Opinión

Sin querer

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En el día de ayer, antes de que diera comienzo la sesión de control al Gobierno, la portavoz en el Congreso de los Diputados de Junts, la señora Miriam Nogueras, manifestaba en una entrevista en un conocido canal de televisión que ellos no aceptan el argumento sobre que la responsabilidad de la política del Estado recaiga en sus espaldas.

En su argumentación aludía a que ellos únicamente defienden los intereses de Cataluña y que, para los acuerdos de Estado, es a otros partidos de la bancada a los que tienen que apuntar. La coherencia de sus declaraciones era aplastante, puesto que si alguien está siendo coherente con sus demandas y sus negociaciones es Junts, aunque eso nos ponga al resto de españoles es una situación de desigualdad.

No queda la más mínima duda sobre el hecho de que este grupo político es el que mayor tajada le está sacando a esta legislatura.

Lo rocambolesco de la situación es que apenas unos minutos después en la sesión de control al Gobierno, cuando la portavoz hacía el uso de la palabra en su pregunta al presidente, sin querer, habló en nombre de muchos españoles.

Seguramente esta afirmación no será del todo del agrado de la señora Nogueras, pero no hay más que escuchar su argumentación para pensar que habla en nombre de muchos.

La cara del presidente durante su intervención se mantenía seria, pendiente del pinganillo para comprobar que la interpretación decía lo que decía, y que socio de gobierno le estaba afeando un sinfín de políticas.

En sus palabras se recogía la crítica a las habituales cortinas de humo comunicativas del gobierno. Cortinas que pretenden que la población se distraiga en asuntos menos relevantes para ocultar el desgobierno que padecemos ante los problemas reales del país –para ella Cataluña, para el resto de los españoles, los de España-.

Queda claro que sin querer la portavoz evidenció que los problemas de los catalanes no son diferentes a los del resto del país, por lo que la diferencia no existe. Los autónomos son igual de maltratados en todas las comunidades españolas, también en Cataluña y así lo defendió durante su argumentación.

También se plantea un problema común del que todos hablan y sacan bandera, la vivienda. Tanto los jóvenes como los no tan jóvenes, sean de donde sean del territorio español, tienen muy difícil acceder a una vivienda. Al respecto, la portavoz aludía a las incoherencias del ejecutivo, planteando que no se puede argumentar que una vivienda es un hogar, a la vez que argumentan que una habitación también lo es.

La solución no es quitarle la vivienda al privado, o utilizar consignas populistas que queden bien. Desde hace muchísimos años existe un déficit alarmante de vivienda pública que nadie quiere asumir, se prometen miles de viviendas durante las campañas electorales y después simplemente se cambia de opinión.

La señora Nogueras habló por muchos españoles diciéndole en la cara lo hipócrita de la utilización del conflicto en Palestina, el pago a costa de todos los españoles del gasto de los miembros de la Flotilla… Mientras, se castiga con subidas y más subidas en cuotas a los que generan riqueza y hacen que el país se mueva.

En el mundo lamentablemente se están dando diferentes conflictos bélicos, muchos de ellos por motivos de raza y religión, pero el Gobierno solo habla de algunos, como si las muertes de los niños y la población civil no fuesen igual de reprochables independientemente del lugar del que procedan.

Una sesión de control en la que cada vez hay menos política y más guerra. Una sesión de control la de ayer, en la que la portavoz de Junts, sin querer, habló en nombre de muchos.