Andrés Calamaro, reconocido músico argentino, ha generado una nueva polémica durante su gira “Agenda 1999” al expresar públicamente su apoyo a la tauromaquia en un concierto en Cali, Colombia. Durante la interpretación de su canción Flaca en la Arena Cañaveralejo, antigua plaza de toros de la ciudad, Calamaro dedicó el tema a toreros y aficionados, criticando la reciente prohibición de las corridas de toros en el país.
La reacción del público fue inmediata, con abucheos y silbidos que llevaron al artista a abandonar temporalmente el escenario, exclamando: “Están cancelados y bloqueados, hasta nunca”. Posteriormente, Calamaro defendió su postura en redes sociales, calificando a los activistas antitaurinos de “nazi animalistas” y argumentando que la tauromaquia es una expresión cultural que merece respeto. En sus publicaciones, también criticó la hipocresía de quienes consumen productos animales mientras condenan las corridas de toros.
“Curiosamente los aficionados somos decentes y educados padres de familia que jamás maltratamos animales, pero los animalistas no saben hacer otra cosa que insultar y desear sangrientas consecuencias para quienes elegimos libremente qué hacer con nuestro tiempo”, ha escrito en su perfil de Instagram, en un post que cuenta con casi 10.000 ‘me gusta’. En el texto, junto a una estatua de un torero, el artista argentino continúa: “No soy torero ni asesino ni maltrato animales pero sí que como animales a diario. La gastronomía tampoco es maltrato perverso, advierto si es desapego de las nazi animalista”, señalaba, criticando la “hipocresía” de sus detractores.
Contra la “progresía”
Esta no es la primera vez que Calamaro se ve envuelto en controversias por sus opiniones. En 2010, expresó su desacuerdo con la prohibición de las corridas de toros en Cataluña durante una entrevista con el humorista Andreu Buenafuente, renunciando a su “progresía” en protesta por la medida. Además, ha manifestado su apoyo a figuras políticas como Javier Milei en Argentina y ha criticado duramente a activistas y artistas que defienden causas opuestas a las suyas.
El incidente en Cali ha reavivado el debate sobre la tauromaquia y la libertad de expresión en el ámbito artístico. Mientras algunos defienden el derecho de Calamaro a expresar sus opiniones, otros consideran que sus declaraciones son ofensivas y descontextualizadas. La Fundación Animal Libre ha condenado sus comentarios, calificándolos de “insensibles” y “despectivos” .
A pesar de la controversia, Calamaro continúa con su gira, que incluye presentaciones en otras ciudades de Latinoamérica y España. Sin embargo, el impacto de sus declaraciones en su imagen pública y en la recepción de sus conciertos es aún incierto.