La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) puso ayer negro sobre blanco una cifra de la que habitualmente no son conscientes los ciudadanos: la deuda per cápita. Si la población realmente tuviera que asumir el pago como propio, en algunas comunidades el dato generaría gran preocupación. En Cataluña y Valencia supera los 11.000 euros. Con la condonación parcial de la deuda autonómica, una rebaja de media de casi 1.700 euros (1.688 euros por persona), el endeudamiento se reduce hasta los 9.000 euros en las dos más endeudadas. En la parte baja de la tabla, las personas residentes en Cantabria pasan de 2.990 euros, con datos del segundo trimestre de 2025, a 1.549 euros tras la quita.
El organismo supervisor de las cuentas pública, que preside Cristina Herrero, constata que en la condonación propuesta “existen diferencias significativas entre comunidades autónomas“. Así consta en su última edición del Observatorio de Deuda, publicado ayer, donde estima que la condonación reducirá el gasto por intereses en 2.532 millones de euros en el primer año de su aplicación. Además, eleva el ahorro de forma acumulada hasta casi 15.700 euros (15.657 millones) hasta el año 2030.
Con un importe de 83.252 millones asumido por el Estado, la condonación equivale al 24,3% de los 342.804 millones de deuda autonómica. El impacto entre las regiones también varía en función de su volumen de endeudamiento. Destacan Canarias y Andalucía como aquellas en las que prácticamente la mitad de su deuda será asumida por el Estado. Por el contrario, en las más endeudadas, Cataluña y Valencia, apenas llega al 20%.
Impacto ciudadano, en detalle

Desde el punto de vista de los ciudadanos y ahondando en el detalle de las “diferencias significativas”, la AIReF constata una reducción de per cápita superior a 2.000 euros en Castilla-La Mancha, Andalucía, Cataluña, Región de Murcia y Comunidad Valenciana. En una horquilla próxima a la media nacional, con valores entre 1.400 y 1.700 euros se sitúan Extremadura, Aragón, Castilla y León, Asturias, Galicia y Canarias. Los importes más reducidos, entre 1.200 y 1.400 euros, corresponden a Baleares, La Rioja, Cantabria y Madrid.
Y aunque la condonación reduce el impacto per cápita, la deuda per cápita, la deuda no baja de 2.000 euros, con la excepción de Cantabria. Por detrás de Cataluña y Valencia, en un rango de entre 6.300 y 5.000 euros, están Murcia, Castilla-La Mancha, Aragón o Baleares.
Población ajustada
La aplicación de la “población ajustada” no modifica el orden de las comunidades en función de su deuda, pero sí eleva el importe de la condonación en las comunidades más endeudadas. De esta forma, la AIReF concluye que, con la excepción de Castilla-La Mancha, “el ajuste por población ajustada favorece a las comunidades que ya registraban mayores importes de condonación en términos per cápita, reforzando así su posición relativa”.
A su vez, el supervisor puntualiza que un comportamiento similar se observa en Canarias, Baleares y Madrid, donde los valores aumentan al considerar la población ajustada. “Por el
contrario, en el resto de las comunidades el ajuste opera en sentido contrario, reduciendo las diferencias y dando lugar a una distribución más homogénea a la baja”, aclara.
Impacto en el PIB
La condonación de la deuda impacta favorablemente en su reducción en relación con el PIB. Las simulaciones de la AIReF estiman una reducción de la deuda autonómica conjunta en 5,1 puntos de PIB. Las mayores reducciones relativas corresponden a Andalucía (8,6 puntos), Castilla-La Mancha (8,5 puntos), Murcia (7,7 puntos) y Comunidad Valenciana (7,4 puntos), todas ellas por encima de la media. No obstante, algunas comunidades seguirán registrando niveles elevados de endeudamiento, superiores al 20% de su PIB.
La medida tiene además un efecto positivo adicional, ya que permite adelantar a prácticamente la mayoría de las comunidades autónomas el cumplimiento del límite legal de deuda autonómica del 13% del PIB. Esta ratio estaba inicialmente prevista para 2041. Como detalla la AIReF, la mayoría de las comunidades autónomas lograrían situarse por debajo de ese umbral antes de 2029; Castilla-La Mancha adelantaría su cumplimiento a 2033. Únicamente, la Comunidad Valenciana, Murcia y Cataluña continuarían sin alcanzarlo dentro del horizonte de proyección. La AIReF sitúa la reducción en el año 2050.
No facilita incrementar otros gastos

Frente al mensaje trasladado desde Hacienda de que los ahorros de intereses permitirían a las autonomías dedicar estos importes a otros gastos, la AIReF reafirma su posición. Entiende que la quita mejora la sostenibilidad financiera y refuerza la capacidad de acceso a los mercados, pero vuelve a advertir de que no genera margen para incrementar el gasto corriente. La premisa es que los pagos por intereses quedan excluidos de la regla de gasto.
“Destinar el ahorro a gasto en lugar de reducir deuda, sin un ajuste por parte de la Administración Central, podría deteriorar la posición fiscal del conjunto de las Administraciones Públicas”, alerta. En este sentido, el informe recuerda que la medida debe ir acompañada de condicionalidad vinculada al cumplimiento de las reglas fiscales para evitar riesgos de incentivos fiscales inadecuados. Además, la AIReF considera que debería enmarcarse en una reforma integral del sistema de financiación autonómica que refuerce la corresponsabilidad y la disciplina fiscal. “Una revisión estructural ayudaría a evitar riesgos de incentivos inadecuados y garantizar una mayor equidad territorial y sostenibilidad a largo plazo”, enfatiza.
Próximos pasos
Cabe recordar que el Consejo de Ministros aprobó el pasado 2 de septiembre, en primera vuelta, el Anteproyecto de Ley de Medidas Excepcionales de Sostenibilidad Financiera para las Comunidades Autónomas de Régimen Común. El plazo de aportaciones se cerró el pasado 25 de septiembre. Para continuar su tramitación, el Ejecutivo debe aprobarlo en segunda vuelta como proyecto de ley en el Consejo de Ministros y remitirlo al Parlamento.

