Este domingo, el fútbol femenino vuelve a ocupar el centro del escenario en uno de los templos más emblemáticos del deporte nacional: San Mamés. A las 17:00 horas, el Athletic Club Femenino se enfrenta al Real Madrid Femenino en un choque que promete intensidad, contraste y emoción en la séptima jornada de la Liga F.
Las leonas, necesitadas de una victoria que les devuelva la confianza y el respaldo de su afición, buscarán imponer su carácter en casa. Enfrente, un Real Madrid en plena euforia tras una semana europea perfecta, llega con la mirada puesta en consolidarse como uno de los grandes aspirantes al título en esta temporada 2025/2026.
Confianza blanca rumbo a San Mamés
El Real Madrid llega a Bilbao con el viento a favor y la confianza por las nubes. El conjunto dirigido por Pau Quesada ha arrancado la temporada con paso firme y la convicción de que este puede ser su gran año. La reciente goleada por 6-2 ante la AS Roma en Champions no solo encarriló su pase europeo, sino que sirvió como carta de presentación del nuevo proyecto blanco: ambicioso, ofensivo y con una identidad cada vez más reconocible.

En ese festival europeo, el equipo brilló con luz propia. Alba Redondo y Caroline Weir firmaron dobletes, mientras que Lakrar y Eva Navarro redondearon una actuación coral. Pero más allá del marcador, el Madrid mostró una versión madura, intensa en la presión y con una capacidad de reacción que evidencia su evolución: ya no basta con competir, ahora quiere imponer su ley.
En el campeonato doméstico, las madrileñas se mantienen en la zona alta de la tabla con tres victorias, dos empates y una única derrota. En su feudo del Alfredo Di Stéfano, el rendimiento ha sido impecable: pleno de triunfos y un balance goleador de 9-1. Sin embargo, el equipo aún tiene cuentas pendientes lejos de casa, donde la falta de acierto en los últimos metros le ha costado puntos valiosos.

El nuevo Real Madrid de Quesada busca el equilibrio perfecto entre la verticalidad de sus extremos y la elaboración pausada en el centro del campo. Con jugadoras de jerarquía, el equipo ha ganado en carácter competitivo y en variantes ofensivas. El gran desafío ahora es mantener ese nivel de exigencia en escenarios de máxima presión como San Mamés, donde el ambiente y la intensidad del rival exigirán lo mejor de las blancas.
El Athletic, con urgencia de gol y puntos
El Athletic Club Femenino encara el duelo ante el Real Madrid con la urgencia de cambiar el rumbo. Tras un inicio de temporada marcado por la solidez defensiva pero escasa inspiración ofensiva, las rojiblancas llegan a la séptima jornada con apenas cuatro puntos en seis partidos y la necesidad de reencontrarse con la victoria.
Los números hablan por sí solos: empate sin goles ante el Tenerife, una dura derrota por 1-8 frente al Barcelona, caída ajustada ante el Deportivo Abanca y tres empates consecutivos frente a Espanyol, Sevilla y Atlético de Madrid. Un arranque que ha dejado al equipo en la parte baja de la tabla.

A pesar de los resultados, el conjunto bilbaíno mantiene su esencia: orden táctico, espíritu combativo y una estructura sólida. Sin embargo, la falta de precisión en los últimos metros ha sido su talón de Aquiles. Como visitante, el rendimiento ha sido discreto, pero en San Mamés las leonas han mostrado otra cara, alentadas por una afición que no deja de creer.
Este domingo, el estadio vivirá un ambiente especial con la incorporación de una nueva grada joven de animación, que promete devolver el aliento y la energía a las jugadoras. El reto es claro: transformar la disciplina defensiva en eficacia ofensiva, aprovechar cada balón parado y minimizar errores ante un rival que no perdona.
La cita ante el Real Madrid puede ser el punto de inflexión que el Athletic necesita para relanzar su temporada.
Todo por ganar
El duelo entre Athletic Club y Real Madrid promete un contraste táctico que lo convierte en uno de los partidos más atractivos de la jornada. Las blancas llegan como favoritas, impulsadas por su gran momento europeo y su poder ofensivo, pero San Mamés es territorio de resistencia, y las leonas buscarán convertirlo en una fortaleza.
Desde lo táctico, se espera un Madrid dominante, con posesión prolongada y presión alta. El Athletic, en cambio, apostará por un bloque compacto, transiciones rápidas y una defensa agresiva para frenar la fluidez rival. El centro del campo será el termómetro del partido: si el Madrid logra instalarse y romper líneas, inclinará el juego a su favor. Si el Athletic resiste y conecta en velocidad, puede sorprender. La eficacia en las áreas será decisiva.
También influirá el desgaste físico: el Madrid llega tras un exigente compromiso de Champions, mientras que el Athletic ha tenido más tiempo para preparar el encuentro. El empuje de la afición, con una grada joven que promete ambiente, puede ser el factor diferencial.