Es común escuchar por parte de un recién llegado al equipo de Zarzuela que no imaginaba cuánto se trabaja en la Casa. Hay un dato relevante que aporta la Institución dentro del desglose de actos que ha enviado a los medios para hacer balance de año: los miembros de la Familia Real han realizado 240 audiencias, de las que 146 tuvieron cobertura de prensa. Lo que significa que 94 no trascendieron públicamente.
La Monarquía ha establecido unas líneas muy claras de actuación para, no sobrevivir, sino asentarse en la sociedad española con aceptación y valoración por parte de los españoles. Priorizar la Institución es clave y, con ello, la motivación. Y ahí el tándem Felipe VI y Leonor es uno de los pilares. La heredera ha recibido por parte de su padre las enseñanzas de que servir a España y anteponer el deber debe estar interiorizado como forma de vida.
La heredera así lo ha aprendido y lo quiere hacer. Le gusta su papel y los retos que le suponen. Apenas cuatro meses después de ingresar en la Academia de San Javier, la Princesa ha conseguido hacer la suelta, como se llama coloquialmente a volar en solitario sin instructor. Convirtiéndose así en la primera heredera mujer en conseguirlo. No todos los alumnos lo consiguen, pero ella siempre ha transmitido su intención de asumir el riesgo.
Una mayor proyección institucional
Leonor es un activo, conecta con su generación, y cada vez tiene una mayor proyección institucional. En julio de este año terminará su formación en el Ejército del Aire, completando así su formación castrense. Después, ingresará en la universidad, con una carrera aún por determinar. El peso institucional que adquiere la primogénita se trasluce en la enjundia que adquieren sus discursos. El último que pronunció en los Premios Princesa de Asturias significó un antes y un después, ya que hasta la fecha el enfoque había sido más social, y no tan político. La manera en que Don Felipe la tiene presente en sus mensajes indica el auge sucesivo de la Princesa.
Relación con el Gobierno
Con la crispación política que asola el mapa de España, los casos de corrupción en el Gobierno y la palpable tensión en el ámbito político la Corona busca la mayor estabilidad posible. Las coyunturas de este año que se despide han marcado tensiones entre el Ejecutivo y la Corona, que ambas instituciones han conseguido normalizar. La catástrofe de la Dana generó una serie de desavenencias que partieron de la diferencia entre la reacción de los Reyes y la del presidente del Gobierno tras los altercados de los vecinos de Paiporta. A día de hoy, las relaciones fluyen correctamente, y ambas instituciones cooperan en la programación de la agenda, tanto interior como exterior.
La sombra del Rey Juan Carlos
El otro capítulo complicado de gestionar para la Corona ha sido la publicación de las memorias del Rey Juan Carlos, tituladas Reconciliación. Un texto que Don Felipe ha tratado con especial ojo para no generar la controversia que los partidos secesionistas y republicanos buscaban. La Casa no ha entrado a valorar el contenido, sólo ha reaccionado tras el polémico vídeo en el que el padre de Felipe VI solicitaba a la sociedad que apoyara el reinado de su hijo.
No obstante, Felipe VI no es ajeno a la importancia que tiene para la Corona que no quede en el olvido el papel que gestó para la instauración de la democracia, en lo que el Rey Juan Carlos tuvo un papel fundamental. Apelar al espíritu de la Transición y llamar a la clase política y ciudadana a buscar el bien común frente a los intereses partidistas es su prioridad en estos momentos de discordia.
El balance de año
Zarzuela ha proporcionado a los medios un balance de la actividad institucional de la Familia Real. En concreto, aseguran, los miembros han realizado 240 audiencias, a las que han concurrido más de 2.000 personas. De estas audiencias,146 tuvieron cobertura de prensa.
En cuanto a las actividades, la Casa arroja que los miembros de la Familia Real han realizado un total de 455, tanto en España como en el extranjero. Los ámbitos más significativos han sido los relacionados con las Instituciones (20%), Relaciones Internacionales (20%), Cultura (13%), Solidaridad (12%) y Defensa (11%). Ámbitos que representan el 75% del total. En cuanto a la proyección internacional, en el extranjero, la Familia Real desarrolló 104 actividades, para lo cual se han realizado 25 viajes a 19 países diferentes (Alemania, Austria, Bélgica, Cabo Verde, Ciudad del Vaticano, Eslovaquia, EE.UU Francia, Italia, Perú, Polonia, Portugal, Reino Unido, República Árabe de Egipto, República Dominica, República Popular China, Rumania, Suiza y Uruguay).