Eva Victor: del humor viral a Cannes con ‘Sorry, Baby’

‘Sorry, Baby’, película dirigida por Eva Victor, triunfa en Cannes tras conquistar Sundance. Una película divertida y valiente que consolida a una nueva voz del cine independiente

Escena de la película 'Sorry, baby'

En un momento en el que el cine independiente busca nuevas voces auténticas, valientes y profundamente personales, ‘Sorry, Baby’, ópera prima de Eva Victor, se alza como una de las películas del año. Desde su triunfo en Sundance, donde ganó el prestigioso Waldo Salt Screenwriting Award, hasta su aclamado estreno europeo en la Quincena de Realizadores de Cannes, la cinta ha conquistado crítica y público por igual. Pero más allá del éxito, ‘Sorry, Baby’ es el reflejo de un viaje íntimo y transformador: el de una artista que supo reinventarse en medio del caos, encontrar belleza en la vulnerabilidad y, en el proceso, darle voz a lo que muchas mujeres han sentido, pero pocas veces han visto representado en pantalla.

Escena de la película ‘Sorry, baby’

De videos virales a cine de autor

Eva Victor se dio a conocer a finales de la década de 2010 con videos virales en Twitter. Satírica, filosa y con un agudo sentido del humor feminista, sus piezas parodiaban absurdos contemporáneos como el desfile del “Orgullo Hetero” en Boston, acumulando millones de visualizaciones. Al mismo tiempo, escribía para The Reductress, el medio satírico orientado a mujeres que se ha convertido en un referente generacional. En uno de sus titulares más célebres se leía: “‘Quiero tener hijos algún día’, dice el hombre que como mucho estará parado diciendo ‘Empuja, cariño’”.

Pero mientras su carrera como comediante florecía en Brooklyn, algo más se gestaba en silencio. La pandemia llegó como un paréntesis inesperado, uno que le permitió a Victor detenerse y reevaluar su camino. En vez de entregarse a la comedia ligera, se sumergió en el cine profundo y contemplativo: ‘In the Mood for Love’ de Wong Kar-wai, ‘Margaret’ de Kenneth Lonergan, películas que exploran emociones densas y estructuras narrativas libres. Fue en ese retiro forzado cuando decidió escribir su primer guion, aislada en una cabaña en Maine, enfrentando sus demonios en soledad.

Un debut como pocos: guionista, directora y protagonista

Lo que nació como un ejercicio terapéutico se convirtió en ‘Sorry, Baby’, un drama agridulce sobre la amistad, la pérdida y la resiliencia emocional. “Es una película sobre un evento traumático, sí, pero sobre todo es sobre lo que viene después”, explica Victor. “Es sobre el tiempo que compartimos con quienes nos ayudan a encontrar la alegría de nuevo”. La trama sigue a Agnes, una académica de Nueva Inglaterra que, tras una crisis personal, intenta reconstruirse mientras su entorno continúa avanzando sin ella. La cinta equilibra con sensibilidad los momentos dolorosos con situaciones cómicas y absurdas, especialmente al retratar la fricción entre la angustia íntima y la superficialidad del mundo moderno.

Victor no solo escribió y dirigió la película: también interpreta a Agnes. En pantalla comparte protagonismo con Naomi Ackie y Lucas Hedges, quienes se sumaron al proyecto atraídos por la honestidad de la autora. “Se sentía como algo vivido”, dijo Ackie. “Explorar una amistad tan arraigada desde el primer día fue un reto precioso”. Hedges añadió: “Me recordó a películas que amo, pero al mismo tiempo se sentía nueva, innovadora. Eva no intentaba imitar a nadie. Estaba siendo completamente honesta”.

Escena de la película ‘Sorry, baby’

La influencia de Barry Jenkins y el impulso de A24

Uno de los momentos clave en la realización de ‘Sorry, Baby’ fue la inesperada conexión de Victor con Barry Jenkins. El director de ‘Moonlight’, quien la seguía en redes sociales, se convirtió en mentor cuando ella le envió el guion por mensaje directo. “En una llamada, Barry me preguntó si dirigiría la película. Le dije que no sabía si tenía el talento. Nunca fui a una escuela de cine. Y él me dijo: ‘Tú ya estás dirigiendo con tus videos’”. Esa validación fue el impulso necesario. Victor luego acompañó a la realizadora Jane Schoenbrun en el rodaje de ‘I Saw the TV Glow’, otro título de A24, antes de lanzarse a su propia aventura cinematográfica.

Rodada en Ipswich, Massachusetts, durante 24 días, ‘Sorry, Baby’ es el resultado de una combinación poco habitual de instinto, valentía y formación autodidacta. Que una primera película logre tal impacto es raro; que lo haga sin ceder un ápice de personalidad es aún más admirable.

Cannes: la consagración de una voz nueva

Ser seleccionada para la Quinzaine des Réalisateurs en Cannes no es solo un honor: es una declaración. Este apartado del festival celebra visiones frescas y autorales, lejos del aparato comercial de la Sección Oficial. Para Victor, la proyección en Cannes representa la validación de un proceso profundamente personal y, al mismo tiempo, la apertura de una nueva etapa profesional. “Ir a Cannes significa entrar en una conversación global sobre el cine”, afirma. Y es cierto, es estar en la misma arena donde alguna vez debutaron los hermanos Dardenne, Céline Sciamma o Xavier Dolan. Es también enfrentarse a una audiencia exigente, diversa, internacional. Y ‘Sorry, Baby’ no solo ha sobrevivido a esa prueba: ha brillado.

La crítica ha elogiado su tono preciso, su equilibrio emocional, y sobre todo, la voz única de Victor como narradora. Lo que distingue a ‘Sorry, Baby’ no es solo su sensibilidad ni su guion agudo, sino la forma en que aborda el trauma desde el afecto. La película no se regodea en el dolor, sino que lo sitúa como parte del viaje hacia la alegría. “La comedia está en la amistad, y en reírse de los que son crueles o aburridamente groseros, no de los que queremos proteger”, dice Victor. En un mundo que exige respuestas rápidas y espectáculos llamativos, ‘Sorry, Baby’ apuesta por lo pequeño, lo sincero y lo íntimo. Victor, lejos de querer elegir un solo rol, se autodefine como “obsesionada con todos ellos”: escribir, dirigir, actuar. “Van a tener que arrancármelos de las manos frías y muertas si quieren quitarme uno”, bromea. Y en esa frase, hay tanto humor como verdad: Victor ha llegado para quedarse, y para hacerlo en sus propios términos.

Un futuro brillante

‘Sorry, Baby’ promete convertirse en una de las películas más comentadas del año, al estilo ‘La Sustancia’ el año pasado, aunque en otro género, pero, de nuevo, con una visión en femenino. Y mientras el mundo descubre la voz de Eva Victor, nosotras celebramos el coraje de una artista que entendió que sanar también puede ser un acto colectivo, y que contar historias honestas, aunque duelan, es una de las formas más bellas de resistencia. En una época donde las mujeres y personas no binarias aún luchan por espacios detrás de cámaras, Victor no solo abrió una puerta: la derribó con elegancia, humor y verdad. Y Cannes, el escenario por excelencia de la cinefilia global, es testigo de ello.

TAGS DE ESTA NOTICIA