El deporte es el gran entretenimiento de nuestra era y lo lleva siendo desde épocas pretéritas, pero si hay algo que si que ha aumentado en tiempos relativamente recientes, es el protagonismo de la mujer. Porque sí, las mujeres llevan tomando parte de las grandes competiciones deportivas muy poco tiempo, por ejemplo en los Juegos Olímpicos, donde hasta París 1900 (los segundos de la era moderna) no tomaron parte, aunque de forma aislada. Pero poco a poco se han ido haciendo un hueco en la escena deportiva y aunque aún hay disciplinas que tienen un potencial infinito, la realidad es que su participación está asentada.
Tanto lo está que se han creado algunos iconos deportivos que traspasan a los hombres y están en el olimpo de los más grandes que jamás han competido. Es muy complicado extraer una lista de las mejores deportistas de la historia, algo siempre difuso por la diferencia propia entre deportes y eras, pero esto es simplemente una muestra del crecimiento y sobre todo del potencial que tiene el deporte femenino en el mundo.
Las 10 mejores deportistas de la historia
Serena Williams
El tenis es, junto a la gimnasia, el deporte que más iconos femeninos ha creado, pero quizá el más dominante es el de la jugadora norteamericana. De muy pocos deportistas se puede decir que cambiaron su deporte, pero ella es una. Williams llevó el tenis femenino al siguiente nivel, con una potencia y una fuerza física que superaba la de muchos hombres y por su precodidad y a la vez por lo que alargó su carrera, le permitió mandar durante mucho tiempo. Ha ganado un total de 23 títulos de Grand Slam individuales, y aunque Margaret Court tiene 24, nadie se acerca a ella en la ‘era Open’ (a partir de 1968).

Simone Biles
En la gimnasia artística hay nombres que durante años fueron los que comandaban las listas de mejores deportistas de la historia, como Nadia Comaneci por su históricos JJOO de 1976 o Larisa Latynina y su récord de 18 medallas olímpicas del que hablaremos más adelante, pero la llegada de Simone Biles lo cambió todo. Tiene 11 medallas olímpicas, 7 de oro, 2 platas y 2 bronces, pero la realidad es que es mucho más que una gimnasta, pues quizá su mayor obra es volver a ser ella. Tras tener que abandonar los JJOO de Tokio por problemas de salud mental, cuando estaba en su mejor momento, supo volver, y eso la convirtió, aún más en un icono.
Aitana Bonmatí
Quizá poner en esta lista a Aitana Bonmatí sea algo presuntuoso, pero en esta época en la que el fútbol femenino está creciendo tanto, se está ganando a pulso llegar a ser la mejor de la historia del deporte rey. Tres balones de oro, un mundial y un subcampeonato europeo, más la multitud de títulos con el FC Barcelona. Junto a ella, que apenas tiene 27 años, Alexia Putellas abrió el camino, pero las lesiones privaron de que fuera la de Mollet del Vallés la que tomara el mando que Bonmatí supo recoger y aún comanda.

Yelena Isinbayeba
El salto con pértiga está tomando una nueva dimensión gracias a Mondo Duplantis, quien lleva años compitiendo contra sí mismo y sus récords, pero lo del sueco no es más que una reedición de algo que ya se vio en su deporte hace unos años. Y es que una Isinbayeba rompió todos los registros habidos y por haber, poniendo plusmarcas que ahora mismo son sueños para el resto de atletas. Los 5,06 metros que estableció como récord del mundo en 2009 están 24 centímetros por encima de su primera plusmarca en 2003. Con ese salto, del que ahora han pasado 22 años, hubiera sido medalla de bronce en el Mundial de Tokio 2025, donde el oro estuvo en 4,90, 16 centímetros menos que su récord.
Laia Sanz
En el mundo del motor es complicado encontrar a una mujer que haya sido tan dominante como la española Laia Sanz. Sanz ha sido capaz de dominar como nadie las dos ruedas, ganando 14 veces el mundial de trial y seis el de enduro. No obstante, quizá su gran hito llegó en el Rally Dakar. En la prueba más dura del mundo consiguió un maravilloso 9º puesto, el mejor que jamás ha conseguido una fémina, además de pelear por ganar varias etapas. Luego se pasó a los coches, donde pese a sus grandes resultados no está en la cima de las mujeres, pues Jutta Kleinschmidt ganó la edición de 2001.

Katie Ledecky
Pese a ser la natación un deporte precoz, decir de alguien que es una de los más grandes la historia, más allá de géneros, a sus 28 años, es decir mucho. Pero con Katie Ledecky es posible. En su palmarés, además de infinitos récords del mundo, aparecen 14 medallas olímpicas, 9 de ellas de oro, la primera en Londres 2012, cuando apenas contaba con 15 años. Por eso mismo es la más grande, porque aunque con el paso de los años le han salido rivales a la altura o que incluso la han superado, siempre ha mantenido un nivel excelso, siendo una buena muestra de sus dos oros en París 2024.
Diana Taurasi
La mejor jugadora de la historia del baloncesto se retiró este mismo año, en febrero, y tras de sí dejó atrás un legado de dominio que trascendió su deporte. Tres veces campeona de la WNBA, seis veces de la Euroliga, seis medallas de oro olímpicas y un sinfín de reconocimientos individuales como MVPs y récords de anotación. No ha habido otra como ella, además de que consiguió hacerse un hueco en el siempre complicado ecosistema deportivo ‘yankee’, llevando la liga a otro nivel.

Allyson Felix
Allyson Felix entra en esta lista por haber sido la velocista con más medallas de siempre, aunque en la historia no se puede obviar a la recién retirada Shelly-Ann Fraser-Pryce. En el caso de Feliz destaca que nsupo aguantar en una disciplina tan física como esta durante casi dos décadas, ganando medallas en todo momento. En total 11 preseas en 5 participaciones olímpicas, lo que la colocan como una de las más grandes de todos los tiempos, además de que su polivalencia era tal, que desde los 100 hasta los 400 metros sacó gran rendimiento, más allá de los 200, su prueba fetiche.

Larisa Latynina
Ya hemos hablado largo y tendido de Simone Biles, pero en el pasado de la gimnasia hay un nombre que marcó un antes y un después en lo que a dominar un deporte se refiere. Larisa Latynina, de la URSS, logró 18 medallas olímpicas entre 1956 y 1964, tres ediciones olímpicas en las que sumó 9 oros, 5 platas y 4 bronces, para llegar a ser lo que es hoy en día, la mujer más laureada de los JJOO, aunque igualada a oros con la mencionada Katie Ledecky.
Mireya Luis
La mejor jugadora de la historia del voleibol de forma casi unánime tiene en su haber tres medallas de oro olímpicas y dos mundiales, además de forma ininterrumpida entre 1992 y el 2000, cuando llevó al equipo de Cuba a marcar una era que aún se recuerda en el deporte latinoamericano. Era la líder del equipo y un portento físico como pocos se recuerdan, con una capacidad de salto que muy pocas veces se ha visto en su deporte, además de que la combina con una técnica excelsa parea el remate, como muestran sus cinco galardones de mejor atacante mundial, así como sus tres MVPs en mundiales.