LA ESTRATEGIA DEL PP

Feijóo ordena una “oposición sin cuartel” a Sánchez en el Congreso

La Cámara Baja abre sus puertas con un Feijóo muy duro contra Sánchez, con “el regalo” de la víspera por el choque total entre Díaz y Montero

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, participa en el acto conmemorativo del 20º aniversario de la Ley contra la Violencia de Género, este lunes en Madrid. EFE/ Javier Lizon

Empieza oficialmente el curso parlamentario. El Congreso de los Diputados acoge este miércoles la primera sesión de control al Gobierno de 2025. Y Alberto Núñez Feijóo irá al choque completo con Pedro Sánchez, según fuentes de su entorno. El PP centrará el debate en su “extrema debilidad” parlamentaria, los líos en el seno del Gobierno y los múltiples problemas judiciales que le rodean.

En Génova adelantan que la jornada será “dura en términos parlamentarios” para Sánchez. Feijóo quiere dejar claro que la votación del segundo decreto ómnibus del Gobierno, que su partido apoyará, es “algo circunstancial” y que continúa “la oposición sin cuartel a Pedro Sánchez”. Así se lo exigió a sus diputados y senadores, con los que se reunió este martes. Fuentes de su entorno aseguran que el objetivo del PP sigue siendo el mismo: “Ofrecer una alternativa seria a los españoles” y “no pasar ni una” al Gobierno, que cerró el último pleno de 2024 acumulando hasta 74 derrotas parlamentarias.

Feijóo aprovechará el control al Ejecutivo para exhibir, de nuevo, los presuntos casos de corrupción que salpican al entorno del Ejecutivo. Y este tema ocupará gran parte de la sesión, a tenor de las preguntas registradas por su grupo parlamentario. La estrategia es clara, indican fuentes de la dirección: “Deslegitimar a un presidente rodeado de escándalos”.

El ministro de Justicia, Félix Bolaños, se verá sometido a interrogatorios por distintas cuestiones. El portavoz del PP, Miguel Tellado, le preguntará si “mantiene su fe en el principio de igualdad ante la ley”, mientras que la diputada Cayetana Álvarez de Toledo le cuestionará si, al igual que ha asegurado el fiscal general, si “el Gobierno considera que el Tribunal Supremo actúa de forma predeterminada, vulnerando derechos fundamentales” .

De hecho, en los últimos días, el líder del PP ha dejado claro que el “ruido” de la política -en relación a la pugna con Vox- no le distrae de su objetivo. Feijóo ha rectificado y ahora no quiere entrar en una batalla con Santiago Abascal, escuchando al sector del partido que precisa que “su verdadero enemigo no es Vox, sino Pedro Sánchez”.

Tanto el Gobierno como el PP han preparado con esmero esta primera sesión de control. Ayer, Sánchez y Feijóo reunieron a sus diputados y senadores en el Congreso para marcar la estrategia a seguir. Todos fueron citados a la misma hora, y a escasos metros.

En su intervención, el líder popular arengó a sus diputados y a senadores a seguir trabajando por ser “el primer partido de España”. Les recordó su mayoría absoluta en el Senado, y también, su mayoría en el Congreso aun estando en la oposición. “Por primera vez en la historia democrática”, subrayó un Feijóo “optimista” según fuentes de la dirección. El líder de los populares no habló ni de Donald Trump ni de Vox, y se centró en desplegar un discurso “demoledor” contra el Ejecutivo, desvelando la ofensiva que utilizará hoy en la Cámara Baja.

Una política de contraste

Los reproches no serán la única baza del PP, que tras anunciar una cascada de medidas en materias como vivienda, aprovechará la ocasión para confrontar su plan con el de la ministra Isabel Rodríguez. La idea del PP marcar una política de contraste. “Queremos que se comparen los modelos”, señalan desde la dirección. “Nuestro plan de vivienda es el más ambicioso, porque ante un Gobierno con una agenda de escándalos, alguien tendrá que hacer propuestas y coger la iniciativa”, aseguro Feijóo, consciente de que la vivienda es una de las primeras preocupaciones de los españoles y todavía sigue siendo una “asignatura pendiente” del Ejecutivo.

Además, el Gobierno le hizo “un regalo” a menos de 24 horas de que se celebre esta sesión de control, escenificando un choque monumental por la decisión de Hacienda de imponer el pago del IRPF a aquellos que cobren el salario mínimo.

La reacción fue prácticamente inmediata en Génova, donde se frotaron las manos viendo la poca sintonía entre las vicepresidentas Yolanda Díaz, de Sumar, y María Jesús Montero, del PSOE. “El Gobierno enmendando al Gobierno”, ironizaban fuentes del equipo de Feijóo, sobre la iniciativa de Sumar para corregir a Hacienda. “El Gobierno que presume de escudo social hoy consume el sablazo letal a los más vulnerables”, escribió en sus redes sociales el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado.

De hecho, la ofensiva comenzó a última hora de la tarde de ayer, cuando el PP registró en el Congreso y en el Senado una proposición de ley para exigir al Gobierno que exima de tributación la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), para evitar que el Gobierno “haga caja a costa de los trabajadores”.