El ex guardia civil César Arribas Calvo ha sido declarado culpable del asesinato con premeditación de su expareja, Teresa Rodríguez Llamazares, como consta en el fallo leído este jueves por el jurado popular del Tribunal Penal de Bruselas.
Los hechos se remontan a la mañana del 27 de octubre de 2022, cuando el agresor subió al apartamento de la joven en Bruselas con la excusa de buscar unos carnets olvidados días antes y asestó a la víctima, de 23 años, más de 150 puñaladas hasta causarle la muerte.
El jurado, compuesto por ocho hombres y cuatro mujeres, comenzó su deliberación poco antes de las 11.00 horas de este jueves, tras escuchar las réplicas finales de las partes y al asesino confeso, quien ha leído una carta dirigida a la familia de la víctima en la que expresa su arrepentimiento.
El veredicto ha sido pronunciado pasadas las 16.00 horas en la Sala Solemne del Tribunal de Justicia de Bruselas, ante las tres magistradas que componen el Tribunal Penal, el acusado y los padres de la víctima.
El jurado deberá ahora retirarse de nuevo para decidir la condena que se debe aplicar al asesino confeso de la enfermera vallisoletana. El fallo, ante el que no cabe recurso pero sí apelación ante la Corte de Casación, llega tres años después de que se cometiera el crimen.
La jueza que preside el Tribunal ha procedido a la lectura del veredicto que considera culpable a Arribas Calvo de asesinato voluntario y con premeditación y de portar objetos punzantes con intención de usarlos como armas para dañar a una persona.
En la motivación del veredicto, el jurado deja claro que “considera que (el acusado) era plenamente consciente” de lo que estaba realizando e identifica el “agravante” de la premeditación y que cogiera de la cocina de la víctima dos cuchillos distintos para perpetrar el crimen.
La sala volverá a reunirse el viernes a partir de las 09.00 horas para que las partes expongan sus argumentos respecto a las penas que le deben ser aplicadas y el jurado deberá después decidir. El código penal de Bélgica prevé hasta cadena perpetua para el delito de asesinato con premeditación, aunque es una condena máxima que en la actualidad los tribunales no aplican.
Tres años del crimen
El entonces guardia civil en prácticas –expulsado ya del cuerpo– viajó días antes del crimen a Bruselas, en donde residía y trabajaba como enfermera Teresa Rodríguez, con la intención de “recuperar” la relación, según dijo el propio Arribas Calvo durante el proceso judicial.
Los primeros días se alojó en casa de la víctima, pese a haberle expresado ella su “incomodidad”, pero la noche previa al asesinato se trasladó a un albergue cercano. Esa tarde, ya desde el albergue, Arribas Calvo escribió una carta de arrepentimiento “por lo que iba a hacer” -que nunca llegó a enviar- y realizó varias búsquedas en Internet sobre cómo matar a una persona.
Tras el crimen, el agresor se precipitó por la ventana del apartamento en un quinto piso de un edificio del centro de Bruselas, en un intento –según su testimonio– de quitarse la vida, aunque no ha aclarado durante el juicio por qué si la intención era el suicidio intentó subir por la fachada hacia la azotea.
Si algo de lo que has leído te ha removido o sospechas que alguien de tu entorno puede estar en una relación de violencia puedes llamar al 016, el teléfono que atiende a las víctimas de todas las violencias machistas. Es gratuito, accesible para personas con discapacidad auditiva o de habla y atiende en 53 idiomas. No deja rastro en la factura, pero debes borrar la llamada del terminal telefónico. También puedes ponerte en contacto a través del correo o por WhatsApp en el número 600 000 016. No estás sola.