El verano no solo trae consigo sol, playas y vacaciones. También cuenta con un incremento significativo en los hurtos en comercios. Según datos recientes, esta época del año concentra el 26% del total de robos anuales en España. Las pérdidas estimadas son de 482 millones de euros para las empresas, principal del sector retail. Entre ellos, destaca el producto más robado en verano. Y no, no es la cerveza u otro tipo de bebida alcohólica.
Este es el producto más robado en verano de nuestro país

El producto que más se roba de los estantes de las tiendas en época estival es la crema solar, así como los bronceadores. Los factores principales son obvios: su alta demanda y el elevado coste que tienen, que parece cada vez mayor. Especialmente, en las costas mediterráneas del este y sur de España, es donde se dan más hurtos de los protectores para la piel de los rayos solares.
Le siguen muy de cerca en la lista las bebidas alcohólicas en general. Curiosamente, es en el norte de nuestro país donde más sustracciones se producen de estos objetos. Los datos señalan que, especialmente, se roban vinos y licores de alta gama en País Vasco, Galicia y Cataluña.
Y cierra el podio el aceite. Es bien sabido que el precio de este oro líquido se ha disparado en los últimos años. Como imprescindible en la cocina de nuestro país, muchos ladrones deciden apropiarse de él. Destacan entre los sitios donde se dan más robos de este preciado bien en Madrid y Extremadura, según datos.
Completan el top principal los productos antimosquitos, las gafas de sol y los preservativos. Son productos pequeños, de baja protección, y los dos últimos se roban especialmente en las islas. Al ser de gran interés para los visitantes, los criminales buscan sacarles el máximo partido. Los repelentes de mosquitos, por su mayor abundancia en el interior, se sustraen más en comunidades como Castilla-La Mancha.
¿Por qué se producen más robos en esta estación del año?
El 55% de los hurtos son cometidos por bandas organizadas que revenden los productos en mercados ilegales, o bien de segunda mano. Además, casi la mitad de los ladrones tienen menos de 30 años, y la gran mayoría son reincidentes, con más de 3 robos al año, dicen las estadísticas.
Estos delincuentes aprovechan la saturación de los negocios y la afluencia turística para actuar rápidamente y sin ser detectados. De ahí que el robo se vea más favorecido en la estación del verano. Aunque supone el 0,74% de lo que facturan las empresas de distribución en este país, los perjuicios son muy importantes. Especialmente, para el pequeño comerciante, que cuenta con un menor margen de pérdida.
El hurto en verano es un problema grave que afecta especialmente a productos estacionales de alto valor. Las cremas solares y las bebidas alcohólicas siguen siendo los artículos más robados, con un impacto millonario para el comercio. A pesar de un ligero descenso de estos del 3,5% en 2024, la tendencia es al alza en los próximos años, según diversos analistas.
Mientras las grandes superficies pueden seguir investigando e invirtiendo en medidas de seguridad que tomar, el pequeño comerciante podría seguir relativamente indefenso ante las sustracciones en los próximos años.