¡Esto es Halloween! y con esta fiesta ha llegado a todos nuestros hogares la performance de lo gótico y tenebroso, decorado con un toque de colores naranja y negro. En esta época no faltan las calabazas, las velas y las películas míticas como ‘Pesadilla antes de Navidad’ o ‘La noche de los muertos vivientes’ para ver en la noche de Todos los Santos.
El público es variado y traspasa lo generacional: unos se visten de fantasma, bruja o portan el mítico traje de esqueleto. Cada viandante puede pasear por calles y notar que los locales tienen telas de araña en sus vitrinas y los supermercados ofrecen dulces y chocolatinas para la ocasión.
Sin embargo, hay quienes quieren llevar estos días a otro nivel y convertir los looks tenebrosos en verdadero arte.
Ella sabe que supera los estándares: Heidi Klum es la reina indiscutible de la noche, que ha convertido sus disfraces en una referencia el 31 de octubre. Esta vez, nos ha sorprendido con un traje de medusa, que nada más verlo se puede intuir los meses de trabajo y planificación -en concreto, seis meses- que ha llevado conseguir ese efecto tan realista. Klum no solo lleva el traje, ella se convierte en medusa performando sus movimientos y comportamiento. No es fácil conseguirlo: han sido nueve horas en la silla de maquillaje y 15 personas trabajando en su elaboración.
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Ver a Klum posando con ese pesado traje nos hace creer que estamos viendo la versión real de la joven castigada por Perseo. La mítica leyenda griega ante nosotros y en nuestras redes sociales.
Y no nos ha dejado de piedra mirarla directamente a los ojos, pero sí ha sorprendido la calidad de los detalles del disfraz de la modelo, como siempre hace. No es la primera vez que Klum provoca conjeturas sobre con qué nos sorprenderá esta vez. Y, al igual que con las campanadas de Nochevieja y el vestido de la presentadora Cristina Pedroche, el ritual es preguntarse “¿con qué nos sorprenderá esta vez?”.
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Klum ha llevado otros disfraces en la noche de Halloween que no han dejado indiferente a nadie: Jessica Rabbitt, un pavo real, ET y un gusano espeluznante. Además, lo interesante no es que la modelo porte un llamativo disfraz, es que podemos notar cómo le apasiona esta época del año y el cariño que pone a su elaboración. No es solo performance, es actitud y ganas de pasárselo bien. Halloween, en sus manos, deja de ser una fiesta para convertirse en un acto de imaginación.
En el caso del mítico alienígena de la película E.T, ella capta la esencia y recrea tan bien al personaje que parecía que el público iba a subirse con ella a la bicicleta voladora, rumbo a la luna llena. Y es que Klum y su equipo hacen cada año un viaje sobre personajes que hemos conocido a través del mundo del cine y la televisión.
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No solo hay personajes terroríficos o míticos, también algunos plantean la cuestión de si ella forma realmente parte del disfraz. En este caso, ella es el gusano gigante, plantea la cuestión de cómo es capaz de portar el traje en una pose cómoda.
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Klum nos sorprenderá cada año con un disfraz de Halloween y nosotros estaremos cada octubre expectantes sobre en qué se convertirá la modelo para hacer de la noche del terror un espectáculo de arte y creatividad.