En el corazón de la Sierra de Guadarrama, a apenas 20 kilómetros de Segovia capital, se esconde Sotosalbos, un pequeño municipio que resume con elegancia la esencia rural de Castilla y León. Con poco más de un centenar de habitantes, este pueblo de piedra, silencio y sierra, ha sabido conservar intacto su encanto medieval, convirtiéndose en uno de los destinos más genuinos y menos transitados del territorio segoviano.
Un viaje al románico segoviano
El mayor tesoro de Sotosalbos es su iglesia románica, San Miguel Arcángel, una joya del siglo XII que destaca no solo por su belleza arquitectónica, sino por su excepcional estado de conservación. Su pórtico con arquerías, su portada con capiteles decorados y su sobria torre de espadaña hacen de esta iglesia un claro ejemplo del estilo románico rural castellano. Un paseo alrededor del templo, especialmente al atardecer, basta para comprender por qué ha sido declarada Bien de Interés Cultural.
Junto a la iglesia se alza la antigua casa del Escribano, otra muestra de arquitectura tradicional, con escudo nobiliario incluido. Las calles empedradas que la rodean invitan a recorrerlas sin prisa, descubriendo rincones donde el tiempo parece haberse detenido.

Naturaleza, silencio y Sierra de Guadarrama
Pero Sotosalbos no es solo arte. El pueblo se encuentra rodeado de un entorno natural privilegiado, a los pies del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. En sus alrededores, los campos de cereales, los prados y las zonas boscosas ofrecen una estampa cambiante según la estación: del blanco invernal al dorado veraniego, pasando por los intensos verdes de la primavera y los ocres del otoño.
Para los amantes del senderismo y la bicicleta, el término municipal ofrece varias rutas que discurren entre fresnedas, arroyos y antiguas cañadas. La Cañada Real Soriana Occidental, una de las vías pecuarias más importantes de la Península, atraviesa sus tierras, recordando el antiguo paso de rebaños trashumantes.
@luciacabezon Pueblos con encanto medievales Hoy visitaremos 📍Sotosalbo, un pequeño pueblo de la provincia de Segovia. 🌻 Destaca su arquitectura, su naturaleza, su paz y sobretodo su increíble iglesia románica. ¡Comparte con la persona con la que te gustaría visitar este mágico pueblo! #pueblosmedievales #segovia #españa #turismoespaña #turismorural #creadoradecontenido #viajes
Gastronomía con sabor a tradición
A pesar de su tamaño, Sotosalbos es también un lugar destacado para los que buscan buena mesa. Su cercanía a Segovia capital garantiza platos tradicionales bien elaborados: cordero lechal, judiones, sopas castellanas y embutidos de calidad. El restaurante El Portón de Javier, ubicado en una casona de piedra, es uno de los más recomendados de la zona, donde la cocina local se sirve con mimo en un entorno acogedor.
Un refugio de calma lejos del turismo masivo
Frente a otros destinos segovianos más conocidos como Pedraza, Sepúlveda o la Granja de San Ildefonso, Sotosalbos ha mantenido un perfil bajo, ajeno al turismo de masas. Y es precisamente esa discreción la que lo convierte en un lugar único. Aquí no hay aglomeraciones, ni tiendas de souvenirs, ni ruidos que interrumpan la paz. Solo el sonido del viento entre los chopos, el repicar de las campanas, y el murmullo del agua del arroyo Milanillos que atraviesa el pueblo.
Cómo llegar
Sotosalbos está bien comunicado por carretera. Desde Segovia capital se llega en menos de 30 minutos por la SG-V-6113. También se puede acceder desde Madrid en poco más de una hora, tomando la A-6 hasta La Granja y después la carretera local.
Visitar Sotosalbos es redescubrir la belleza de lo pequeño, lo auténtico y lo tranquilo. Un destino perfecto para quienes buscan conectar con la historia, la naturaleza y la calma del campo castellano. Porque a veces, lo más bello no es lo más famoso, sino aquello que permanece escondido, esperando ser encontrado.