El mundo de la moda despide hoy a Paul Costelloe, uno de los diseñadores irlandeses más influyentes de las últimas décadas y figura clave en la construcción del estilo inconfundible de Diana de Gales. El modisto falleció a los 80 años en Londres, acompañado de su familia, tras una breve enfermedad. La noticia fue confirmada por sus allegados, que destacaron que el creador permaneció activo hasta los últimos meses de su vida: en septiembre había presentado su colección Primavera-Verano 2026 en la Semana de la Moda de Londres.
Un talento que nació en una tienda familiar
Costelloe vino al mundo en Dublín en 1945, en el seno de una familia marcada por el oficio textil. Su padre, sastre especializado en impermeables, le transmitió desde niño la fascinación por la aguja, la tela y el diseño. En aquel pequeño negocio familiar, el joven Paul aprendió a cortar, a observar y, sobre todo, a concebir la moda como una forma de narrar identidades.
Ese interés lo llevó a París, donde estudió en la Chambre Syndicale y recibió su primera gran oportunidad en el taller de Jacques Esterel. Allí descubrió la disciplina de la alta costura y la importancia de un proceso creativo organizado y constante. Más tarde continuó su formación en Italia, trabajando en proyectos vinculados a grandes firmas como Marks & Spencer y La Rinascente, experiencias que ampliaron su visión del diseño industrial aplicado a la moda.
Su viaje profesional lo llevó también a Nueva York, donde colaboró con Anne Fogarty, reforzando esa mezcla tan característica de su sello: tradición sartorial y pragmatismo comercial.
El modisto que acompañó a Diana durante su transformación
El gran punto de inflexión de su carrera llegó en 1983, cuando comenzó a trabajar con Diana de Gales. Durante casi 15 años se convirtió en uno de sus diseñadores de confianza y en un consejero estético clave en el proceso de convertir a la princesa en un icono global.
Costelloe contribuyó a definir su imagen pública a través de cortes simples, colores vibrantes y siluetas pulidas, siempre pensadas para realzar la presencia de Diana sin renunciar a la funcionalidad. El vínculo entre ambos trascendió lo profesional y se consolidó en una amistad duradera. Para la industria, su colaboración fue una de las más influyentes de la moda británica de los años ochenta y noventa.
Desde 1984, y durante más de cuatro décadas, Costelloe desfiló de forma ininterrumpida en la London Fashion Week, convirtiéndose en una cita fija para periodistas especializados y compradores.
Una marca sólida y versátil
Mientras su reputación crecía, también lo hacía su firma. Paul Costelloe amplió su negocio con líneas de ropa femenina, masculina, infantil, accesorios de piel, gafas y artículos para el hogar. Además, desarrolló proyectos corporativos de gran visibilidad, diseñando uniformes para British Airways, Delta Airlines y el equipo olímpico irlandés. Su colaboración con la cadena Dunnes Stores ayudó a llevar su estética a un público más amplio en Irlanda.
Casado desde 1979 con Anne Cooper y padre de siete hijos, vivió entre Londres e Irlanda, no sin ciertos roces con su tierra natal: sus declaraciones sobre la supuesta falta de estilo de las mujeres irlandesas generaron polémica en su momento. Aun así, con los años reconciliaría su figura con el público de su país. El propio primer ministro irlandés lo despidió como “un referente que llevó la moda irlandesa al escenario internacional”.
Un legado marcado por la coherencia y la constancia
Costelloe nunca buscó los grandes golpes de efecto. Su trayectoria se caracterizó por la coherencia, la dedicación y una ética de trabajo férrea, rasgos que lo convirtieron en una presencia respetada y constante dentro del diseño europeo. Su muerte deja un vacío en una generación de creadores que apostaron por el oficio honesto y la solidez por encima del espectáculo.
Su legado, estrechamente ligado a la evolución estilística de Diana pero también al crecimiento de la moda irlandesa y británica, permanecerá como testimonio de una carrera construida con paciencia, visión y un compromiso absoluto con la artesanía.


