Con cada vez más productos virales en el mundo del skincare, cada vez es más difícil saber cuáles cuentan con un amplio respaldo científico y cuáles no. Uno de los que sí lo tiene es la niacinamida, o ácido nicotínico, que es una forma de vitamina B3. Aunque mucha gente aún no sabe para qué sirve.
Este producto para el cuidado facial, de múltiples beneficios, es de alta tolerancia. Esto facilita su uso incluso en pieles más sensibles o con grasa, ayudando a lograr una piel más luminosa, firme y uniforme.
Qué es y cómo actúa la niacinamida

La niacinamida es una coenzima esencial que penetra en la piel y ofrece un gran abanico de propiedades.
Entre otras, es antioxidante y antiinflamatoria. Combate el daño que causan factores como la contaminación y la exposición solar, a la par que reduce la inflamación y el enrojecimiento de afecciones como el acné.
Además, es seborreguladora, reduciendo el brillo y el sebo de la piel. Por eso hay muchas mujeres con la piel grasa que la utilizan.
Y no sólo eso, pues también fortalece la barrera cutánea. Una buena protección minimiza la pérdida de agua, y mejora la hidratación, la elasticidad y la resistencia frente a los agentes nocivos externos.
Sus efectos y su eficacia cuentan con diferentes estudios a favor. Algunos de ellos, publicados por el British Journal of Dermatology de la Universidad de Oxford.
De acuerdo con los científicos, la niacinamida reduce eficazmente los poros y las imperfecciones, reduciendo el exceso de grasa y otras acciones.
Además, combate la hiperpigmentación de la piel, pues inhibe la transferencia de los melanosomas (paquetes de melanina). De igual manera, ayuda a la función barrera y el antienvejecimiento de la piel.
Combina y vencerás: el poder de la unión

La cosmetóloga argentina Sasha Sambán, de Laboratorio Molecular, no sólo explica para qué sirve la niacinamida. También aconseja su combinación con otros productos para maximizar sus beneficios.
De acuerdo con Sambán, las combinaciones más eficaces son con ácido hialurónico, retinol y retinoides, y ácidos AHA/BHA.
Con el primero, maximiza la hidratación a menudo superficial del ácido, ya que esta llega a rellenar la piel.
Asimismo, juntada con los retinoides, se puede realizar una unión poderosa de efecto anti-acné. Ya que la niacinamida protege los posibles efectos de sequedad e irritación del retinol.
Finalmente, con ácidos como el salicílico y el glicólico, se reúnen las capacidades de desobstrucción de poros y tratamiento de granitos con la limpieza profunda y el alisamiento de la piel del rostro que esta ofrece. Un combo ganador.
La experta también avisa que es común verla en formato de 5% o 10%. Ella aclara que los principales beneficios ya se notan con una concentración del 5%, ya que un porcentaje mayor puede llegar a irritar algunos tipos de piel.
Así que ya sabes que la niacinamida cuenta con el respaldo de los profesionales, y es muy efectiva, siendo una de las mejores opciones para cualquier rutina de cuidado facial.


