Poco más de un mes ha transcurrido desde que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) anunciara el fracaso de la Oferta Pública de Adquisición (OPA) que el BBVA había planteado sobre el Sabadell. El veredicto se reflejó entonces de inmediato en el mercado. De manera paradójica, las acciones del vasco, pese a no lograr su cometido en la operación, se apreciaron en torno al 7% en el día posterior al resultado. Desde entonces, ya acumula un alza al cierre de la sesión de ayer de casi el 15%. Pero eso no es todo. A la subida en Bolsa se suma ahora un plan de remuneración al accionista que la directora financiera de BBVA, Luisa Gómez, ha comunicado que la entidad pretende acelerar.
La situación en los parqués de los títulos de BBVA ha cambiado mucho desde su intento de hacerse con el vallesano. En las jornadas previas al desenlace de la OPA, la Bolsa estaba sobreponderando las acciones del Sabadell con el objetivo de generar una prima positiva respecto a la oferta del BBVA, con la intención de presionar al banco vasco para que revisara los términos de la operación.
La posibilidad de esta mejora, sumada a la probable necesidad de afrontar una ampliación de capital para financiar una segunda OPA -algo que finalmente nunca ocurrió, ya que el BBVA no logró alcanzar el 30% del capital del Sabadell-, actuaba como un freno para la subida de los títulos del propio BBVA.
Subidas del 20%
Una vez que estos condicionantes desaparecieron, las acciones del vasco despegaron en los parqués. La revalorización refleja la eliminación de los riesgos percibidos y la confianza renovada de los inversores en la estabilidad y capacidad de gestión del banco. Esta recuperación se tradujo en un notable repunte de los títulos de BBVA, que alcanzó máximos históricos el pasado 12 de noviembre, situándose en los 18,905 euros por acción. El alza supone un incremento aproximado del 20% desde los niveles previos.
‘Megarecompra’ de 6.000 millones
Por otro lado, el banco de inversión estadounidense Jefferies prevé que la entidad anuncie antes de final de año una ‘megarrecompra’ de acciones por 6.000 millones de euros. El movimiento será, a priori, positivo para el accionista. Al reducirse el número de títulos en circulación, cada participación restante representará una cuota mayor de la institución, por lo que tenderá a elevar el beneficio por acción. Y, por tanto, el valor del título.
La decisión se enmarca dentro del plan de reparto del exceso de capital entre los accionistas que el banco tiene. En este sentido, la directora financiera de BBVA recordó ayer en la conferencia anual para inversores organizada por JP Morgan que la intención de la firma es distribuir 36.000 millones de euros hasta 2028. Y añadió que la retribución se materializará “en cuestión de meses, no de años”.

En este contexto, Rafael Alonso, analista de Bankinter, destaca que “lo más importante en el caso del BBVA es que tiene excedente y unos riesgos y morosidad a la baja“. Lo que refuerza la confianza de los inversores en la compañía y la efectividad de las operaciones de retorno de capital.
Revisión al alza de los analistas
Así, en los últimos compases del presente ejercicio, las casas de análisis ya están ajustando su posición sobre el banco. Bankinter ha elevado su recomendación sobre el vasco a ‘comprar’, tras la última revisión de sus economistas. Alonso justifica que la entidad “ha sabido gestionar bien el impacto negativo de la bajada de tipos de interés”.
Los beneficios de BBVA muestran un crecimiento en un rango del 8-12% anual, incluso sin considerar el impacto negativo de las divisas. Esto configura un escenario atractivo, ya que se espera que el banco mantenga crecimientos de doble dígito durante los próximos tres años. Y estiman que generará más de 12.000 millones de euros al año.
Una banca de “récord”
Pero la coyuntura de BBVA no es única. La gran banca española se dirige hacia otro año récord de beneficios. Tanto es así que la consultora Accuracy ha estimado en un reciente informe que, en total, las entidades financieras del país repartirán 18.000 millones de euros entre sus accionistas hasta 2026.

En el escrito, que analiza a las principales firmas -Santander, BBVA, CaixaBank, Bankinter, Banco Sabadell y Unicaja, tanto en España como en su negocio internacional-, la sociedad destaca que las cifras muestran un “crecimiento sostenido“. Gracias a la creciente diversificación de sus ingresos. Y a una mayor eficiencia operativa que pone el foco en la reducción de costes y la digitalización.
“Se confirma que, pese a la caída de tipos de referencia como el Euríbor, las principales entidades de la banca española mantienen un desempeño robusto este año, y que este ajuste ha acelerado el cambio en el ‘mix‘ de ingresos del sector, que presenta ya un mayor peso relativo de las comisiones. Con crecimientos generalizados en fondos, seguros y gestión de activos”, zanja la consultora.


