Rafael Román es el presidente de la Comisión Federal de Ética y Garantías del PSOE, que investiga los casos de acoso dentro del partido. Un comienzo de texto que se puede antojar insípido, ya que este nombre no ha copado titulares como sí lo han hecho los hombres de confianza de Sánchez, como lo pueden ser José Luis Ábalos, Santos Cerdán, o Paco Salazar.
Rafael Román es de los primeros “hombres” de Sánchez. Le ayudó a darse a conocer en Andalucía años antes de que en 2016 diera el salto a la secretaría general socialista. Y formó parte del clan andaluz que lo catapultó al liderazgo del partido desde el “kilómetro cero” de Dos Hermanas del que salió el conocido como “Clan Peugeot”. Clan al que perteneció, precisamente, el acusado por acoso sexual durante su etapa en Presidencia, Francisco Salazar. Así que el hombre encargado de investigarle ha formado parte de su círculo de confianza durante años.
El propio Sánchez lo recoge en su libro Manual de Resistencia: “En aquellos tiempos hay varias personas del partido que van fortaleciendo sus vínculos conmigo: José Luis Ábalos, Adriana Lastra, Santos Cerdán, Sofía Hernanz, Francisco Quico Toscano, Susana Sumelzo y Rafa Román son algunos de ellos. Vamos creando una complicidad muy especial que, en algunos casos, no existía”.
Lo que establece el Protocolo anti acoso del PSOE
El protocolo anti acoso del PSOE establece, en su punto 7, que las denuncias registradas dentro del partido serán analizadas por tres personas. Una perteneciente a la Comisión Federal de Ética y Garantías, y dos expertas. Desde que las mujeres denunciantes de Salazar registraran la primera denuncia en julio de este año a través de los canales internos, cinco meses han pasado sin que se haya avanzado en las investigaciones. Incluso, llegaron a desaparecer las denuncias del sistema durante un día, según publicó Eldiario.es, y que desde Ferraz se achacó a un error del sistema.

Este medio también informó de que, mientras no se tenía conocimiento de las investigaciones, la ministra portavoz Pilar Alegría comió en un restaurante céntrico de Madrid con Salazar, y que al haberse paralizado las investigaciones las víctimas quedaron desprotegidas. Asimismo, y según ha podido saber Artículo14, las mujeres trabajadoras de Presidencia temen usar los canales internos de Moncloa al depender la resolución final del informe de la Abogacía del Estado y de miembros de Presidencia.

La presión mediática, y las continuas publicaciones de conductas machistas dentro del partido -este medio también ha tenido constancia de un caso de acoso a una mujer socialista en el exterior, que Ferraz sí “solucionó”– han provocado que desde el PSOE haya anunciado, según ha adelantado La Sexta, que la resolución de las investigaciones se hará pública esta semana. Una gesta en tiempo récord, tras meses de parálisis, complicada para el partido, ya que podría haber más mujeres animadas a presentar denuncias contra Salazar.
La composición del Órgano contra el Acoso no es pública
Desde Ferraz aseguran que la composición del Órgano contra el Acoso de sus protocolos no es pública, ya que podría interferir en las investigaciones con la presión externa. Lo que sí se conoce es quien es el presidente de la Comisión Federal Ética y Garantías, y no es un dato superfluo el que quien ha tenido paralizadas las investigaciones sea del círculo de Salazar.
Dos Hermanas, el escenario en que se fraguó todo
Román fue nombrado para el cargo en la Ejecutiva Federal de diciembre de 2024. La forma que tuvo Sánchez de compensar su lealtad, ya que es un órgano de gran relevancia al llevar los procesos disciplinarios del partido.
“Román es íntimo de los Toscano y los Salazar”, aseguran fuentes socialistas andaluzas a este medio. El apellido Toscano es muy conocido en Sevilla. Concretamente, en el municipio de Dos Hermanas, en el que Francisco Toscano ganó la alcaldía con mayoría absoluta durante diez años, hasta que la dejó en enero de 2022. En la actualidad, está siendo investigado por la UCO por prevaricación al “enchufar” presuntamente a Salazar durante su etapa como edil entre 2012 y 2017.
La vinculación de Salazar con Toscano no se ha interrumpido durante los años. Cuando este verano se produjeron las acusaciones que frenaron su ascenso, se marchó precisamente a Dos Hermanas. El ex alcalde habló con la prensa y aseguró que su amigo de partido “no se reconocía” en dichas acusaciones. El municipio sevillano es lugar seguro para el clan sanchista.

Fue el kilómetro cero del Peugeot 407 en el que Sánchez viajó en 2017 junto a Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García, recorrieron localidades de España para hacerse con el aval de la militancia que lo erigiría con la Secretaría General del PSOE. Sánchez premió su lealtad con los más altos cargos. A todos los que viajaron con él, y no sólo dentro del coche. A Salazar, en el foco de la investigación asegurada por el PSOE, ha tenido una carrera prometedora: director general del Departamento de Análisis y Estudios de la Presidencia del Gobierno (2018-2019), director adjunto a la Presidencia (2020-2021), como secretario general de Planificación Política del Gabinete de la Presidencia (2022-2024) y como secretario general de Coordinación Institucional.
Román, apoyo incondicional de Sánchez
El 28 de diciembre de 2016, después del fracaso de Sánchez al convocar primarias que forzaron su dimisión, hubo un grupo de fieles -diputados, alcaldes…- que se reunieron en Madrid para demostrar que su candidato aún seguía teniendo apoyos. Entre ellos, se encontraba Rafael Román.



