La extrema derecha se afianza en Europa. Su discurso, pese a sus variantes regionales, coincide en puntos clave como el rechazo a políticas feministas en pro de los valores tradicionales. No obstante, a pesar de sus bases ideológicas y las consideraciones de esta ideología como predominantemente masculina, algunas mujeres se encuentran a la cabeza de estos partidos, e incluso de sus gobiernos estatales o regionales. ¿Triunfa más la extrema derecha con una mujer al frente?
Italia: Giorgia Meloni
La italiana Giorgia Meloni es el mayor ejemplo en Europa. Romana, a sus 48 años es la presidenta del Gobierno italiano. Su camino político comenzó a los 15 años, cuando el asesinato del juez Paolo Borsellino despertó su afán de “construir un futuro diferente”. A sus 21 años ya era concejal por la Provincia de Roma, y a los 29 ya era diputada por Alianza Nacional. Fue la ministra más joven de la historia de Italia, asumiendo el cargo de ministra de juventud del gobierno de Berlusconi a sus 31 años, cargo que mantuvo hasta fundar su actual partido, Hermanos de Italia. Como lideresa de este ha sido elegida Presidenta del Partido de los conservadores y reformistas europeos (ECR) en 2020, y presidenta de Italia en 2022, siendo la primera mujer en alcanzar este puesto.

Actualmente es una líder fuerte que mantiene estrechas relaciones con sus homólogos europeos, al igual que con el presidente estadounidense Donald Trump, sirviéndose de nexo entre los 27 y el gigante americano y llegando a visitar Washington en plena crisis arancelaria para tratar de llegar a un entendimiento mutuo. También ha mostrado su apoyo incondicional a Ucrania en la guerra con Rusia, abogando por una construcción de paz en colaboración con otros líderes como Emmanuel Macron, Friedrich Merz o la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyden.
Estos últimos acontecimientos han mejorado la opinión pública hacia su mandato, para el que se estima un 27,7% de votos, un 1,7% más que en las elecciones de 2022, frenando ligeramente el descontento inicial del pueblo italiano.
En Francia, Marine Le Pen
La francesa Marine le Pen tuvo su primer acercamiento político en 1998 como parte del departamento jurídico del partido Frente Nacional (actual Rassemblement national), fundado por su padre, Jean-Marie Le Pen. Fue ahí cuando surgió su vocación política, presentándose a la candidatura de la consejería regional de Nord-Pas-de-Calais. Sus responsabilidades dentro del partido fueron aumentando, tomando en 2011 el control del partido, presentándose a las elecciones presidenciales de 2012 y 2017, llegando a la segunda vuelta en estas últimas, siendo superada por Emmanuel Macron. En 2022, llegó también a la segunda vuelta, en las que su 41,5% de votos no fue suficiente para superar al de Amiens.

Actualmente, a pesar de ser la lideresa de RN, desde el 31 de marzo se encuentra inhabilitada por los próximos cinco años causa de un delito de malversación de fondos públicos, además del pago a una multa de 100.000 euros y a cuatro años de prisión. La de Neuilly defiende su inocencia ante la revelación de estos hechos y su consecuente condena, que le impedirá presentarse a unas elecciones presidenciales de 2027 en las que se vaticinaba como ganadora, principalmente por sus discursos nacionalistas y anti-inmigración.
Alemania, Alice Weidel
Por último, Alice Weidel es la actual lideresa del partido ultra alemán AfD (Alternativa para Alemania), junto a los que consiguió el pasado 23 de febrero el mejor resultado de un partido de extrema derecha alemán desde el nazismo. Consiguieron un 20,8% de los votos en las elecciones federales alemanas para el Bundestag, superando los diez millones de votantes.

Diputada desde 2017 y admiradora de Margaret Thatcher, aboga por un euroescepticismo basado en la salida de Alemania de la Eurozona y, de seguir en ella estados económicamente débiles, también de la UE. Rechaza la ideología de género, la cual considera “anticonstitucional, ya que quiere abolir la familia tradicional como modelo de vida y modelo a seguir”, y las políticas migratorias tomadas por la anterior canciller Angela Merkel, mostrando una clara postura anti-inmigración, especialmente musulmana.
Unida civilmente con una mujer de ascendencia cingalesa, madre adoptiva de dos hijas y acusada de contratar irregularmente a una demandante de asilo siria para su domicilio, ha sido objeto de críticas por sus contradicciones, las cuales ha utilizado para tratar de fortalecer su imagen.
En Finlandia, Riika Purra
Otras figuras femeninas importantes de la extrema derecha europea son la vicepresidenta primera de Finlandia, Riikka Purra, líder del partido ultra Verdaderos Finlandeses, segunda fuerza política con un 15,1% de los votos en las elecciones parlamentarias de 2023, que en la actualidad gobierna en coalición en Finlandia.

Nacionalista y contraria a la inmigración, ha tenido que pedir perdón recientemente por unos comentarios racistas y violentos. Con todo, sigue al frente de la cartera de Hacienda.