Los ‘agujeros negros’ de las pulseras tras las explicaciones de Igualdad

No existen cifras sobre cuántas absoluciones se han producido debido a los fallos en el sistema de control

La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza, a su llegada antes de comparecer ante el Congreso de los Diputados este jueves.
EFE/ J.J. Guillén

Se sabe que hay maltratadores que han quedado en libertad tras violar una orden de alejamiento porque no hubo manera de demostrar el quebrantamiento al desaparecer el rastro de información que debían dejar las pulseras telemáticas que portan los agresores. Lo que no se sabe es en cuántas ocasiones se han producido sobreseimientos de este estilo, a pesar de que el problema forma parte de la agenda pública desde hace varios días y a pesar de que la delegada del Gobierno para la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza, compareció ayer en el Congreso para dar explicaciones.

“He pedido esa información a la Fiscalía y al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ ) pero no la puedo ofrecer porque no la tengo. No conozco los sobreseimientos que ha habido, pero sí que sé que se pueden reabrir estos casos cuando se recupera la información”, explicó Martínez Perza, atribuyendo así a instancias judiciales el agujero negro que hay a este respecto.

Artículo14 publicó recientemente el testimonio de una víctima de violencia de género que escribió una carta a Igualdad en estos términos: “Soy VVG (víctima de violencia de género), mi problema es con la pulsera de mi agresor, es guardia civil, cuando pongo las denuncias, se abre protocolo 0, la policía judicial siempre instruye mal funcionamiento de la pulsera, que tiene saltos que no coinciden ni en espacio ni tiempo, cuando lo he tenido detrás de mi en un coche, pasando por delante de mi casa, o reiteradas veces entra en zona de exclusión. Todos estos quebrantamientos se archivan cuando llegan al juzgado”.

Un problema sin dimensionar

De nada sirvió la insistencia, por ejemplo, del diputado del PNV Joseba Andoni Agirretxea para que la delegada aclarara este punto porque Igualdad no tiene constancia de la dimensión de las absoluciones que han ocurrido. “Afectaron a procesos de quebrantamiento ya sucedidos, no a la seguridad de las mujeres, no a agresiones o delitos de violencia. Por otra parte, el informe técnico de Cometa no es el único medio de prueba, están las testificales, el atestado, la declaración de la víctima…”, insistió en su cerrada defensa del sistema.

La delegada, en todo caso, subrayó que nadie puede estar en condiciones de asegurar que no vuelvan a producirse problemas. “No son errores, son incidencias y van a seguir sucediendo porque hablamos de tecnología y puede ocurrir”, dijo.

Durante su comparecencia, varios diputados criticaron a Igualdad por no haber dado publicidad a los fallos de las pulseras en su momento para buscar una solución a partir de compartir la información con transferencia. Pero la delegada se limitó a reconocer únicamente que las incidencias se produjeron en la transición (de una adjudicataria del servicio a otra). “La verdad es que fue una transición dura y difícil“, afirmó.

La relación con las empresas

¿Se va a penalizar a las adjudicatarias por estos fallos? “La penalización está siempre ahí“, dijo de forma inconcreta, sin anticipar expediente alguno en este sentido y subrayando que “la incidencia conocida de datos quedó resuelta en diciembre de 2024”. “Respondemos auditando a las empresas. Tenemos la respuesta cuando se producen las incidencias, que es lo principal”, añadió sin entrar en detalles de las auditorías que Igualdad ha practicado a las telecos que han operado este servicio.

La delegada del Gobierno para la Violencia de Género también se pronunció sobre las advertencias públicas que han realizado instancias como las audiencias provinciales. Y en este punto las minimizó. “No hacemos oídos sordos a las quejas de los juzgados. He recibido algunos, muy pocos, escritos de órganos judiciales con algunas quejas con algunas situaciones puntuales. En esos escritos se ha abierto una investigación con Cometa”, zanjó.

Del próximo contrato que saldrá a concurso público para renovar el servicio tampoco dio detalles ni sobre el volumen, ni sobre los requerimientos. “Estamos trabajando en ello”, se limitó a decir.

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