Los depósitos han dejado de ser ese refugio cómodo que permitía al ahorrador obtener una rentabilidad sin sobresaltos. Salvo promociones puntuales, su retribución rara vez supera el 1,5%, y la media se sitúa por debajo del 1%. Y si uno mira a las Letras del Tesoro, la decepción puede ser mayor: las emisiones que se contrataron hace un año con rentabilidades por encima del 3% están siendo renovadas ahora por debajo del 2%.
Para muchos, esta pérdida silenciosa frente a la inflación se está convirtiendo en una llamada a la acción. La solución, sin lanzarse de lleno a la renta variable, puede estar en los fondos de dividendos: vehículos que invierten en compañías que reparten beneficios de forma recurrente, y que permiten al inversor obtener una “paga extra” año tras año.
Un clásico europeo con sello BlackRock
Una de las opciones mejor valoradas por los expertos y seleccionada por Morningstar como fondo destacado en su categoría es el BGF European Equity Income, de BlackRock. Con un enfoque claro en compañías europeas que reparten dividendos sostenibles y crecientes, este fondo combina un perfil conservador con rentabilidades sólidas.
Entre sus principales posiciones encontramos a gigantes como Allianz, Nestlé y Unilever, y sectores clave como servicios financieros, consumo defensivo e industria tienen un peso destacado en la cartera. Su trayectoria a medio plazo, superando el 7% anualizado, lo convierte en una alternativa idónea para sustituir depósitos a plazo.
Fidelity y su fórmula ganadora en Europa
Dentro de la misma región, pero con un matiz distinto, destaca el Fidelity European Dividend Fund, que aporta una mayor exposición al Reino Unido (27%) además de la zona euro. Su rendimiento ha sido excepcional, con un 13,06% anualizado a cinco años, y su cartera refleja un enfoque equilibrado entre defensividad y rentabilidad.
Sectores como servicios financieros (26,7%), industria (16,3%) y consumo defensivo (16,2%) dominan su composición, con apuestas destacadas en Ferrovial, Inditex y TotalEnergies. José María Luna, analista financiero y socio de Luna Sevilla Asesores Patrimoniales, recomienda este fondo por su comportamiento sólido en distintos escenarios de mercado.
Saltamos al escenario global: DWS Top Dividend
Y si lo que se busca es diversificación geográfica, otro de los fondos globales recomendados por Luna más consistentes es el DWS Top Dividend. Con inversiones en Estados Unidos (36,7%), Europa y Canadá, su exposición está bien repartida entre sectores defensivos: salud (16,7%), energía (11,2%) y tecnología (10,3%).
Entre sus principales participaciones destacan nombres como Agnico Eagle Mines, Shell, Deutsche Telekom o Taiwan Semiconductor. Su capacidad para generar más del 10% anualizado a cinco años, a pesar de un entorno complejo, lo sitúa entre las referencias del segmento global de dividendos.
Invesco y los aristócratas del dividendo
Otra alternativa global de referencia es el Invesco Global Equity Income Fund, también en la órbita de recomendaciones de Luna. Este fondo tiene como eje las compañías conocidas como “aristócratas del dividendo”, aquellas que han aumentado sus pagos durante al menos 25 años consecutivos. Aunque los datos más específicos sobre exposición sectorial y geográfica no están tan detallados, el fondo se caracteriza por su consistencia en ingresos y su vocación de estabilidad.
En su cartera es frecuente encontrar nombres como PepsiCo, Procter & Gamble o Johnson & Johnson, y algunas de sus clases están cubiertas al euro, lo que protege al inversor del riesgo divisa.
J.P. Morgan: calidad europea con visión estratégica y alta rentabilidad
Por último, y para cerrar la lista, incorporamos otro fondo europeo incluido en la selección de Morningstar, el JPM Europe Strategic Dividend Fund, y que ha ganado popularidad en los últimos años por su enfoque claro en compañías europeas de calidad y dividendo elevado. Gestionado por Michael Barakos y Thomas Buckingham, este fondo presenta una rentabilidad anualizada del 13,77% a cinco años, y un perfil de riesgo bajo-moderado.
Su exposición sectorial está liderada por servicios financieros (30,9%), industria (14,1%) y salud (7,4%), con posiciones destacadas en Roche, SAP, Novartis, HSBC y posiciones líquidas de muy bajo riesgo. Además, su distribución geográfica combina zona euro (55,8%) y Reino Unido (24,2%), proporcionando una visión completa del ecosistema europeo del dividendo.
Conclusión
Estos cinco fondos representan una alternativa real y rentable para aquellos inversores que buscan dar un paso más allá de los productos tradicionales de ahorro. Todos ellos permiten acceder a compañías bien gestionadas, con políticas de reparto estables, y con el respaldo de gestoras de primer nivel. Con horizontes de inversión de medio plazo (al menos tres años), pueden convertirse en una excelente fuente de ingresos periódicos, con un rendimiento potencial que dobla o incluso triplica el que hoy ofrecen los depósitos o la deuda pública a corto plazo.