La salida de María Corina Machado de Venezuela no fue un viaje diplomático ni una operación oficial de Estado. Fue una extracción de alto riesgo, planificada contrarreloj y ejecutada en condiciones extremas por Grey Bull Rescue Foundation, una organización privada especializada en rescates complejos.
Durante más de quince horas, la líder opositora venezolana atravesó el Caribe en plena noche, con el mar embravecido y bajo una amenaza constante, hasta lograr abandonar el país y poner rumbo a Noruega.

La operación, confirmada por el entorno de María Corina Machado, ha situado a Grey Bull Rescue en el foco internacional. No solo por la dificultad técnica del rescate, sino por el perfil de la persona extraída. Hablamos de una figura política con enorme visibilidad, perseguida por el régimen de Nicolás Maduro y convertida en símbolo de la oposición venezolana.
Una operación extrema en mar abierto planificada en días
Según explicó en CBS News Bryan Stern, veterano de las fuerzas especiales estadounidenses y fundador de Grey Bull Rescue, la mayor parte del operativo se desarrolló en el mar. Fueron entre 15 y 16 horas de travesía en condiciones muy duras, aprovechando precisamente el mal tiempo como aliado. El oleaje elevado y la escasa visibilidad dificultaban la detección por radar, algo clave para una misión clandestina.

Stern reconoció que nadie a bordo estaba tranquilo. La tensión fue constante durante toda la operación. Especialmente, en el momento más delicado: cuando María Corina Machado abandonó suelo venezolano y subió a la embarcación. Ese instante, explicó, es siempre el más peligroso en cualquier rescate de este tipo.
“She’s the first Nobel Prize winner that we’ve ever rescued.”
An American private rescue team took 15 to 16 hours to get Venezuelan opposition leader María Corina Machado out of her country and safely on her way to Norway to collect her Nobel Peace Prize, and to be reunited with… pic.twitter.com/MxBOEK79Pj
— CBS News (@CBSNews) December 12, 2025
Aunque Grey Bull Rescue llevaba meses preparando escenarios de actuación en Venezuela, la operación concreta para sacar a María Corina Machado se organizó en apenas cuatro días. En ella participaron de forma directa unas dos docenas de personas, además de una red más amplia de colaboradores que aportaron inteligencia, traducción, apoyo logístico y análisis de riesgos.

Stern fue claro al subrayar que Grey Bull Rescue se encargó exclusivamente de la fase terrestre y marítima de la extracción. Una vez alcanzado un punto seguro, María Corina Machado pudo tomar un vuelo hacia Oslo, donde se reunió con su familia tras casi dos años separada de sus hijos.
El perfil de María Corina Machado elevó el riesgo
No se trataba de una evacuación anónima. María Corina Machado es una figura reconocida dentro y fuera de Venezuela, con carteles, protestas a su favor y una enorme presión mediática. Según Stern, nunca antes Grey Bull Rescue había rescatado a alguien con un perfil tan alto. Y mucho menos a una persona galardonada con el Premio Nobel de la Paz.
Ese nivel de exposición multiplicó los riesgos. Más aún en un contexto de creciente tensión entre Estados Unidos y el régimen de Maduro. Stern evitó ofrecer detalles sobre la fase terrestre para no poner en peligro futuras operaciones ni a las personas que colaboraron sobre el terreno.

Uno de los aspectos más subrayados por Grey Bull Rescue es que la operación no fue financiada por el Gobierno de Estados Unidos. Stern aseguró que el rescate se sostuvo gracias a varios donantes privados y que, al menos según su conocimiento, no hubo aportaciones de fondos públicos.
Sí reconoció una colaboración “no oficial” con el ejército estadounidense, centrada únicamente en coordinar posiciones y evitar incidentes fortuitos. Pero fue tajante al desmentir cualquier vínculo contractual con Donald Trump o con la Administración estadounidense para esta misión concreta.
El encuentro en alta mar y una noche interminable
El propio Stern recibió a María Corina Machado en una embarcación en el Caribe, en un punto cuya localización exacta no ha sido revelada. La travesía posterior duró entre 13 y 14 horas, en plena noche, sin luces y con un mar especialmente hostil.
Cuando ella subió a bordo, el equipo de Grey Bull Rescue ya estaba completamente empapado. Machado también llegó exhausta, mojada y con frío, tras un recorrido largo y físicamente exigente. Aun así, según Stern, se mostró serena, emocionada y profundamente agradecida.

El viaje terminó con retraso y María Corina Machado no pudo asistir en persona a la ceremonia del Nobel en Oslo. Para Stern, eso fue secundario. Desde su punto de vista, lo importante era preservar la vida de la líder opositora, no cumplir un horario.
Durante las horas compartidas en el mar, hablaron de política, de Venezuela y, sobre todo, de sus hijos. Stern confesó que estuvo a punto de romper a llorar al escucharla hablar de la emoción de volver a verlos después de dos años.
¿Volver a Venezuela?
Pese al éxito de la operación de Grey Bull Rescue, el futuro de María Corina Machado sigue marcado por la incertidumbre. Ella ha expresado su intención de regresar a Venezuela. Una decisión que Stern le desaconsejó de forma directa y contundente.
Grey Bull Rescue, explicó, solo realiza operaciones de extracción, no infiltraciones. Si Machado decide volver, será una elección personal. Stern, aun así, la definió como una figura inspiradora. Una “dama de hierro” cuya determinación, aseguró, explica tanto su liderazgo como el peligro que sigue corriendo.

