El joven meteorólogo Jorge Rey, conocido por adelantarse a fenómenos extremos como la borrasca Filomena, ha vuelto a generar expectación con sus últimas predicciones. Esta vez sus advertencias se centran en el huracán Erin, un sistema atlántico que, aunque llegará debilitado a la península ibérica, podría dejar tras de sí un escenario de inestabilidad generalizada que preocupa tanto a aficionados como a expertos.
En su canal, Rey explicó que Erin perderá fuerza en su avance hacia Europa y se convertirá en exhuracán, pero aun así traerá consigo rachas de viento intensas, tormentas puntualmente fuertes y un descenso notable de las temperaturas. En sus propias palabras, “las tormentas no serán tan importantes como se esperaba, pero sí se harán notar en zonas del Cantábrico y, de manera especial, en Aragón y Cataluña”.
El último gran episodio del verano
Para el joven burgalés, este episodio se recordará como “la última borrasca profunda de la temporada 2024-2025”, justo en la recta final de agosto. Una visión que coincide con la de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), que también prevé que el paso de Erin sirva como punto de inflexión entre el verano y el otoño. Según los datos oficiales, las temperaturas máximas descenderán de forma generalizada, aunque en el litoral sudeste peninsular y el este de Baleares podrían incluso subir ligeramente debido a la interacción del aire húmedo y cálido con el sistema.

Zonas bajo aviso y posibles riesgos
Ante la llegada de este fenómeno, la AEMET ha activado el aviso naranja en varias provincias del norte y noreste, donde el riesgo de tormentas y granizo será más elevado. Entre las áreas señaladas destacan Huesca, Castellón, Teruel y Lleida, esta última especialmente en sus zonas pirenaicas, donde las precipitaciones intensas y el viento podrían complicar la jornada.
Erin, un huracán debilitado pero aún influyente
El huracán Erin nació en aguas del Atlántico, donde llegó a alcanzar categoría de tormenta tropical antes de perder fuerza en su desplazamiento hacia el continente europeo. Aunque ya no conserva la estructura de un huracán, los meteorólogos recuerdan que los llamados exhuracanes pueden alterar significativamente la dinámica atmosférica de los países que atraviesan, actuando como borrascas muy activas.
Más allá de los efectos inmediatos, Rey ha recurrido a su conocido método de las cabañuelas para anticipar cómo podrían comportarse los próximos meses. Según explicó, ya tiene pistas sobre si el otoño traerá más humedad de lo habitual o si el invierno vendrá marcado por nevadas abundantes y olas de frío. Sin embargo, ha preferido reservar esas predicciones para futuros vídeos, manteniendo en vilo a sus seguidores.
Un cambio de ciclo
Además de que Erin no solo supone un episodio meteorológico puntual, sino también una transición hacia un nuevo ciclo climático. El paso de este exhuracán marcará el final del verano y abrirá la puerta a patrones más propios del otoño, con una atmósfera más inestable y un descenso térmico que comenzaremos a notar de inmediato. Con este análisis, Jorge Rey va un paso más allá: no solo alerta del impacto de Erin en los próximos días, sino que también anticipa que el fenómeno es el inicio de una etapa en la que los cambios climáticos se harán cada vez más evidentes en España.