ATLETISMO

Sophie Power, la corredora que quiere cambiar el mundo paso a paso

Más que en kilómetros, la historia de Sophie Power se mide en luchas: por correr, por ser madre y por transformar el deporte para todas.

Sophie Power es una ultrafondista británica que ha roto moldes dentro y fuera del deporte. Más que kilómetros, su historia se mide en la lucha por la igualdad y la inclusión de las mujeres en las competiciones de resistencia.

Empezó desde abajo

Sophie Power nunca soñó con ser atleta. De hecho, durante su etapa escolar, el deporte no solo no le interesaba, sino que representaba una pequeña humillación: en una carrera de apenas una milla, terminó penúltima. Pero lo que parecía una historia sin futuro deportivo dio un giro inesperado años después.

Sin haber corrido más de unos pocos metros en su vida adulta, Sophie decidió inscribirse en una de las pruebas más duras del planeta: la Marathon des Sables, 250 kilómetros a través del desierto del Sáhara, cargando todo lo necesario para sobrevivir. Un reto reservado para unos pocos, que ella convirtió en punto de partida.

Desde entonces, no ha dejado de correr. Ha completado más de 50 ultramaratones en todos los continentes, consolidándose como una de las voces más reconocidas y resistentes del ultrafondo femenino. En su palmarés figuran carreras que intimidan solo con escucharlas: la mítica Spartathlon (246 kilómetros), la exigente UTMB (171 kilómetros por los Alpes), la interminable Spine Fusion (431 kilómetros por el Reino Unido), así como desafíos por etapas en lugares remotos como Bután, Nepal o el propio Sáhara.

Además, ha defendido los colores de Gran Bretaña en el Campeonato Mundial de 24 Horas, logrando una marca de 227 kilómetros recorridos en un solo día y convirtiéndose en la primera británica en cruzar la meta en aquella edición. Y por si fuera poco, más recientemente estableció un Récord Guinness por correr durante 48 horas seguidas en una cinta de correr, y se convirtió en la mujer más rápida en recorrer la longitud de Irlanda.

Una imagen que cambió las reglas del juego

En 2018, una imagen sacudió al mundo del deporte. Durante la Ultra-Trail du Mont-Blanc (UTMB), una de las carreras de montaña más duras del planeta, Sophie fue fotografiada amamantando a su bebé de tres meses en un punto de avituallamiento. La escena se volvió viral y desató un debate global sobre maternidad, equidad y el lugar de las mujeres en el deporte de resistencia.

Lo más impactante es que Sophie no debía estar allí. Había ganado su plaza en una edición anterior, pero al quedar embarazada solicitó aplazarla. La organización lo rechazó: el embarazo no se consideraba motivo válido, al contrario que una lesión. Sophie decidió correr de todos modos, con su cuerpo aún en recuperación y su bebé en plena lactancia.

La fotografía de Sophie Power con su hijo que se hizo viral en 2018
Alexis Berg, Runner's World

La logística fue tan extrema como la propia carrera: puntos para extraerse leche, un equipo de apoyo familiar y una estrategia marcada por la doble resistencia de quien corre y cuida. Cruzó la meta, pero sobre todo, abrió una conversación que el deporte necesitaba.

“El sistema nunca se diseñó pensando en las mujeres”, declaró después. Con esa premisa nació SheRACES, el proyecto que fundó para transformar las carreras y hacerlas más inclusivas. Desde la maternidad hasta la visibilidad, Power trabaja para que las mujeres puedan competir en igualdad de condiciones.

Sophie Power: “El sistema nunca se diseñó pensando en las mujeres”

Hoy, Sophie Power sigue corriendo y liderando el cambio. Paso a paso, kilómetro a kilómetro, hacia un deporte más justo para todas.

SheRaces busca la igualdad

SheRACES nació de una idea simple pero revolucionaria: que los organizadores de carreras comprendan y atiendan las necesidades reales de las mujeres. Lo que comenzó como una lucha por políticas de aplazamiento por embarazo se ha convertido en un movimiento que impulsa cambios profundos en horarios de salida, categorías femeninas, acceso a instalaciones adecuadas, visibilidad mediática y trato igualitario a atletas élite y amateur.

“Muchos organizadores me contactaron después de ver la imagen del UTMB. Me confesaban que nunca se les había ocurrido que las mujeres viven las carreras de forma distinta. Sentían vergüenza, pero también ganas de aprender”, relata Sophie.

Hoy, SheRACES colabora con decenas de carreras en todo el mundo, ha publicado una guía de inclusión basada en encuestas a corredoras y experiencias reales, y ha logrado implementar cambios concretos. Porque para Sophie, correr no debería ser una lucha por encajar, sino una experiencia de libertad.

Sophie Power con uno de sus hijos.
@ultra_sophie

Corredora, madre y activista

Además de corredora de élite, Sophie Power es una profesional con un currículum tan sólido como su resistencia. Ha trabajado en banca de inversión, capital privado y tecnología medioambiental, fue directora financiera en una agencia global de marketing y hoy asesora a empresas enfocadas en el impacto social.

Su compromiso con la equidad de género va más allá del deporte: es embajadora de la Active Pregnancy Foundation, que la nombró Mujer del Año 2023, y miembro de la organización Women in Sport, que impulsa la igualdad en todos los niveles del ámbito deportivo. También es una voz poderosa en conferencias, campañas publicitarias y medios especializados. Ha protagonizado iniciativas como Time To Hear Me Roar y The Journey from Pregnancy to Performance con la marca HOKA, y publica regularmente en revistas como Runner’s World y Women’s Running.

Su mensaje es claro: el deporte debe ser una herramienta de transformación accesible para todas.

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