Yolanda Díaz ha sido la primera en mover ficha. Después del portazo de Junts, la líder de Sumar ha querido dejar clara la posición del socio minoritario del Ejecutivo: “Junts tiene que decidir si quiere contribuir a Catalunya o quiere ser útil para PP y Vox”, sostienen fuentes próximas a la vicepresidenta segunda. Desde su entorno insisten en que “Yolanda Díaz lo ha dicho muy claro” y que, pese al bloqueo, “nosotros vamos a seguir negociando ley a ley, como hasta ahora”.
El mensaje es inequívoco: frente al cierre de filas de los independentistas de Puigdemont, Sumar apuesta por la vía del diálogo. “Este es el hemiciclo que tenemos, así es la democracia y aunque sea difícil hay que intentar sacar las cosas adelante”, resumen a este periódico fuentes de la formación, que descartan un adelanto electoral inmediato.
En el Gobierno, y especialmente en Sumar, creen que Junts busca recuperar protagonismo tras varias semanas en las que el Ejecutivo ha conseguido mantener cierta estabilidad.

“Gobernar así es muy complicado”
Pero fuera del espacio del Gobierno, el diagnóstico es menos optimista. El PNV, uno de los socios más fieles durante esta legislatura, reconoce abiertamente las dificultades. “Gobernar así es muy complicado”, admiten fuentes jeltzales. Aitor Esteban ya advirtió esta semana que es “muy difícil” agotar la legislatura sin Presupuestos y que el Ejecutivo “se está tomando con calma” las negociaciones.
En declaraciones a Onda Vasca, Esteban deslizó incluso que no descarta elecciones el próximo año. “Continuar así toda la legislatura, por posible, es posible”, dijo, “pero el Gobierno va a tener menos fuerza para sacar proyectos adelante”. En el entorno del PNV, el sentimiento es compartido: “El Gobierno debería haber tenido ya unos Presupuestos. No haber aprobado ninguno en toda la legislatura dice mucho de la falta de coherencia de la mayoría”.

Tensiones en la izquierda
Las diferencias se hacen también evidentes dentro del propio espacio de la izquierda. Mientras Sumar se mantiene en la idea de resistir “negociando ley a ley”, Podemos considera que la legislatura “está muerta”. La eurodiputda, Irene Montero, ha acusado al Gobierno de “inacción” y de haber provocado la falta de apoyos para las cuentas públicas.
Desde Sumar, sin embargo, rechazan ese diagnóstico. “Vamos a seguir negociando como hasta ahora”, recalcan fuentes de la formación. En el equipo de Yolanda Díaz creen que el PSOE tiene margen para llegar a acuerdos “selectivos” con distintas fuerzas y que no hay motivos para dar por agotada la legislatura. “Lo que hay es un bloqueo, pero no un final de ciclo”, apuntan.
La co-coordinadora de Sumar, Lara Hernández, también ha defendido que no se está llegando al fin de la legislatura. Su apuesta pasa por “mantener el trabajo parlamentario” y concentrarse en las iniciativas sociales ya en marcha, como la ley de cuidados o la reforma del subsidio por desempleo.

La legislatura en equilibrio
En Moncloa asumen que el bloqueo es severo, pero no definitivo. El Ejecutivo sigue intentando reconstruir puentes con Junts, aunque el espacio de Yolanda Díaz advierte de que el tiempo juega en contra.
En el entorno de la vicepresidenta mantienen el tono institucional, pero sin ocultar cierta preocupación. “Pantalla a pantalla”, reconocen, y dejan claro que Sumar va a pelear hasta el final para que no se convierta en una legislatura perdida.
Mientras tanto, los socios miran de reojo las encuestas y los movimientos de Pedro Sánchez. Todos coinciden en que el presidente tiene el botón de las elecciones en su mano y que solo él decidirá cuándo apretarlo. La cuestión, coinciden varios portavoces consultados, es si antes podrá aprobar algo más que la resistencia.


