Ante la desoladora estadística que les brindábamos esta semana en la que el 93% de las españolas confesaban haber sentido miedo alguna vez al hacer deporte al aire libre, Artículo14 sale a la calle para preguntar a las mujeres que habitualmente hacen deporte.
En el madrileño parque de El Retiro nos citamos con Carmen, de 31 años. Para ella el running es parte de su vida desde hace años. Sale dos días en semanas a correr, ha participado en decenas de carreras populares y su objetivo ahora, tras haber completado la Media de Madrid, es acabar una maratón. “Yo prefiero salir de día” nos explica “y aunque no suelo sentir miedo en esa franja horaria sí que evito zonas en las que no haya gente“. De hecho, recuerda como “el kilómetro más rápido de su vida” lo corrió en una ocasión “en la que me metí en una zona un poco insegura de Barcelona. Me gustaría que las ciudades fueran más seguras”, afirma la runner.
Este es la tónica general cuando hablamos con otras mujeres. Claudia, de 21 años, lleva corriendo desde los 14. “Aunque a temporadas intermitentes”. Coincide con Carmen en que prefiere salir de día, “y mi madre también, porque aunque no sea peligroso sí tienes esa sensación de inseguridad, porque de noche tienes que estar más alerta, preocupada por lo que pueda pasar”, explica.
“Aunque a veces prefiero no encontrarme a nadie, porque si ves alguien que no te da buena sensación, piensas que es más fuerte y más rápido que tú, al final sabes que pueden hacer contigo lo que quieran”, relata.
Reconoce que “cuando salgo a correr a veces pienso que alguien va a raptarme. Corro más rápido”, asegura. A veces también la indumentaria que lleva puede suscitar algún comentario “pero yo nunca dejo de ponerme lo que quiera, si es verano y quiero salir en pantalón corto lo hago, aunque reciba la típica pitada de un coche, o gestos o miradas no muy educadas”, nos cuenta.
Lilian, de 28 años ni siquiera se plantea salir sola. “Yo prefiero esperar a que venga mi pareja, no se me pasa por la cabeza salir sola, lo tengo muy interiorizado“, reconoce a la vez que matiza que “le encantaría” poder salir a cualquier hora y por cualquier lugar.
Correr como terapia
Para Ainhoa, de 45 años, correr era algo tan cotidiano que llegó a salir hasta seis días en semana. “Ahora salgo dos o tres para descansar las articulaciones“.
Para ella, cuya profesión nada tiene que ver con el deporte, sino con la abogacía, “correr es una terapia, por eso voy al final del día para descargar el estrés que haya podido acumular y llegar a casa y entregarme a mi familia en las mejores condiciones, entonces salgo a las ocho que en invierno ya es de noche y me gusta menos”. “Intento correr por sitios que estén bien iluminados y donde haya afluencia de gente, que no es lo ideal para correr pero es lo que a mi me da seguridad”.

Los lugares idóneos para la práctica del running no son los que esta madrileña elige, “los sitios que son muy bucólicos, los parques, los bosques si que me han generado alguna sensación de inseguridad y por eso prefiero evitarlos“.
Cuando le preguntamos sobre clubes de corredores o hacerlo acompañada, asiente con entusiasmo aunque para ella es una forma también de tener un espacio consigo misma “de introspección, de reflexionar, a veces incluso mientras corro encuentro soluciones a problemas o llega mi versión más creativa”, nos explica Ainhoa.
Clara de 63 años se acerca curiosa ante nuestra cita de corredoras. Ella es italiana y no lleva mucho tiempo viviendo en Madrid, por lo que no sale acompañada “no conozco mucha gente aún así que voy siempre sola”, explica sobre su sus hábitos para mantenerse en forma, aunque le encantaría “sería una forma de sentirme más segura y más entretenida“.
“Antes corría rápido, ahora mucho más lento, pero sigo saliendo dos veces por semana” nos asegura. Cuando le preguntamos por la seguridad mantiene que “a mi me gustaría no tener que sentir miedo, ser como la Roca, el actor, grande y fuerte y no sentirme vulnerable”.
El caso de Ángela
Ángela Cánovas se hizo viral cuando, angustiada, compartió el acoso que sintió en una mañana de running por parte de un hombre que la asustó. Este video recibió miles de comentarios (no todos de apoyo) y visibilizaba una situación, la que viven a veces algunas mujeres, y la que nuestra carrera, Correr Segura quiere confrontar.
@ac2ality La corredora Angela Cánovas denuncia el acoso que reciben las mujeres al salir a correr

