauma, la depresión, el vacío existencial y la redención. Todos los personajes, especialmente Yelena y Bob, han sufrido de una o varias maneras, y no saben muy bien cómo lidiar con estos problemas.
La brillante Florence Pugh carga con el protagonismo de la película y su drama emocional. Aunque al ser de reparto coral, también vemos varios momentos destacados de cada uno de los integrantes de este equipo improvisado que deciden llamar Thunderbolts.
El villano del film no es nada tradicional, y yendo más allá de la típica batalla final de héroes y villanos, requiere una resolución psicológica al representar los traumas internos de los personajes. Estos, lejos de ser héroes perfectos, son personas que cargan muchos problemas y que no siempre han actuado según “lo correcto”.
Estos solo tratan de encontrar su lugar, de sanar sus heridas y de encontrar a gente que les entienda. Y el máximo exponente de esto lo hallamos en la amistad entre Yelena y Bob, que acaba siendo realmente genuina y sanadora en muchos sentidos.
También tiene a su favor que es una película bastante autocontenida, e incluso autoconclusiva. La historia es satisfactoria y se puede ver por sí misma, aunque te hará comprender mejor los dilemas morales de los personajes haber visto antes sus obras dentro del universo compartido.
En todo caso, cuenta con sus implicaciones a futuro al final, cuando se resuelve la incógnita en torno al asterisco del título de la película.
Sin duda, es la película más infravalorada de Marvel Studios, y merece las dos horas que dura de tu tiempo si aún no le habías dado la oportunidad.